La Corda Perdita [Jackson GOT7] (FanFic)

Capítulo 9 "Tierna Mejilla"

La mente de Li Mei se había perdido, la pregunta había logrado confundir todos sus sentidos y ninguna respuesta se formaba en su cabeza. Jackson esperaba algún sonido que saliera de la boca de la muchacha, pero al ver que ésta no hablaba decidió darle una pequeña sonrisa.

-Dejaré que tú elijas la película- Aseguró con la intención de aligerar un poco el ambiente, no había pensado que la pregunta le afectaría tanto a Li Mei.

-No lo sé- No quería parecer descortés ante su invitación pero de verdad no sabía qué hacer ni decir.

-Sólo será una película, no te estoy pidiendo que me ayudes a robar un banco- No pudo evitar largar una pequeña risa ante el comentario del pelinegro. Sus sentidos volvieron a tomar su curso normal y su mente comenzó a asegurarle que una película con el muchacho no estaría mal.

-Está bien- Jackson no pudo evitar sorprenderse ante la aceptación de la joven, había preparado varias frases para lograr convencerla.

-Hoy a las ocho en el cine del centro- Li Mei asintió ante las indicaciones y se fue de manera completamente indiferente hacia sus otros amigos, Jackson rió al ver los cambios tan repentinos de parte la chica.

Li Mei se dedicó a mirar a los chicos junto a ella, su mente no pudo evitar recordarle que hasta hacía unas semanas no conocía a todas esas personas y ahora se encontraba compartiendo mucha parte de su tiempo con ellos. No es que fuera una típica antisocial salida de una telenovela barata, le gustaba conocer personas pero no creía en las amistades eternas. Para ella una amistad no era más que algo pasajero, no había personas, además de su familia, que estuvieran con ella por mucho tiempo. Sus ojos se dirigieron hacia Lay, no pudo evitar sonreír al verlo tan concentrado en su dibujo, él había sido el primero en acercarse de una manera tan afectuosa y siempre dándole una sonrisa amistosa, definitivamente envidiaba la amabilidad y facilidad que tenía el muchacho para entablar alguna relación con las personas. Su atención pasó hacia Naomi, llevaba demasiado poco conociéndola pero había logrado ver que se trataba de una chica dulce sin prejuicios hacia las personas y tenía un corazón dispuesto a abrirse a cualquiera que deseara conocerlo, algo que Li Mei también anhelaba. Su sonrisa se ensanchó al ver los ojos sonrientes de Mark, el muchacho le caía tan bien que la asustaba, tal vez su sentido del humor logró atraparla, o bien su disposición a pedir disculpas cuando veía que se había equivocado, como el día del cafetería, hizo una mini comparación entre él y ella y se dio cuenta que las veces en su vida en las que había pedido perdón se podían contar con los dedos de las manos. Por último le dio una pequeña mirada al pelinegro, éste a diferencia de todos, se encontraba observándola. El día en el que lo conoció se hizo presente en su mente, aquel día en el que por un momento lo odió, quería tomarlo del cuello y ahórcalo por haber provocado la muerte de su preciado arco, pero ahora se encontraba a horas de ir al cine con el joven. Había algo en Jackson que hacía que le atrajera, aunque lo había tratado mal varias veces y lo había atrapado robando una joyería, él muchacho seguía en su camino y por lo que podía ver, no tenía intenciones de irse.  

-¿Qué tanto piensas?- Una voz hizo que la cadena de pensamientos que había dentro de la cabeza de Li Mei se cortase de una manera brusca. Dio una rápida mirada a todos y pudo darse cuenta que todos los ojos se habían dirigidos hacia ella.

-Lo lamento, no pensaba nada importante- Una pequeña risita en su costado captó su atención, le dedicó una mirada muy poco agradable a Jackson haciendo que éste aumentara el volumen de su voz y riera con más fuerza. Todos volvieron a sus actividades, excepto el pelinegro quien se preguntaba qué era lo que estaba pensando Li Mei, la había visto observar a cada uno y quedarse pensando durante unos minutos antes de pasar a la otra persona, en el momento en el que lo observó deseó con todas sus fuerzas saber qué era lo que pensaba, estaba seguro que en ese momento su nombre había estado dentro de la mente de Li Mei.