29. Limpiando impurezas

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Se aclara la garganta y abre los ojos, sintiéndose paralizado, pero en el sentido del cansancio y no porque su cuerpo esté maniatado. Jungkook consigue removerse un poco en su sitio, ve al techo y nada más, su cuello en sí parece estar paralizado. Vuelve a toser y forzándose a ello, consigue ver a la derecha, encontrando a Jimin profundamente dormido con varias máquinas conectadas a él.

¿Debería intentar moverse? No.

¿Debería quedarse tranquilo hasta que alguien venga a decirle que todo está bien? Sí.

¿Obedecerá su sentido común? Por supuesto que no ¿Quién creen que es?

Es Jeon Jungkook y a más tonta la decisión, más seguro es que la hará. Siempre y cuando involucre estar cerca o en contacto de Jimin. Logra estirar su brazo, con una vía conectada y un yeso bastante grueso puesto. Alcanza la camilla y hace esfuerzos por arrimar la suya, consiguiéndolo en su persistencia.

Toma la mano de Jimin, así sea un poco con sus dedos obstruidos por el yeso. Acaricia la piel tibia y los dedos cortos del contrario. Una sonrisa infantil surge en el rostro de Jungkook, tan solo viendo que se mueve un poco y da una sonrisa inconsciente. Parece que está teniendo un buen sueño.

El gesto aliviado se desvanece, notando que un líquido negro baja por su boca ¿Le dieron algo de beber? Recuerda lo que ha dicho Wonho, lo que ha visto en todos los demás. Aprieta más su débil y parco agarre.

—Voy a... cuidarte—Promete con voz rasposa y débil. Sin que Jimin pueda escucharlo de forma consciente, pero quedando como un tierno eco en su mente—. Y... no... dejare que... te hagan nada...

Respira con fuerza y se ve obligado a dejar de agarrarlo cuando escucha exclamaciones—. ¡Jungkook! ¡Debes quedarte quieto! ¿¡No quieres sanar acaso?! —regaña Boom de mal humor. Después de todo, fue su esfuerzo poner en orden a este hombre y lo ve no solo haciendo esfuerzo, también moviéndose y utilizando su brazo con un hueso fisurado. Chaewoon se ríe. Esa es la ventaja de haber sido quien trató a Jimin.

Él obviamente no va a despertar pronto y tampoco va a impedir que sus heridas tan graves se sanen apropiadamente. Revisa debajo de las vendas y la extraña que esté curando de forma tan veloz, que casi ve la carne moverse en dirección a lo que debe regenerar. Antes no podía hacerlo. Tardaba horas en sanar, cierto, pero aun así no tenía esta demostración de curación.

— ¿De dónde diablos sale esto? —queja limpiándole la mejilla al hombre inconsciente. Es la quinta vez que ha tenido que limpiarlo.

Jungkook sigue viendo hacia allá, ignora totalmente los regaños de Boom. Está confundido y ansioso. Sin embargo, decide dar un poco de prioridad a la calma. Si están aquí y están tan bien acomodados, es porque ha pasado suficiente tiempo.

Es porque algo ya está arreglado y debe esperar pacientemente a que le den la mejor noticia de todas.

. . .

—No sé por qué sucede, pero está sanando incluso más rápido de lo usual—repone Chaewoon con una nota de preocupación—. A menos que haya tenido un tratamiento que no me informaron, no tiene sentido.

—Nadie aquí le hizo lo mismo que usaron en Yoongi ¿O sí? —pregunta Boom por curiosidad y se ven entre ellos—. De la única forma en la que he visto que suceda y bueno... Nosotros no lo hemos hecho. Lo avisaríamos antes.

—Porque somos doctores normales y funcionales. —añade Chaewoon con acidez y Namjoon niega con la cabeza.

—No. Íbamos a proponerlo en caso de que demorara demasiado en sanar, pero... ¿Ha habido algún otro punto sospechoso? Importante, lo que sea. —pregunta a Chaewoon que se da toques en la mejilla, pensativa.

Sempiternal: Battlefield || BOOK 5#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora