Capítulo XLIX

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La fuerte opresión que sentía alrededor de mi cuerpo había desaparecido y fue cambiado por unos brazos cálidos y fuertes que rodearon mi cintura

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La fuerte opresión que sentía alrededor de mi cuerpo había desaparecido y fue cambiado por unos brazos cálidos y fuertes que rodearon mi cintura.

No me hacía falta verlo para saber quién me había rescatado.

—De verdad... viniste —hablé con algo de dificultad, quería expresar mi felicidad; pero no era el momento para ello.

Rápidamente, se movió conmigo en brazos, durante ese corto periodo de tiempo, le expliqué todo lo que sabía del demonio hasta ahora y me dejó en el suelo.

—Lo siento, tenías razón al decirme que era débil —susurré cabizbaja aguantándome las ganas de querer llorar.

—Tú... no eres débil porque de ser así hubieras huido a la primera oportunidad que se te diera —dijo mientras tomaba mi mano derecha y ponía sobre ella el mango de mi espada—. Tú eres valiente e inteligente... —levanté mi cabeza al escuchar sus palabras; de verdad me está diciendo esto o también perdí el sentido de la audición—. Fuyuka, tú eres la única que puede derrotar a esta Luna Creciente.

Mi mente se quedó completamente en blanco cuando procesé sus palabras, aún confía en mí; sin embargo, no sé qué hacer para ayudarlo.

Mi mente se quedó completamente en blanco cuando procesé sus palabras, aún confía en mí; sin embargo, no sé qué hacer para ayudarlo

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¡Hmm, genial! Este cazador interrumpió mi dulce venganza, aunque es imposible que él se haya librado solo de la trampa.

Mi vista se posó en la pelirroja, estaba muy lastimada, no obstante, esa actitud no la tenía hace tres horas desde que iniciamos a pelear.

Felicidades, Fuyuka, lograste cortar la raíz que tenía atrapado a tu "compañero" en un sueño profundo.

Antes de que pudiera seguir pensando, el cazador con las cicatrices se acercó ferozmente a atacarme.

Aliento del Viento, no es la primera vez que lucho contra esta respiración, pero por alguna razón este cazador está haciendo que sea muy dolorosa.

Definitivamente, este cazador odia a los demonios.

O tal vez... fue porque la lastime.

Aunque no importa, nunca encontrarán la manera de matarme, nadie lo ha hecho nunca.

Mientras el albino seguía atacándome, puse en marcha mi plan de eliminar primero a la chica y luego a él. Lamentablemente, esa niña arruinó mi plan para acabar con Fuyuka y al parecer el niño fue quien dejó escapar a los cuervos.

Parece ser que primero tendré que eliminar a esas pequeñas molestias.

Parece ser que primero tendré que eliminar a esas pequeñas molestias

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|Reescribiendo| El Pilar de la Nieve ❄️ (KNY X Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora