Inevitable Y Oscura Tentación

La casa Roja

Parte I

Atravesar aquellas puertas que había logrado olvidar y que solo veía en sueños, me parecía una locura, no es la misma casa en la cual me sacaron el alma; es claro, pero si una que esta adornada tal cual recordaba la antigua, de tan solo pensar lo que pasará en unas horas, me dan ganas de salir corriendo, pero si lo hice una vez, lo puedo hacer una vez más ¿ verdad? , trato de autoconvencerme de que es posible, pero ni yo misma sé cómo lo haré esta vez. Dije estar preparada, pero estar aquí hace que todo sea más complicado.

Estoy en una pequeña habitación, pintada con colores pasteles, cortinas trasparentes, una pequeña cama, una tv colocada sobre la mesa de noche
y por último hay una puerta más , diferente a la cual entre, la abro y hay un sucio retrete con una ducha, donde las paredes están más negras que las mentes de los sujetos que vienen aquí, inmediatamente la cierro, me siento en la cama, al menos esa está limpia.

Después de aquellas últimas palabras que le dije a Erick, me volvieron a tapar los ojos, solo escuché un " terminaremos después " y " llévensela" para luego ser metida aquí en donde ya llevo poco más de una hora.

Me recuesto en lo que parecieron breves segundos en la cama, y eso ha sido suficiente para caer en un sueño profundo.

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Unos golpes desesperados me despiertan, trato de ubicarme, recordando en donde estoy , de nuevo el mismo estruendo al otro lado de la puerta, me hacen reaccionar y me encojo en la cama, sabiendo que quien entre me dará los primeros avisos de salida. Nadie habla, solo sigo escuchando golpes y más golpes.

- Maldita sea. No está aquí. - esa voz. Salgo disparada a la puerta, pero no puedo abrirla. Forcejeo con el pomo de esta.

- Ciara? Eres tu?

- ¿ Daniell?

- oh mierda, te hemos encontrado. Jack, la tengo. Segundo piso, a la derecha, tercera puerta . Tranquila. Vi tu mensaje, e inmediatamente salimos a buscarte.

Pues si, la persona a quien le envié el mensaje no fue Akon, sino a Daniell, necesitaba alguien que no enloqueciera en cuanto me desapareciera o se diera cuenta en donde estaba, sabía que Daniell era la respuesta, no lo dude dos veces para comunicarle lo que sucedió aunque hayan sido breves palabras. Mi plan era que llamaran a Akon, al cual no vi a mi salida del café y vinieran por mi.

- la sombra, ¿esta aquí?

- no belleza, lo siento pero no. Intente localizarlo pero no di con él, así que llame al inútil de Jack.

- ey, que tu la hayas encontrado primero no me hace un inútil, de acuerdo.

- Pues no hiciste mucho tampoco.

- buscaba en los demás pisos.

- ah si, o ¿mirabas las chicas de los demás pisos?

- oigan, oigaaan ¿ qué creen que hacen ? Ambos son idiotas.

- lo siento Mischii . No es momento de discutir con ese - escucho un gruñido y sé de donde proviene o más bien de quien, - Ahora, mishii aún no podemos sacarte.

- ¿ qué? ¿Por qué no? Por Dios, ya se va a  hacer de noche, no saben lo que pasará. Deben sacarme , abran la puerta. Ábranla.

- No, no  es el momento. Debes ... esperar un poco más, no te perderemos de vista, actuaremos en el momento justo. - ahora es Daniell quien habla. Escucho pasos alejarse, y me deslizo por la puerta sabiendo que son ellos quienes se han ido, no entiendo porque no me han sacado, que debían esperar, y ¿ por qué Akon no está aquí? ¿ a dónde carajos se fue ?