🖤Eres mi mejor pecado🖤

51.

— ¡Lo mismo de siempre?!—. Grito una chica detrás del mostrador mirando a Jin con una enorme sonrrisa.

— ¡Si, solo que esta vez me das un latte de vainilla!—. Le sonrrio.

El clima en la mañana era algo frío y aquella casadora negra que Jin portaba no lo cubría del todo del frío. La campanita en la puerta anunciaba que otro cliente avía entrado. Pero Jin no le tomo importancia.

— aquí tienes jin—. Dijo la chica dándole todo lo pedido en una cajita donde portaban los paninis y en su mano el latte.

Jin agradeció y se dió la vuelta golpiando a un tipo alto, más alto que él, delgado pero marcado, lo avía sentido, era de piel levemente morena y de ojos cafés claros, pestañas largas y risadas y cabello negro, una sonrrisa hermosa y coqueta. Vestía con una casadora café del mismo color de sus ojos, se veía muy bien combinado con aquella camisa de cuello alto negra y pantalones negros de mesclilla.

— lo lamento —. Se disculpo Jin, por suerte no le avía tirado el café latte encina pero si avía aplastado su cajita de paninis. Jin lo miro y el tipo sonrrio. Dando a entender que no avía problema alguno. Lo rodio y se encamino a la salida.

— ¡Nos vemos Helen!—. Grito Jin a modo de despedida y la chica levantó la mano despidiéndose también.

Jin empujó la puerta con ayuda de su tracero, pues sus manos estaban ocupadas y salió.

Miro la caja de paninis aplastada, y ya asiendose a la idea de que sus paninis ya estabas más que desechos. Hizo un puchero cuando alguien llamo su atención.

— oye?, Hola—. Jin se detuvo. Jiro topándose con el mismo tipo, y ¡Dios su voz!. Su voz era grabe, un tono de voz grave más grave que la de taehyung y quedaba perfecto con su personalidad. — Jin cierto?—. se planto a un costado de él .

Jin no pudo hacer más que asentir algo nervioso, pues estaba imprecionado y algo sorprendido, impactado por su tono de voz, eso jamás se lo espero y lo más seguro es que quería reclamarle algo talvez, el aver chocado.

— lamento aver aruinado tus paninis —. Dijo el tipo y la palabra sonaba algo rara con su voz, talvez un poco infantil comparado con su tono de voz madura.
— le pregunté a la chica Helen, lo que avisas encargado, con la misma cantidad, para entregártelo —. Sonrrio, ahí estaba de nuevo esa sonrrisa.

Jin miro la caja colo blanca con letras rosas que el chico le extendía para que la tomara indeciso si tomarla o no.

— estoy bien no te preocupes, disfrútalos—. Le sonrrio, estaba nervioso y no tenía nada que ver con que él topo lo mirar sin dejar de sonrreir. — compermiso—. Reverencio Jin a tiempo que el chico lo llamaba.

— Jin —. Y Jin lo miro. Su nombre se escuchaba bien con ese tono de voz.

— si? —.

— ya lo pagué —. Ovió. — tómalo por favor —. Sonrrio. Jin lo miro y sonrrio y tomo la caja rosando levemente sus manos. Teni manos suaves también.

— gracias —. Sonrrio. — devo irme —.

— claro no te quito más tu tiempo, espero que nos volvamos a encontrar — .  Reverencio y se fue.

Jin lo miro irse asta su forma de caminar era elegante.

Miro la caja de paninis dadas por el tipo y leyó, « me llamo sun jiho ». Sonrrio y se fue de ahí.

La mañana del lunes llegó rápido y aún que el domingo visito l cafetería no volvió a toparse con aquel tipo de nombre ya conosido su jiho era su nombre, recordaba perfectamente todas sus facciones y su voz al pronunciar su nombre.

Llegaron al salón donde te joon saludo a jimin quien veni con una rosa morada que avía encontrado en su casillero tenía un aroma hermoso y una nota en la mano que decía,«¿Quieres saber quién soy, siente el aroma?».

Tae entro al salón, junto a jk quien se portaba más cabelloroso, como si no hubiera pasado nada y tae le sonrreia de igual manera aún que se sentía culpable con sam-i, quien no avía asistido a clases y nadie sabía, aún que él si pregunto a yejoon, quien dijo que estaba en casa y que no se preocupara, apesar de que jk ya le avía dicho que no lo quería Serca.

Jin entro al salón y miro a namjoon quien leía en su asiento, sin darse cuenta de quién entra y quién sale., Asta que él puso un pie dentro del salón ,  que namjoon levantó la cara momentáneamente para verlo y después volver a su libro.