Capítulo 10

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Gente linda aquí les dejo uno de los dos capítulos de la semana, en esta ocasión solo serán dos, el otro aun no termino de revisarle la ortografía pero ya estoy muerta, uno de mis perros ha estado enfermo, además de que lo mordió un perro el triple de su tamaño y han sido días de mucho estrés en casita, por la tardecita dominguera les subo el Capítulo 11.

PD: yo pensando en que sería una historia corta, con capítulos de no mas de dos mil palabras y aquí estamos ya en el capítulo 10, sentando las bases porque ni de cerca estoy donde se va a presentar el conflicto y con capítulos que sobrepasan las tres mil palabras.


- ¿Es mi imaginación o este día ha sido eterno y demasiado cansado? –Daniela lanza la pregunta al aire una vez se desploma en una de las butacas del café haciéndole compañía a Nela y Juan David, habiendo despedido a su último cliente del día.

-Ha sido el mismo día de siempre- menciona el cocinero que devoraba las papas a la francesa que colocó al centro de la mesa.

-Pero con la diferencia de que Poché no está- acota Nela observando a la castaña que tiene enfrente, sin embargo, no logra captar nada fuera de lo común- ¿has hablado con ella?

-Solo el mensaje que nos envió al grupo, supongo que ha de estar pasando el tiempo con su familia y no tiene tiempo de estar pegada al teléfono-menciona con resignación- ¿ustedes han hablado con ella?

-Lo mismo que tu- responde Juan David- pero bueno si deseo irme temprano será mejor que comience con la limpieza del lugar- se recorre de la butaca para así salir de ella, dejando solas a Daniela y Nela, una frente a la otra.

-Espera Crim, ese es mi trabajo- Daniela hace el intento de levantarse, pero Nela la interrumpe.

-Descuida Daniela, yo le pedí que te cubriera porque necesito hablar contigo de algo importante- Nela capta su atención, pensando que la va a reprender en algo debido a la seriedad con la que salen sus palabras.

- ¿hice algo mal? - el temor que siente hace que su voz salga entrecortada- ¿estoy despedida?

- ¿Qué? No, no, por supuesto que no, Daniela tu eres de las mejores empleadas con las que me ha tocado trabajar toda mi vida.

- ¿entonces? ¿Por qué estás tan seria?

-Eso es simple: estoy preocupada por ti y no soy la única que lo hace- responde haciendo referencia a Poché- la situación con tu ex novio me parece ser lo suficientemente peligrosa como para que sigas viviendo sola en ese apartamento que, a como Poché me contó, no es habitable, al menos no en épocas invernales.

-Nela no se tienen que preocupar por mí, ya me las arreglaré- responde tratando de restarle importancia a sus carencias, pero sin saber cómo lograr hacer que las cosas funcionen ya que con el embarazo sus gastos han incrementado y hacer reparaciones en el apartamento que habita le resulta imposible.

-Es que ese es el problema Daniela, no importa lo que digas, te queremos y esa emoción hace que nos preocupemos por ti y por tu bienestar- extiende su mano para tomar la de la castaña- sobre todo con la pequeña Charlie creciendo dentro de ti, en verdad que lo último que deseo es que ese mal hombre se acerque a ti con la intención de hacerles daño.

-No creo que sea capaz de hacerme daño- responde Daniela.

-Tampoco lo creíste capaz de engañarte y abandonarte al decirle de tu embarazo- le responde- incluso se atrevió a golpearte, eso a mí ya me dice mucho de él y por lo tanto mi preocupación se incrementa.

-Nela tu mejor que nadie conoce mi situación, sabes que en este momento no tengo forma de buscar un apartamento en otra zona porque todo mi dinero va para los pagos de mi atención médica.

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