28. Sumergir

1.4K 78 27
                                    

Jefferson

Presente

Rojo.

Ese era el único color que podía ver a través de mis ojos. Ni siquiera podía pensar con claridad, y lo único que me venía a mí mente era violencia, enojo, ira, y venganza. Mis venas estaban llenas del deseo de ir y golpear a alguien, lastimar a alguien, a Owen.

Lucas seguía hablando, y su maldita boca no se cerraba y si continuaba así, se la cerraría con mis propias manos porque no podía seguir escuchando más sobre la cadena de desgracias que ocasionó en Owen en Alice, y por más que quisiese culpar a mi mejor amigo por permitirle desde un inicio a ese pedazo de basura que se acercara a ella, el único culpable era Owen.

Mi cabeza latía y dolía como el infierno.

—¿Es en serio? —dijo Blake, poniendo una mano sobre mi hombro. Eso de alguna forma me sacó por completo de mis pensamientos.

—Sí, y no me preguntes más porque no sé más—respondió Lucas.

—Él es un pedazo de mierda—mencionó Jonathan, podía sentir el enojo en su voz.

Creía que todo también.

—Eso ya lo sabemos—dije—, por algo para lo único que ha servido estos días es para joder y ser un saco de boxeo humano—suspiré—. Debí haberlo matado ese día en el ring.

Blake me dio un apretón en el hombro y me brindó una cálida sonrisa. Él podía tener un carácter muy cambiante, un día podía ser la persona más alegre del mundo y al siguiente ser un dolor de culo gigante, pero siempre sabía cómo ser la calma en momentos así.

—Les juro que no sé qué hacer—Lucas pasó una mano por su cabello, haciéndolo hacia atrás—. Por eso tuve que preguntarle a Alice si tenía la libertad de contarles para encontrar una forma de resolverlo. Solo voy a volverme loco.

—Creo que lo más conveniente es hacer las cosas despacio, sin alertar tanto a los demás, porque bueno es un asunto delicado—sugirió Blake—. Hay que investigar si realmente Owen tiene lo que dice tener e intentar deshacernos del material sin que él se dé cuenta, es decir, recurrir a los contactos anónimos de Jonathan para hackear sus dispositivos.

—¿Y si no funciona? —arqueé una ceja.

—Va a funcionar—afirmó Jon.

—Pues entonces procederemos al plan b—añadió Blake.

—¿El cuál es...? —preguntó Lucas.

—Contratar un matón y acabar con él.

—Me agrada más esa idea—dije.

—No enviaremos a matar a nadie, no somos psicópatas—mencionó Jonathan.

Blake bufó y puso los ojos en blanco.

—Me gustaría que también pensáramos en como decirle a Alice acerca del plan sin ocasionar que sobre piense todo lo que pudiese ocurrir o no, aunque es imposible evitar eso, pero quizá intentar no someterla a tanta presión porque merece ya algo de paz y tranquilidad—dije. Me preocupaba demasiado el cómo estaba sobrellevando los últimos eventos; en mi cabeza rondaba también el recuerdo de cómo se puso cuando me dijo que su madre estaba enferma.

—Sí, eso también. Entonces haremos lo siguiente—Lucas se aclaró la garganta y se mojó los labios—: Jonathan tú te encargarás de localizar a tu contacto y nos informarás sobre cualquier cosa que sepas, y si no funciona, entonces tendré que pedirle a Alice que le cuente a papá, porque de ninguna manera voy a permitir que sea expuesta de esa forma.

TOMEMOS UN PASEO © [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora