𝓒𝓪𝓹í𝓽𝓾𝓵𝓸 9; ¿𝓣𝓪𝓷𝓽𝓸 𝓿𝓪𝓵𝓰𝓸 𝓵𝓪 𝓹𝓮𝓷𝓪?

26 1 0
                                    

''𝐌𝐮𝐞𝐫𝐨 𝐜𝐮𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐭𝐞 𝐯𝐚𝐬 𝐲 𝐭𝐨𝐜𝐨 𝐞𝐥 𝐜𝐢𝐞𝐥𝐨 𝐬𝐢 𝐞𝐬𝐭á𝐬''

—¿Me estás diciendo que mi hermano te beso y no habéis hablado? Espera, no, mejor dicho, ¿Mi hermano y tu os habéis besado y no habéis vuelto a hablar desde la fiesta en la que os besasteis? —pregunta Katherine, obteniendo un asentimiento por parte de Alisha— ¡Yo lo pienso matar en cuanto lo vea! 

—Tranqui, Kattie, no tienes porque matar a nadie. —dice Alisha— Quiero hablar con él y contarle la verdad, porque no paro de pensar en otra cosa que no sea el beso.

—¿Tan bien besa mi hermano? —bromea Katherine mientras ambas entran en el comedor—

—Se que estoy hablando de tu hermano, pero...¡santo dios! ¡Si que besa muy pero que muy bien! —sonríe Alisha, mordiéndose levemente el labio— Jamás me habían besado así antes. Fue como el primer beso que debí tener. 

—Lose, te entiendo muy bien, créeme. —afirma Katherine, recordando su beso con Derek— ¿Y porque no habéis hablado antes? Es decir, entiendo que mi hermano es un poquito bobo para estas cosas, pero... ¿por qué no fuiste a hablar con él y has dejado que pase el fin de semana?

—Porque estoy muy pero que muy asustada, Kattie. No quiero condenarle a una muerte segura. —suspira Alisha, dejando caer su cabeza hacía atrás—No quiero que porque salgamos juntos o tengamos algo se convierta en el centro de la diana. Jamás me perdonaría que le pasase nada por mi culpa.

—Ali, mi hermano ya es mayorcito para tomar sus propias decisiones, así que tu no puedes tomarlas por él. Es su decisión si quiere ponerse en peligro o no. —dice Katherine— Además, su novia sería una hibrida que es capaz de correr más rápido que el sonido, ¿enserio crees que le puede pasar algo?


Alisha asiente ante la lógica de su amiga. Tiene razón. No solo puede correr más rápido que el sonido, sino que también siente cuando Stiles está en peligro, así que podría salvarlo de cualquier cosa en un abrir y cerrar de ojos. Además, Kattie también tiene razón en que su hermano es mayorcito para tomar sus decisiones. Ella no puede decidir por otra persona y ni mucho menos lo haría. 


—¿Y tú que te traes con mi hermanito Hale? —sonríe Alisha mientras ambas se sientan— Vi que salisteis agarrados de la mano y que os mirabais muy íntimamente. 

—Vino a dejarme claro en que no cesara sus intentos de conquistarme. Que no me agobiara, pero tampoco me dejará tranquila. —responde Katherine, pasando sus dedos por el collar— Y me regalo este collar.

—Dios, es precioso, Kattie. Derek tiene los mejores detalles del mundo. —dice Alisha, observando el collar con una sonrisa— Ahora bien, ¿Qué sientes por él?

—¿Si te digo que siento por él me dirás tu lo que sientes por mi hermano con total sinceridad? —pregunta Katherine, obteniendo la afirmación de Alisha— Vale, entonces si. Con él me siento segura, en paz, en tranquilidad. Me siento feliz a su lado, es una alegría que no puedo describir y que solo siento con él. Me siento en las nubes cuando está cerca de mi. Desde que le conozco siento que la brisa del aire es más fresca y que los árboles son incluso más verdes. Amo reírme de sus chistes malos. Amo la transparencia y la confianza que tiene conmigo. Amo que me lo cuenta todo sin dejar que se le escape un mínimo detalle. Con él me siento como nunca me he sentido; como la mujer más afortunada de este puto universo. 

—En definitiva, que estás tan enamorada de él como él está de ti. —sonríe Alisha, dejando a un lazo su jugo— Te entiendo muy bien, Kattie. Me siento así con tu mellizo. Se que tiene gracia que lo diga porque soy única en mi especie, pero con él me siento única y especial. Cuando él me mira no ve a una hibrida, sino a una persona normal y eso me hace sentir aún más cómoda y agradable. Me muestra que no me tiene miedo y que incluso me cuida por encima de todo. Me gusta escucharle hablar de sus teorías locas de Star Wars y me gusta que me hable acerca de cualquier tontería que se le ocurra. Amo escuchar sus locos y maravillosos planes y ver como me incluye en ellos. Amo que siempre se ponga delante de mi, incluso a sabiendas de que soy inmortal. 

ÁGAPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora