Por favor no grites

Capitulo 18

Maratón 8/?

POV Narrador

Ambas estaban exhaustas lo que ambas pensaron que sería un mañanero corto se convirtió en horas de sexo desenfrenado.

La primera en abrir sus ojos fue la pelinegra que podía sentir el cuerpo de la rubia pegado al suyo.

- Oye muñequita. Dice dándole suaves besos en su cara.

- Mm... deja dormir.

- No tienes hambre.

- Si, pero me duelen mis piernas. Dice acurrucándose más en la pelinegra.

- Bueno pues te cargo mujer. dijo alzando a la rubia y llevandolas a la ducha.

- No. dijo infantil.

- Si preciosa vamos a ir a tener un desalmuena. dijo a lo que la rubia la miro como que es eso.

- ¿Que es eso?. dijo al sentir la lluvia artificial de la ducha.

- Pues todas las comidas que nos hemos saltado princesa. dijo para bajarla de sus brazos poniendo sus pies sobre los suyos y poniéndole un poco de shampoo.

- Mm... recibiré siempre este tipo de trato. Dijo al sentir como la pelinegra le hacia un masaje en su cuero cabelludo.

- Claro preciosa ahora somos amantes asi que siempre te tratare con esta delicadeza dujo para continuar con el masaje.

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30 Minutos despues

Ambas estaban vestidas y listas para salir, la rubia caminaba de una manera graciosa para la pelinegra, la cual la observaba.

- Mm... pues mira que si te deje sin poder caminar.

- Porque eres suave al principio y luego eres tan bruta. dijo intentando caminar mejor.

- Ven aquí. dijo alzándola para subir al ascensor el cual para suerte de ambas iba vacío así que la pelinegra podía seguir cargando a la rubia cosa que hizo hasta sentarla en una mesa.

- Que vas a querer comer hoy.

- Pasta. 

- Muy bien. dijo mirando a la rubia.

- Voy a llamar al mesero.

Este llego a los pocos minutos tomo las ordenes y ambas comenzaron a hablar respecto a lo que estaba ocurriendo.

- Entonces ahora somos. dijo y fue cortada por la pelinegra.

- Amantes bonita y no olvides lo que hablamos nada de decirle esto a alguien sobre todo sobre mi miembro.

- Mm yo feliz con que nadie sepa sobre tu miembro.

- Te molesta mi condición. dijo mirándola fijamente a los ojos.

-  Para nada ya sabes lo mucho que me haces gozar en la cama solo que prefiero que ninguna lagartona sepa lo que tienes entre las piernas y tanto me gusta. dijo mirando de la misma forma a la pelinegra.

- Eres bastante celosa mujer. dice con una sonrisa.

- Como no ser lo teniendo en cuenta que eres millonaria, que eres una maldita coqueta y que no me gusta compartir. dijo mirándola de arriba a abajo sabiendo que todo lo que había dicho era verdad.

- Esta bien princesita si tu lo dices. dice cortando la conversación al notar que el mesero llegaba con sus pedidos.  

Comieron entre risas y como era de esperarse la pelinegra cargo en brazos a la rubia.

Al llegar a la habitación notaron que habían limpiado la de la pelinegra y ingresaron a esa habitación se alistaron para ver una serie y se quedaron dormidas juntas.