Tʀᴀɪᴅᴏʀ ᴅᴇ sᴀɴɢʀᴇ (Draco Malfoy) || Libro 2 y 3

Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ ᴄɪᴇɴᴛᴏ sᴇᴛᴇɴᴛᴀ ʏ sɪᴇᴛᴇ

▪︎ DRACO MALFOY ▪︎

|  3 MESES  |

—Draco, abre la puerta —Dijo theo detrás de la puerta.

Malfoy estaba encerrado en su habitación. Desde que clarissa regreso a su universo sintió que la vida ya no tenía sentido.

Y no solo se sentía así por clarissa, si no que, también se había quedado sin padres, ambos muertos. Su madre a manos de voldermort y su padre a manos de el, ahora era huérfano.

Un huérfano millonario.

Pero ni todos los millones que tenia lo hacian sentirse bien, por que estaba incompleto. Todo lo que amo se fue.

Y se sentía solo.

Theo y daphne se quedaban en la mansión para hacerle compañía aunque draco no quería que se quedarán. Sin embargo sus amigos estaban preocupados por el, llevaba casi tres meses sin salir de su habitación y apenas tocaba la comida.

—No saldrá —Dijo theo.

—Debemos darle más tiempo, theo. Recuerda que el perdió más que nosotros.

Theo suspiro —Quisiera que blaise este aquí, el sabría que hacer.

—Yo igual, desearía que estuviera aquí.

|  6 MESES  |

Seguía en su cama, toda su habitación estaba oscura, las cosas estaban desordenadas. Ya no le importaba. Solamente dormía y apenas comía.

La mayor parte de su tiempo lloraba.

Se deprimia tanto, las cosas que perdió para poder ser libre. Si eso era ser libre ya no quería serlo. Tenía todo, familia y el amor de su vida, pero eso ya no existía. Lo único que conservaba era un cuadro de su madre el cual se movía como los cuadros de hogwarts, pero, lo tenia en su enorme sala.

Ver a su madre en un cuadro le dolia demasiado, puesto que no la tenía con vida. Y después estaba bubble quien de ella conservaba una pequeña fotografía, una donde sonreía y se movía en el momento. Bubble le hacía tanta falta, deseo abrazarla y que lo consolara, pero estaba muerta. Sus dos madres estaban muertas, las que lo amaron como nunca.

Y clarissa...

Su chica de cabello castaño, Su ausencia era su pérdida, su pequeña perdición. Sentía que se estaba muriendo y que el vacío se extendía más por todo su pecho. El sentimiento, el dolor que sintió cuando desapareció ante sus ojos, la desesperación que sintió cuando pensó que moriría, todo aquello lo tenía carcomiendo. Y lo estaba matando lentamente, su ausencia lo estaba consumiendo hasta que no quedara nada de el.

Aveces tenia pesadillas.

No lo dejaban dormir por las noches. Sus sueños eran sobre ella, sobre su chica castaña. En ocasiones entraba en pánico, no quería olvidar su voz, esa dulce voz que le causaba nervios. No quería olvidar su rostro, no quería que desapareciera.

Siempre se la pasaba tomando whisky, todos los días estaba ebrio, no había forma de calmar ese dolor que poniéndose ebrio hasta caer inconsciente por el alcohol. Solo así podría dormir sin soñar. Estaba completamente acabado, herido. Ella definitivamente fue su perdición.

Su ruina.

|  1    A Ñ O  |

Se había descuidado, el cabello le creció hasta llegar a los hombros y tenía una barba que lo hacia ver enfermo. Ojeras que casi le llegaban a los pómulos, había bajado de peso por la falta de alimentación. No recordaba lo que era estar afuera de su habitación, estaba tan enfocado en recordar a su rosa, recordar todo sobre ella.