A la mañana siguiente. Hades iba caminado por su propio palacio cuando se encontró a Simo Hayha leyendo un libro en un rincón del pasillo, sentado en el piso. Con una mirada tan tranquila que hasta parecia incierto el incidente de su banquete.
"Nuestro matrimonio está destinado a fracasar de todas formas..."
Esas palabras dichas por el filandes no han dejado de rondar su mente, lo que provocó una sensación de hueco en su pecho. Aceptaba plenamente qué no respetará a Apolo, hasta cierto punto lo entendía. Quizás no habría amor en su matrimonio pero lidiar con el fantasma de una infidelidad era demasiado difícil. Así que entendía plenamente las aclaraciones de Simo en ese aspecto.
Por eso lo dejo quedarse en el Hellhim lejos del idiota inmaduro de su sobrino. Estar mutuamente lejos podría sanar un poco la aspereza qué existirá entre ellos a partir de este momento.
Y aunque no lo admitirá jamás, realmente admiraba la fortaleza qué Simo mostró, en su momento a él le hubiera gustado tener un poco de eso cuando vivió alado de Persefone. Quizás, si hubiera aceptado en ese entonces que ella no lo amaba y el no tenía por que hacerlo algo hubiese cambiado el resultado qué obtuvo al final.
Pero ahora tenía a Qin, así que no importaba cuanto regresará su mente a esos vergonzosos recuerdos. El pasado era eso, pasado. Y ahora su futuro era brillante. No había gran, bajo su conciencia y criterio no había gran ciencia detrás de esto.
Siguió su camino por un rumbo diferente, dejando al francotirador tranquilo en su lectura. De seguro necesitaba organizar sus ideas.
Hades decidió dejar esos pensamientos de lado y concentrarse en su trabajo dentro del inframundo. Usando un poco de su poder divino hizo aparecer unos papeles que fue supervisando hasta llegar a su oficina. Y en cuanto llego se encontró con una presencia desagradable.
Otra vez era Persefone. Quien estaba sentada en la silla frente a su escritorio mientras jugaba con un bolígrafo. En cuanto la pelirroja lo vio en la entrada de la habitación de hizo a un lado, levantándose de su lugar mientras sonreía con dulzura.
- Me entere de lo que paso ayer... - dijo mientras cubría con su mano esa pequeña sonrisita que casi se le escapa. - Creí que necesitarías hablarlo con alguien.. - continuo intentado sonar comprensiva.
Hades frunció el ceño y rodo los ojos mientras soltaba una sonora carcajada. Camino hasta su escritorio, azotó los documentos en el de mala gana y empujó bruscamente a la mujer para poder pasar a su silla.
- Si... Sobre todo voy a hablarlo contigo, qué sin problema has echo lo mismo que el imbecil de Apolo. - continuo a su vez que se rascaba un poco el cabello - Le tengo mucha estima a mi hermano Zeus, pero por su puesto que no es el mejor ejemplo para sus hijos. Eres igual de aventurera qué el así que no te hagas la mártir y vete de aquí. - pidió bruscamente mientras alzaba la mirada y la veía directo a los ojos - No quiero que tu presencia perturbe más este lugar. - ordenó para después caer en cuenta de algo que casi lo deja sin aliento.
- ¿Por que dices eso? Solo quería venir a ver como estabas y presentar mis respetos a la nueva... - Persefone dudo un poco sus palabras y luego continuo - "reina" de este lugar... - dijo mientras movía un poco la cabeza y hacia sonar un poco la joyería de su atuendo.
Hades se levantó bruscamente de su asiento y tomo a la diosa del antebrazo mientras la jalaba hacia el.
- De donde.... - habló entre dientes mientras tomaba a la fuerza un extremo de las orejas de Persefone y lo jalaba con fuerza, desprendiendo la joya qué tenía en su lugar - ¿¡DE DONDE TOMAS ESTO!? - cuestionó en un grito mientras la obligaba a darse la vuelta y le arrancaba la segunda pieza de su joyeria.
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"Posesión" || Shuumatsu No valkyrie.
FanfictionY entonces Zeus dijo: "A cambiado de la salvación de la humanidad, todos y cada uno de los Einherjar que participaron, se volverán propiedad del dios al que enfrentaron. " Ese era el precio, por haber perdido. Y ni Brünnhilde pudo alegar lo contrari...