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Cuando nos subimos al auto los chicos me miraban preocupados pero pude decirles que estaba mejor. Nos dirigíamos al departamento de Matías.

En el auto estaba sentada entre Giulia que me agarraba la mano y estaba apoyada en el hombro de Matías que me agarraba la rodilla.

Cuando llegamos subimos en el ascensor y entramos al departamento temporal de el jugador de la Juventus.

Brian y Alejo le empezaron a revisar la heladera para ver si tenía algo de comer, pero solo tenía unas pre-pizzas para cocinar.

– Che mati puedo cocinar una pizza? – el recién nombrado, estaba ordenando y distraído le respondió que si.

Yo seguía bastante asustada, el momento que había pasado minutos atras en el boliche me seguía dando vueltas en la cabeza. El pensamiento de que hubiera pasado si estaba sola me atormenta.

Giuli se sentó a mi lado en el sillón.

– Te hizo algo?.

No me había fijado en si tenía algun daño fisico. Pero cuando me levante la remera vi que todavía tenia marcadas las uñas de el chico en mi cintura. Intente contener las lagrimas devuelta pero no pude.

Mi amiga me vió apenada pero preocupada a la vez.

– No podemos hacer una denuncia o algo? – me preguntó

– No me acuerdo ni de la cara del tipo Giu – me limpie las lagrimas y ella me abrazó.

– No pienso ir a ese lugar nunca más.

Matías se acercó a nosotras todavia preocupado y sintiendose culpable de la situación. Cuando cruzamos miradas noté eso.

Giuli al ver que el se acercó, se hizo la boluda y se fue a ayudar a los chicos con las pizzas.

– No te sientas culpable porque no lo sos – le dije para aclararle, pero todavía lo veia atormentado con la situación.

– Primero que todo, vos como estas Vicky?

– Medio asustada la verdad. Me pone mal pensar que hubiera pasado si no llegaban ustedes. – me sincere

– No puedo hacer nada para hacer que la situación no pasé, porqué ya pasó. Pero si algún dia o cuando necesites alguien para hablar, sabes que estoy para lo que necesites– me dijo en voz baja – También sí algún dia no querés ir sola a algún lugar o algo, vos avísame – agregó.

Cuando termino de hablar lo abracé y el me devolvió el abrazo, dándome un beso en el cachete primero. Mi cara quedó contra su pecho. Sentía su corazón acelerado.

– Gracias Mati.

Forcé una sonrisa y el me limpió las lágrimas.

— Queres ir a acostarte o algo? Vos avísame.

— No no, tranquilo, quiero comer las pizzas — me sonrió y yo me pare junto a el para ir con los demás.

— Alta pinta tienen las pizzas — dije y los dos "cocineros" me miraron felices.

— Son especiales porque las hicimos para ustedes — se dirigieron hacia mi y Giulia. Matías frunció el ceño.

— No se agranden que literalmente le pusieron queso arriba y tomate

— Pero Mati, no te pongas celoso que no te vamos a robar a tu novia tranquilo, las pizzas son para ella y Giuli — lo jodió Brian haciendo que reciba un empujón de Matías.

Me ayudaron a despejarme un poco de mis pensamientos mientras comianos una pizza a la 1 am. Le avisé a mi papá que estaba de unos amigos y obviamente su pregunta fue "quienes?" y le dije que los iba a conocer algún día.

Sentía la mirada de los chicos en general sobre mí para ver si estaba bien o me miraban preocupados. Pero también entendía que no me querían sacar de vuelta el tema como para hacerme olvidar y por lo menos pasarla bien en este momento.

Giulia en un momento se tuvo que ir, así que me quedé yo sola con los tres chicos. Ella dijo que se tenía que ir porque tenía que hacer algo, en este edificio, que todos imaginamos que se iba con algún chico o andaba en algo raro.

— A Alejo se le fueron la esperanzas con Giuli — lo jodi yo.

El simplemente se rió y miro para otro lado, se ve que tenia esperanzas realmente. Es que si, creo que Alejo y Giulia re irían como pareja, pero todavía no se vieron con esos ojos.

Aprovechamos que éramos 4 y nos pusimos a jugar al truco. Matías y yo, contra Ale y Brian.

— La otra vez les rompimos el orto, esta vez no espero menos... — le dijo Alejo su compañero.

— Dale Victoria hacele honor a tu nombre de una vez por todas— Matías se burló de mí.

— Sos re gracioso Mati, chicos porque no lo anotamos a comedia?? — le pegué en el hombro.

— Sos re mala conmigo — el jugador de la Juventus me hizo una mueca.

Sus compañeros de selección empezaron a burlarse de él.

— Anda pollera.

Estuvimos jugando como 1 hora hasta que nos faltaban 2 puntos a los dos.

— El mejor de esta gana eh.

— Dale loco.

Repartía Brian. Me tocó 33 de envido. Tengo que admitir que para los juegos tengo suerte.

— A ver si te animas a un envido — me cantó Brian.

— Envido — le repetí yo. Matías me miraba con el ceño fruncido. Le hice una seña de que este tranquilo.

— Quiero. 32 tengo — Brian me dijo creidamente.

— Perdón Mati pensé que iba poder ganarle el envido envido, solamente tengo 33 — me hice la boluda, haciendo que el recién nombrado salte de la mesa.

Alejo y Brian se querían matar. No podían creer que habian perdido y encima por tan poca cosa.

Matias me abrazó eufóricamente, y los jodió como por 15 minutos.

— Viste que le hice honor a mi nombre... — le recalque a Matías.

El solo me abrazó por los hombros.

Realmente me había olvidado de todo lo que había pasado en esas horas, fue como un despeje de la realidad. Hicieron que todo lo que había pasado con mi mamá y en el boliche pase a segundo plano.

– No te queres quedar a dormir? — me preguntó para que lo escuche yo nada más

No sé cuáles eran sus planes pero yo con el día que había tenido, realmente no tenía ganas de hacer nada sexual.

— Pero no tengo ganas de hacer nada — le aclaré.

— No te invite para cojer, Vicky — me miro serio — Tampoco soy tan pajero. Pero si no te sentis cómoda o no... — empezó a hablar rápido, como si estuviera nervioso, por lo tanto, lo interrumpi.

—Me quedo — el me sonrió timidamente y un poco mas calmado.

Cuando ya se hizo más tarde, Matías como que echó a Brian y Alejo. Por qué digo esto? Porque los invito a irse realmente.

— Che estoy re cansado, cuando se van? — preguntó en general.

— Bueno loco ya los dejamos solos — burló Alejo.

Yo me sonrojé y Matías se hizo el boludo.

Cuando se fueron, nos saludaron y ahí fue cuando empecé a estar nerviosa.

Estábamos los dos solos.

—————

Holaaa, que onda??

Queria saber si le esta gustando la historia y gracias por los votos. Voy a intentar subir seguido, pero no prometo.

midnight rain - matias souléDonde viven las historias. Descúbrelo ahora