¡Como te odio, Percy! ✔

Amable por apuesta.

Capítulo 7: Amable por apuesta.

Annabeth golpea el aparatito del Internet con la esperanza de que vuelva y pueda ver la respuesta de TodosMeAman.

Cuando por fin funciona ve que él ya no está conectado, y tampoco le ha respondido.

Annabeth suspira. Baja a buscar un vaso de agua y sube de nuevo a su habitación. Cuando mira de nuevo el ordenador, tiene una ventanita pestañeando.

ChicoTímido: ¡Hola, Fresita! ¿Que tal tu día hoy?

OlorAFresa: Peor que ayer :( Espero que el tuyo si haya mejorado.

ChicoTímido: Sí, ya me he acostumbrado a los problemas.

OlorAFresa: En cambio, yo sí he sido una chica buena toda mi vida. Los problemas no son lo mío.

ChicoTímido: Si sigues metiéndote en problemas, pronto te acostumbrarás.

OlorAFresa: No lo creo.

ChicoTímido: Pues, créelo. Chao, fresita.

OlorAFresa: Adiós, tímido.

Annabeth se va a la cama pensando en ese ChicoTímido.

Al día siguiente...

Afortunadamente la rubia llega temprano al día siguiente. Sus amigas la esperan en la cafetería a la hora del almuerzo.

Annabeth les cuenta sobre sus encuentros cibernéticos con ChicoTímido, FreeBoy y TodosMeAman.

—¿No sabes si alguno de ellos es Percy? —pregunta Hazel con curiosidad.

—Lo sabría con tan solo un simple «hola» de su parte —contesta la rubia.

—O sea que nunca has hablado con él —supone Piper.

—No. Además sería muy obvio reconocerlo, su nombre de usuario sería SesosDeAlga o AquaMan —dice Annabeth mientras Piper y Hazel ríen—. Él no tiene mucha creatividad.

—Yo tampoco he hablado con Percy —comenta Piper.

—Ni yo. ¿Como se llamará? —cuestiona Hazel.

—Seguro que Drew y sus amigas lo saben —dice Piper.

Se quedan un momento en silencio.

—¿Ya le devolviste la camisa a Percy? —pregunta Hazel.

—No. Lo haré en cuanto lo vea —asegura Annabeth.

Unas horas más tarde, al final del día...

¡Hasta que por fin lo ve! Él está recostado en su auto rojo fuera del colegio. Annabeth se acerca a él de forma decidida.

—Aquí está tu camisa, Jackson —dice Annabeth lanzándole la camisa en el pecho. No piensa ser amable con él y dejarle saber que ha apreciado su amable gesto.

Ah, de nada —dice el chico de ojos verde mar con una sonrisa.

—¿Por qué fuiste gentil conmigo? —quiere saber la rubia. Es una duda que lleva carcomiéndola desde el día anterior.

—Sencillo —responde Percy lanzando la camisa en los asientos traseros del auto—. Jason y yo hicimos una apuesta. Verás, los dos sabíamos que Reyna y Rachel querían lanzarte agua, así que Jason me retó a que te prestara una camisa y que fuera amable contigo. Gracias a ti, soy cincuenta ziales más rico.

Annabeth intenta contener su furia. ¿Cómo puede ser tan egocéntrico?

—¿Y cómo sabían que no tenía ninguna camisa en mi casillero? —interroga ella.

—No lo sabíamos. Fue una suerte —dice Percy con una sonrisa.

—No para mí.

—Al menos para mí lo fue.

Ella aprieta los puños y se va furiosa. ¿Cómo pudo pensar que Percy era amable con ella? ¡Eso siempre será imposible!

¡Percy es la persona más insufrible de todo el país de Ziloe!

Annabeth toma el autobús a casa. Al llegar aún siente la ira correr por sus venas. Toma un largo baño para relajarse y serenarse, esperando que el agua helada enfríe su sangre hirviendo. Al salir busca una taza de café con bastante leche. Su padre ya había llegado de dar sus clases, así que lo saluda.

—¿Y mi madrastra? —le pregunta la chica.

—Trabajo —responde su padre concentrado en preparar la cena y la chica lo ayuda. Le gusta pasar tiempo con su padre. Él está tan ocupado a causa del trabajo que apenas lo ve y ella aprovecha cada oportunidad para ayudarle.

Al rato, después de la cena con su familia, Annabeth se conecta en la Web del colegio. Busca entre los conectados a Piper o Hazel, y de inmediato ve a una de ellas: PlumasDeColores. Piper es la que primero habla.

PlumasDeColores: ¿Hablaste con Percy?

OlorAFresa: Sí. Y no fue una agradable plática.

PlumasDeColores: ¿Qué pasó?

OlorAFresa: Me ha dicho que solo fue amable conmigo por una apuesta que hizo con Jason. Ellos sabían los planes de Reyna y Rachel. Percy ganó cincuenta ziales por mi humillación.

PlumasDeColores: ¡Que horrible!

OlorAFresa: ¡Lo quiero matar!

PlumasDeColores: Pero si no es para tanto...

OlorAFresa: ¿Cómo te sentirías si te pasara a ti?

PlumasDeColores: Obvio que mal. Pero no lo querría matar.

OlorAFresa: Tú no me entiendes.

PlumasDeColores: ¡Claro que te entiendo! Soy tu mejor amiga. Pero estás exagerando un poco.

OlorAFresa: ¡Es que ya me tiene harta!

PlumasDeColores: Ya verás que para mañana todo saldrá mejor.

OlorAFresa: Quizá no, Piper. Quizá todo salga peor.

Durante un minuto entero, Piper no responde.

PlumasDeColores: Tú y Percy van a terminar casados.

OlorAFresa: ¡Ahora ya enloqueciste!

PlumasDeColores: No es eso, Annie. Es que los dos viven peleando. Algún día uno de los dos se enamorará. Y se casaran y tendrán muchos hijos de cabellos negros y ojos grises.

OlorAFresa: Eso no me anima.

PlumasDeColores: Cuando se casen, quiero ser la madrina.

OlorAFresa: Mejor hablamos cuando vuelvas a ser normal.

PlumasDeColores: ¡Percy y Annabeth por siempre!

OlorAFresa: Adiós, loca.