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Capítulo 182: Porque a ella no le importaba.

En la Residencia Lu.

Después de haber convencido a pequeño tesoro para que se durmiera y haber aplicado una mascarilla facial, Ning Xi se estaba preparando para tener una buena noche de sueño cuando la pantalla de su teléfono se iluminó de repente. Hubo una llamada telefónica entrante.

El identificador de llamadas mostraba el nombre: Ning Yaohua.

Ning Xi entrecerró los ojos ligeramente y salió al balcón para atender la llamada.

- Hola. -

- ¡¿Qué tipo de saludo es "hola"?! ¿No sabes cómo dirigirte a tu padre con respeto? ¡¿Dónde están tus modales?! -

- ¿Estás seguro de que quieres pelear conmigo por esto de nuevo? -

- En realidad, desearía que no fueras parte de la familia Ning, pero la sangre de nuestra familia corre por tus venas. ¡Ese es un hecho que no puedo borrar! Cualquier cosa sucia que hayas hecho afuera, en última instancia, traerá vergüenza a nuestra familia Ning. -

- Je, las cosas sucias que he hecho ¿Eso fue algo que Ning Xueluo dijo de nuevo? -

- Xueluo ni siquiera necesitó mencionar algo así. ¡Todos en Internet dicen eso! ¡Están diciendo que eres venenosa y que no te arrepientes y que.. que eres una mujer mantenida que glorifica su desvergüenza y hace alarde de sus sucias acciones delante de todos! -

- ¡No me digas que te estoy acusando mal! Envié a alguien a esperar fuera de tu apartamento durante varios días, pero nunca regresaste. ¿Por qué no me dices dónde te has estado quedando estos últimos días? ¿Y de dónde sacaste ese dinero? -

- Te lo advierto, Ning Xi. Te estoy dando una última oportunidad. ¡Vuelve ahora mismo y discúlpate con Xueluo! Además, ya le he conseguido un trabajo decente en una sucursal de Singapur. Sus boletos de avión ya están reservados. ¡Empaca tus cosas y vete pasado mañana! -

Ah, la había exiliado una vez hace cinco años. Cinco años después, en realidad quería exiliarla nuevamente.

Ning Xi enfatizó cada palabra mientras hablaba.

- Presidente Ning, aunque tengo la sangre de la familia Ning corriendo por mis venas, además de contribuir con un solo espermatozoide, nunca me criaste ni en un solo día. Incluso si mi reputación cae al fondo del Océano Pacífico, usted no tiene derecho a criticarme y tiene aún menos derecho a involucrarse en mi vida. -

- ¡Ning Xi! ¡Qué descaro! ¡Será mejor que pienses mucho en las consecuencias de provocarme! Tú...-

Ning Xi colgó inmediatamente, cortando los gritos que venían del otro extremo del teléfono.

Esta vez, su corazón estaba extrañamente tranquilo. Ella no estaba enojada. Ella no estaba decepcionada. Definitivamente no estaba triste.

- Ning Xi. –

Una voz suave la llamó de repente desde cerca.

Ning Xi volteo la cabeza solo para ver a Lu Tingxiao mirándola ansiosamente desde el balcón vecino.

Ning Xi habló con cierta sorpresa.

- Eh, Lu Tingxiao ¿Aún no has dormido? -

Lu Tingxiao caminó hasta el borde de su balcón, en el lado más cercano al de ella.

- Escuché algunos ruidos provenientes del balcón, así que salí para echar un vistazo. ¿Estás bien? -

Ning Xi se encogió de hombros casualmente.

- Estoy bien. Ning Yaohua me da las mismas líneas cada vez que llama. Probablemente ya pueda recitarlo de memoria. -

Lu Tingxiao no era muy bueno para consolar a los demás. Él extendió la mano por el espacio entre los balcones y le frotó la cabeza.

- No te sientas triste. -

Ning Xi se rio. Bajo la luz de las estrellas, su expresión era tranquila y serena.

- No estoy triste. En este mundo, los únicos que pueden lastimarnos son los que nos importan. Cuanto más nos preocupamos por ellos, más nos duele. Pero ahora, no me voy a lastimar más. -

Porque a ella ya no le importaba.

Esa vez en el hospital iba a ser la última vez que se sentiría triste por esas personas. Nunca más.

- ¡Está bien! ¡Me voy a la cama ahora! ¡Todavía tengo que levantarme temprano mañana! ¡Buenas noches! – 

Ning Xi lo saludó con la mano.

- ¿Levantarse temprano? No hay nada planeado para mañana. Puedes dormir un poco. -

- Me levanto temprano para comprar ingredientes. -

- ¿Por qué estás comprando alimentos? –

Lu Tingxiao no entendió.

- ¡Para preparar una comida, por supuesto! Prometí que cocinaría para ti y para pequeño tesoro la última vez, pero lo he pospuesto durante tanto tiempo que todavía no he hecho ni un platillo para ustedes. -

- Te acabas de recuperar. No hay prisa. -

- Es solo comprar algunos alimentos y cocinar una comida. Eso no es nada agotador. Además, resulta que mañana tengo algo de tiempo libre. ¡Muy bien, eso está arreglado! Oh, sí, recuerde comer menos en el desayuno mañana para que pueda ahorrar algo de espacio en el estómago. ¡Definitivamente les haré mucha comida a los dos que desearan tener un estómago extra! -

Lu Tingxiao se rio entre dientes cuando vio su expresión de confianza.

- Está bien. -