~Lucille~
Cuando yo era pequeña, una de esas noches donde dormí bajo la tormenta amarrada aún poste del granero, apareció un perro herido. Recuerdo que escucharlo llorar me hacía llorar a mi, y que busqué ayudarlo. Pero me veía moverme y me buscaba para atacarme.
Entonces entendí que hasta los animales cuando están heridos actúan desesperadamente para defenderse y cuidar de ellos.
He visto a Camille hacerlo, y me he visto a mi misma hacerlo.
Pero ahora que veo a Victoria, me cuesta entenderlo. Nada la había afectado de la forma en la que la afecta lo que sea que Hans Jones le susurre. Por un segundo me preocupo, porque puedo jurar que se pone gris o amarilla, como si observara a un cadaver.
Y esa señora que todo lo que hace es fingir poder y compartir miedo, es la que ahora peor que un niño pequeño tiembla de pie. Lo puedo ver en sus dedos, o como sus hombros han caído como si no tuviera fuerza para seguir enderezada.
Y se que ella se ha enfrentado a cosas grandes y pesadas, cosas que la idea me pone los pelos de punta. Así que lo que sea que sus oídos reciben, debe de ser algo grande e imponente para obtener esa reacción de ella.
Lo que me hace temer por el mundo entero.
Tengo la mirada de Joaquín encima de mi, y estoy desesperada buscando la forma de acabar con esta farsa de una buena vez. Pero necesito enfocarme en Victoria, que es mi punto número uno enemigo.
Ella parece ser la que lo sabe todo y quiere ser la que lo rebela, así que estar con los ojos sobre ella es una buena idea.
Cuando Camille me explico que llamaría a todos los que quieren poner su cabeza en una estaca, pensé que lo decía hipotéticamente, no que realmente los invitaría a cenar canapés a la casa de Victoria.
Pero bueno, que se puede esperar de la cuerda.
Escaneo la sala nuevamente, buscando a Cindy que ha estado lastimando a los invitados y aumentando la tensión de la sala. Mi hermana ya no está, sus estupidos hombres se la llevaron y se está perdiendo el control de la situación.
Encuentro a Cindy acercándosele a Joaquín que no me quita los ojos de encima hasta que ella le tapa la vista con su falsa peluca.
Escucho un vidrio quebrarse detrás de mi, y volteo para ver a Ciaran alejarse de mi, dejando una botella rota en el suelo mientras va regando un camino de vino de su copa. Empiezo a caminar detrás de él para enfrentarlo, sintiendo mi corazón acelerarse descontrolado por su presencia, pero cuando estoy por acercarme demasiado deja caer un cerillo prendido que se apodera del vino tirado.
En segundos, se empieza a quemar la sala. Ciaran sigue su camino, regando cerillos en los vestidos de las invitadas, en las cortinas, los manteles y la alfombra en la entrada. La gente se pone a gritar en pánico y buscan la más cercana salida.
Entre las llamas y el humo pierdo de vista a Ciaran, así como a Victoria, Hans y Joaquín. Sin tentar a mi suerte, hago lo mismo que el resto y busco la primera salida que me encuentro, dejando que se acabe la fiesta tanto como lo necesitaba.
Mi estómago es un nudo que me hace saborear amargo la boca. Corro por los pasillos, empujando las falsas paredes para cortar camino y pasar más desapercibida. Camille me aseguró que nadie se atrevería a hacer un movimiento agresivo en la cena, pero ahora que ella no está no estoy segura de que la suerte sea la misma.
Los pasadizos son oscuros y fríos por las paredes de piedra, puedo escuchar los gritos afuera y como se desatan los balazos. Comienzo a deshacerme de mi vestido negro, quedando en las mayas debajo de la larga falda y el top corto negro. El clima está congelado pero son pocos los pasos de aquí a la nave que Tobías prometió tener la decencia de dejarme.
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Domain #3 COMPLETA.
Science FictionTrilogía Zafiro.💎 El reto final. Las cartas han sido puestas sobre la mesa, ahora todos están molestos y listos para conseguir lo que quieren. La cacería a las Dornen no se detiene, pero ellas tampoco lo hacen. Muertes. Traición. Deseo. Mentiras. P...