Veintiocho

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Aquella tarde, al entrar al restaurante Sanji recibio un amigable y amoroso recibimiento de parte de las chicas quienes pasaron de Zoro, el cual parecía congelado allí en la puerta, seguía con la mirada a la tercera chica allí en el salón que se paseaba de aquí para allá atendiendo y limpiando algunas mesas, la seguían con los ojos fijamente, cada acción, su cabello, su rostro, el cuerpo todo de ella, su olor...

-su olor... ¿Cómo podrían olvidarlo? - pensó confundido.

Completamente en shock, el mundo a su alrededor se detuvo durante largo rato, Sanji se detuvo pasos más adelante y volteo a observar a Zoro y el porque no avanzó con él, lo siguió con la mirada mientras el peliverde seguía con la mirada a la otra chica, frunció el ceño largamente en cuanto lo vio caminar hacia ella, parecía hipnotizado y eso consiguió remover los sentimientos de Sanji, las chicas también lo vieron boquiabiertas ¿Cómo podía ser tan descarado?

Zoro por su lado no estaba pensando con claridad, las manos le sudan horrores y sentía como su cuerpo temblaba con pánico, se movió por inercia y no se dio cuenta cuando fue que tomo la mano de la chica y jalo de ella con suavidad para poder ver su rostro más de cerca.

-Kuina - murmuró realmente sorprendido, su corazón dio un vuelco terrible y sintió como comenzaba a doler, la chica de inmediato lo vio a los ojos, sus mejillas se enrojecieron con furia sorprendida de laa acción del peliverde.

No supo que responderle, Zoro la observa con esa intensidad marcada, no suelta su mano ni se mueve, esta congelado no puede.

-estas viva... - susurró y sintió como sus ojos podrían desbordarse rápidamente, no pudo evitarlo y la abrazo con fuerza, su pecho se estrujaba con furia y no podía juntar sus ojos debido a la impresión que le causó ver a la chica.

-se-señor... - murmuró la chica realmente apenada, no correspondió su abrazo porque en realidad la tomo por sorpresa yo no... No soy... Mi nombre es Tashigi... Señor - comentó apenada.

Lo siguiente que lo descolocó fue el fuerte estruendo que provocó la puerta de la entrada volviéndolo un poco a la realidad, cuando se dio media vuelta buscando a Sanji con la mirada fue que recibió una potente bofetada de parte de Rebecca que lo veía realmente molesta.

-¡idiota! - le grito y volvió a golpearlo - ¡como te atreves! - iba a golpearlo otra vez pero fue detenida por la mano de Zoro quien entró en más pánico aun al no ver a Sanji.

-¿dónde está ? - paso de Rebecca mirando a todos lados otra vez.

-se fue...

-mierda

Corrió afuera, miro a la izquierda y a la derecha luego, no lo vio por ningún lado ¿que tan lejos podía llegar un omega embarazado de cinco meses? * Zoro supuso que no muy lejos pero entonces ¿porque no estaba por ningún lado?

Comenzó a doler su pecho con fuerza ¿como pudo ser tan imbécil?... La chica en el restaurante realmente le causó una impresión terrible y no pudo evitar pensar en esa mujer a la cual siente que no ha podido dejar de amar, se distrajo y descuido a Sanji... Justo cuando las cosas parecían ir un poco lentas...

-¡Sanji! - grito desesperado buscando una respuesta.

Rebecca salió detrás de Zoro con el mismo semblante serio de antes y apunto a la izquierda - Viví corrió detrás de él...

Mi Gran AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora