Y ese chico... ¿Quién es?

4.6K 339 170
                                    

Capítulo 41: Y ese chico... ¿Quién es?

Al final del día...

¡Al fin el castigo ha terminado! Annabeth no puede aguantar más las ganas de irse de allí lo más pronto posible. La chica agarra su mochila y sale lo más rápido que puede de ese lugar. No se despide de Percy ni piensa despedirse, ni decirle nada. Desde que le acusó, no quiso seguirle hablando y se ha mantenido cien por ciento firme.

A la salida se encuentra con Piper.

—¡Pipes! —la saluda la rubia.

—Annie, hasta que por fin te veo —la otra chica sonríe—. ¿Qué tal fue?

—Al principio, me fue bien con Percy. Hablamos como gente civilizada, hasta que me dijiste que TodosMeAman es Jason. Ahí comenzó la pelea. Hasta tengo una teoría nueva.

—¿Cuál?

—Percy y Zack son la misma persona. Percy se ha hecho pasar por él. Cuando creí que hablaba con él hoy, en realidad hablaba era con otro. No sé con quién, pero sospecho que es uno de sus amigos.

—Quizás Leo. No lo vi en clases y Calipso sospecha que algo esconde.

—Puede ser. Y cuando a Perseus lo acusé de ser Zack, él lo llamó. Pero no le creo. Pudo haber sido otro amigo suyo.

—Leo otra vez.

—¡Que confuso!

—Eso parece —la morena suspira—. No entiendo la actitud de Jackson, ¿porqué será así?

—Ni idea, pero empiezo a arrepentirme de haberme enamorado.

—Espera, si ya sabemos quién es FreeBoy, ¿quién es ChicoTímido?

No había pensado en eso. Se había olvidado completamente de ese chico, pero ahora la intriga ha aumentado. ¿Quién será?

Son tantos misterios que se le han sumado en tan poco tiempo que Annabeth no sabe si reír, llorar o reír llorando.

—Annabeth —la llama alguien, Piper sigue caminando mientras se despide de su amiga con la mano. La que la ha llamado es Leo.

—¿Sí? —le pregunta la rubia al chico cuando él la alcanza.

—Tengo que contarte algo —dice el chico con seriedad.

—Cuéntame —pide con curiosidad. ¿Qué le irá a decir?

—Soy ChicoTímido en la página.

Annabeth se queda petrificada.

—¿Qué tú eres qué?

—Que soy ChicoTímido —repite él y la mira con obviedad—. Vamos, Annie, era más que obvio.

—¿Y porqué me cuentas esto así como así? —Annabeth entrecierra los ojos, esperando que haya alguna trampa de por medio. Descubrir las identidades de MonedaLanzada, TodosMeAman y FreeBoy no ha sido nada fácil, descubrir la identidad de ChicoTímido no puede ser tan sencillo.

—Porque pensé que era mejor que lo supieras. Nunca pude decírtelo en la página, y no te he visto conectada por más de unos minutos. El año escolar acaba en pocas semanas y no quisiera que te quedaras con la intriga. Además, es lo justo. Después de todo, tú me confiaste tu identidad —argumenta él—. Y debes de estar muy enredada con lo de Zack, ¿no?

—¿Cómo sabes eso? —pregunta la chica.

—¿Sabes que mi mejor amigo es su amigo?

—Sí, lo sé —dice Annabeth—. Es que pensé que ustedes no se llevaban tan bien con Zack como con Percy.

—No, tienes razón. Zack es más amigo de Percy que de nosotros porque se conocen desde hace mucho más tiempo.

Annabeth está confundida e indignada. ¡Leo también le miente! Le cree respecto a que es ChicoTímido, pero duda que lo que diga de Zack sea real. ¡Es el mejor amigo de Percy, debe de saber que el tal Zacharias es falso!

—Ah, no sabía —las palabras de ella se han vuelto frías.

—¿Te sientes bien? Tienes mala cara.

—¡Sí! ¡Estoy más perfecta que Barbie! —grita enojada. Leo se sorprende.

—Si tú lo dices...

Annabeth respira hondo. Debe calmarse... está enojada con Percy no con Leo. Además, ¿le acaba de decir que es ChicoTímido?

—Lo siento. He tenido un muy mal día —se disculpa la chica.

—No importa —Leo sonríe para tranquilizarla.

—No entiendo porqué no me dijiste eso antes. ¡Te lo pedí y no quisiste!

—Hey, al menos ya lo sabes —replica el chico.

—Es verdad. Gracias por contármelo, te lo agradezco —sonríe la rubia. Por lo menos eso quita a un usuario de la lista de identidades por resolver.

—No es nada.

—Espera, hay algo que no comprendo, ¿por qué te llamas ChicoTímido si tú de tímido no tienes nada?

Leo se ríe.

—Ni yo mismo lo sé, supongo que me pareció un buen nombre. Ya debo irme, Calipso me espera. ¡Adiós, Annie!

Adiós.

El chico se va corriendo a tomar al autobús que casi se va, mientras Calipso lo espera en la puerta, pero los dos mantienen su sonrisa. Parece que el amigo de Percy no es tan mala persona como ha hecho ver.

El viernes, en el colegio Harrinson...

Están en la clase de Historia, siguen hablando de las guerras mundiales ¿Es que nunca se cansan de hablar del mismo tema? ¡Pasó hace décadas, deberían olvidarlo! Pero es importante prestar atención, porque habrá un examen muy importante que todos deben aprobar.

—Los japoneses bombardearon Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941... —cuenta el profesor Rogelio.

Annabeth intenta lo mejor que puede escuchar las palabras del hombre, pero le resulta imposible. En lo que lleva de semana no ha parado de pensar una y mil veces más en Zack, Percy y Leo. Lo que falta es que Luke le diga que en realidad MonedaLanzada no es su cuenta sino la cuenta de su tortuga.

—Señorita Chase —la llama el profesor. Annabeth se da una bofetada mental. Se le ha ido el hilo de la charla otra vez—. ¿Puede decirme cual fue la reacción de los americanos?

Hace un gran esfuerzo por recordarlo, ya había visto antes esa clase.

—Fue de sorpresa. No esperaban que los japoneses atacaran desde tan lejos —responde la chica luego de pensar unos segundos. El profesor sonríe y continúa su clase. Uf, que suerte.

¿Que hora serán? Mira el reloj de la pared y nota que ya faltan quince minutos para irse. Su mirada se posa en la otra punta del salón. Ahí está Percy, mirando al profesor. Parece concentrado, aunque con él no se sabe. Junto a él está Rachel, la chica está susurrándole cosas. Annabeth desvía la vista para no entrar en celos. ¡Lo único que faltaría es que la castigaran por golpear a la pelirroja!

Hasta que por fin tocan el timbre. La rubia recoge sus cosas con rapidez y sale del aula.

Pero por las prisas se lleva a alguien por delante.

—¡Lo siento! —dice ella, que con malabares ha logrado que nada se le caiga.

—No te preocupes —dice la persona con la que tropezó. Alza la vista y lo primero que ve es unos preciosos ojos verde mar, por un momento teme que sea Percy pero es imposible. No tienen la misma cara, y a Percy se le reconoce en todos lados.

El chico tiene una gorra verde que le cubre el cabello, pero logra ver pequeños mechones negros. Él sonríe y sigue caminando, Annabeth lo sigue con la mirada. No recuerda haberlo visto antes, pero de lo único que está segura es que es muy guapo.

¡Como te odio, Percy! ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora