Capituló LXV

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Tomioka, Rengoku y Tanjiro llegaron hacia donde se encontraba Muzan, presenciando horriblemente el escenario frente a ellos; un lugar lleno de sangre y cuerpos desmembrados por todas partes

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Tomioka, Rengoku y Tanjiro llegaron hacia donde se encontraba Muzan, presenciando horriblemente el escenario frente a ellos; un lugar lleno de sangre y cuerpos desmembrados por todas partes.

Tanjiro vio la nueva apariencia de Muzan, su cabello era más largo y blanco, con numerosas mandíbulas en todo su cuerpo, y la rabia inmediatamente se apoderó de él, mientras que Giyu le decía que se calmará.

Muzan los llamó persistentes, lo cual lo enfermaba hasta la médula, ya que siempre miraba a los humanos como seres que solo se preocupaban por la venganza y la muerte de sus seres queridos. Al haber dicho eso, continuo con que aquellos que están vivos deberían de estar agradecidos por estar vivos y dejar de desperdiciar sus vidas en la venganza.

Esto sorprendió a Giyu, Kyojuro y Tanjiro, ya que Muzan se compara a sí mismo como un desastre natural. Aclarando que la humanidad no podía vengarse de esas causas, sin importar cuánto daño ocasionara o cuántas vidas arrebatarán.

Ante esas palabras, Tanjiro no podía creer que existía un ser tan despiadado y recordando la explicación de Gyomei de que Muzan no podía morir decapitado, a partir de esa información trataba de averiguar cómo exponerlo al sol; pero el problema es que no tenía ni idea de cómo sacarlo de la fortaleza.

Posteriormente, Muzan transformó inmediatamente sus brazos en largos zarcillos con púas que funcionan como látigos y los agitó hacia los tres cazadores.

Aliento del Agua: Onceava postura, Calma.

Aliento de la Llama: Quinta postura, Tigre de Fuego.

Tanto Giyu como Kyojuro utilizaron sus respectivas técnicas para repeler los zarcillos agitados, pero resultaron heridos en muchos lugares de su cuerpo junto con Tanjiro.

¡Ese es un rango de ataque increíble! No puedo seguirle el ritmo con la vista, solo estoy esquivando sus ataques por puro instinto —señaló el pelirrojo mientras mantenía su tenacidad para intentar acercarse a su enemigo y hacerle daño de alguna manera—. ¡Sí, lo esquivé! ¡Puedo hacerlo!

Cuando se puso a una distancia sorprendentemente cerca de Muzan, uno de sus brazos se adelantó y cortó el ojo derecho de Tanjiro, dejándolo en el suelo.

—¡No te le acerques! ¡No tienes motivos para cortarlo! —exclamó el azabache alejando a Tanjiro de Muzan, mientras el rubio los protegía—. ¡La fuerza de una Luna Creciente no es nada comparada a la de Muzan!

—Buscas ganar tiempo hasta el amanecer, ¿eh? La luz no puede penetrar esta fortaleza —dijo cínicamente—. Crees que esos cuatro Pilares puedan aguantar después de haber terminado gravemente heridos por Kokushibo, ¿realmente podrán hacerlo siendo solo dos Pilares?

Sus palabras confundieron a los presentes y este les explicó:

—El Pilar con el haori rayado, el Pilar femenino y otro cazador con un haori azul marino —conectó su vista con la de Nakime viendo a Obanai, Mitsuri y a Masaru aplastados por las columnas—. Ya fueron asesinados por mi subordinado, ¿no lo sabían?
Muzan los siguió atacando con sus zarcillos, Tanjiro cayó varias veces debido a que no podía ver bien su entorno a causa de la pérdida de su ojo.

|Reescribiendo| El Pilar de la Nieve ❄️ (KNY X Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora