26. Mejor en triada

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Tirita donde está; todo suena más fuerte, más insoportable. Apenas siente una presencia parada junto a él, le coge de las piernas para derribarlo, cogiendo el cuchillo y clavándolo en la frente del hombre armado. Lo hace un par de veces más, manchándose de sangre al instante. Le escupe en la cara antes de levantarse y caminar hacia donde iba.

— ¡Jungkook espera!

Toma un cuerpo del piso para protegerse de la lluvia de balas. Mingyu aprovecha el momento para empujar a quien lleva esa Minigun tan molesta. Lo pisa en el rostro, dejándole inconsciente y Wonwoo toma el arma, usándola en contra de quienes acompañaban al contrario.

Jungkook tira el cuerpo y sigue caminando, algunas balas lo rozaron, pero no le importa, tiene que llegar a donde está Jimin. Tiene que salvarlo de Ming antes de que sea tarde. Además ¿Quién es el gigantón del que hablan? ¿Es alguien bueno? ¿Es alguien malo? No confía en nadie cuando se trata de la seguridad de su Jimin.

Debe ir por él lo más pronto posible.

. . .

Wonho entra a la primera habitación que encuentra, es un almacén con muchas cajas cerradas y apiladas. Deja a Jimin en el suelo y quita las vendas empapadas, siseando adolorido al mismo tiempo que Jimin lloriquea de dolor. Es muy posible que las heridas se hayan infectado en este breve periodo de tiempo.

—Debe haber algo aquí... Un momento.

Jimin se retuerce dónde está, con el rostro aun inundado en lágrimas. No sabe que le duele más. Si el interior o el exterior. Sus piernas o entre ellas; su mandíbula o sus labios maltratados. Empieza a llorar más fuerte, espantando a Wonho, creyendo que alguien había llegado hasta acá, pero no hay nada.

—Jimin, necesito que te calmes un poco. Entiendo que estes alterado, pero si no-

—Jung-Jungkook está... Jungkook-

¿Y si lo atraparon? Podrían estarlo lastimando también. No quiere que le hagan nada a su Jungkookie. Da quejidos desesperados, echando la cabeza atrás. Se quiere levantar e ir a ayudarlo, debe ayudarlo. Ellos lo tocaron, le hicieron mucho daño y Jungkook jamás debió recibir algo así.

Todo el tiempo lo cuidaron y protegieron, evitaron que llegara a esos extremos tan horribles, vigilando que cualquiera cerca suyo no tuviera tal intensión; pero ahora sucedió. Rompieron esa barrera tan específica que mantuvieron en pie desde el principio.

Desde que vieron a ese tierno y pequeño adolescente con ojos de cervatillo y timidez hasta de su propia sombra.

—Iré por él tan pronto como hagamos algo con esto.

Wonho regresa a buscar ropa y la encuentra. Toma lo que más pueda parecerse a vendas y quita las que tiene puestas. No hay mucho más que agua aquí, por lo que limpiar las heridas sangrantes con eso es lo único que tiene a la mano. Jimin grita tan fuerte que podría explotarle los tímpanos.

~ * * * ~

Escucha gritos muy familiares. Avanza en esa dirección, llevándose a todo lo que aparece delante suyo. No presta atención a la herida de bala en su hombro, tampoco a la puñalada en su costado o el corte en su cuello. Debe seguir avanzando y llegar hasta él. Detener esos gritos tan desesperados.

No es consciente de donde está, hasta el punto en que, por momentos, no ve pasillos; sino aquel enorme agujero lleno de Yagtalja devorando a Yoongi. Matando a todo lo que está delante. Sea un humano armado, sea un Yagtalja queriendo devorarlo. No le interesa. Todo lo que no sean sus novios, es una amenaza. Siempre han sido una amenaza.

Solo se tienen entre ellos. Los demás, son unos traidores, un enemigo que aún no ataca y espera su mínimo flaqueo para destruirlos de la peor forma.

No quiere vivirlo de nuevo.

Sempiternal: Battlefield || BOOK 5#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora