Tic tac
Tic tac
Tic tac
El reloj repite con paciencia, sin sonidos que lo opaquen canta las 7. La mañana trae a los niños de Wellston un nuevo día escolar.
Para Arlo, es diferente.
Mientras los rayos del sol bañaban sus parpados y llenaban su visión de rojo, no pudo evitar pensar en lo liviano que se sentía, pero con la desagradable sensación de vacío en su estómago.
Al abrir los ojos se da cuenta que, en algún momento, se quedó allí, con la mitad del cuerpo sobre la cama y los pies colgando.
Sobre él hay una manta.
Pero no hay nadie allí.
John lo abandonó.
Se fue y lo dejó.
FIN.
ESTÁS LEYENDO
La Depresión del Rey | Jarlo
Fanfic¿Hasta qué punto se puede romper a alguien? ¿Hasta dónde debe llegar para que el resto note sus llamados de auxilio? aquellos silenciosos, disfrazados pero desesperados. Más importante ¿Cómo puede salvarse a alguien tan hundido en la oscuridad como...