midnight rain - matias soulé

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Dos meses después...

Narra Victoria

Lo habia aceptado, lo había decidido estaba viviendo en Italia hace un mes, en la casa de Matías.

Mis papás al principio no estaban muy convencidos, pero se dieron cuenta que quedandome en el país no tenia muchas salidas. El mal momento económicamente de Argentina era de conocimiento mundial.

Luego de un mes puedo decir que la convivencia esta funcionando lo mejor. La familia de él vino recién esta semana, ya que se habian vuelto a Mar del Plata. Hoy debutaba la Juventus y se supone que Matías iba a entrar desde el banco.

Mi novio se encontraba concentrando y yo estaba filmando un vlog de un día mío en Italia.

Mis vlogs de Youtube estaban en su mejor momento, sinceramente no se que les gustaba a la gente de mí, no me siento una persona muy interesante comparada a la vida de los otros. Quizás los habia ganado con mi carisma (?

También me gustaba por un lado que por más que Matias apareciera de vez en cuando en mis videos, mi público no fuera su público. Lo que quiero decir es que me gustaba ganarme a mis seguidores por mi cuenta.

— Bueno gente, estamos aca en un día más — sentí como se acercaba Agustín a la cámara — Preséntate.

Me había hecho bastante amiga de Agustín, el hermano de Matías. Sinceramente me caía muy bien y encima sentía que podía confíar en él.

— ¿Que onda? — dijo a modo de saludo — Me llamo Agustín, soy el cuñado de ella — me señaló con la cabeza — Este es mi Instagram.

Me reí al verlo dictar su Instagram.

— Hoy vamos a ir a la cancha de la Juve, nunca fui todavía — anuncié — Juega Mati, asi que bueno, obviamente lo vamos a ir a ver.

Cuando se hizo más cerca de la hora, hice un Get Ready with Me y me puse la camiseta de él.

En el auto manejaba su papá y su mamá iba de copiloto. Yo había quedado atrás con Agustín.

Le mandé un mensaje a mis padres, que ibamos a ir a ver a Mati y me dijieron que le deseaban suerte.

— Entra de titular — anunció su hermano haciendo que todos vitoreemos — Sabés como debe estar el pendejo.

Cuando llegamos, pasamos con el apellido Soulé directo al palco de los familiares. El estadio de la Juventus era muy lindo y sinceramente me sorprendió.

— Gente estamos aca, recién llegamos al estadio de la Juventus, esta hermoso — mostré con la cámara.

Néstor el papá de Mati saludo a la cámara y no pude evitar ponerme roja de la vergüenza. Claramente es algo que tenia que aprender a controlar todavia.

— Mati entra de titular, miren ahi esta entrando en calor — lo enfoqué con la cámara — Es el pelado, no se si lo reconocen — jodí.

Luego de un rato el partido comenzó y mi mirada no estaba puesta en la pelota, si no que en mi novio. Sonreí al verlo tocar la pelota.

Se notaban sus nervios. Los rivales no le hacían partido, la posesión era toda de la Juventus.

El primer tiempo terminó, sieneo aburridisimo. No pasó literalmente nada. Fuí a comprar algo para tomar y volví cuando arrancó el segundo.

Me alivié al ver que mi novio seguía en cancha. Tras unos toques, la pelota llegó al área de los contrarios y el delantero de la Juve tiró al arco, haciendo que el arquero dé un rebote, que le quedó en los pies a Matías.