{Milo}
- ¿Que significa todo esto? -. Hablé confundido y molesto.
- no te puedo responder nada, lo siento, si tanto necesitas saber, debes buscar tus respuestas en otro lado, lo siento -. Dijo lo más profesional que pudo, es verdad, no puedo pedirle explicaciones a ella, no tiene nada que ver.
- está bien -. Respiré hondo para intentar controlarme.
¿Alexis estaba intentando demandarme con pensión alimenticia? ¿Era una forma de amarrarme a la mala?- bueno, espero que pueda llegarle el mensaje a la persona en cuestión de que necesito comunicarme con ella -. Y allí colgó.
Todo en la cabeza me daba vueltas, ¿qué es lo que estaba pasando?
De inmediato comencé a caminar totalmente enojado hacia la puerta del tocador, no podía dejar eso así.
Esto estaba siendo demasiado extraño, Alexis estaba llevando todo esto muy lejos.- ¡Alexis Ren! -. Grité golpeando la puerta con rabia.
- ¿que quieres? -. Habló de vuelta alzando la voz.
- ¡sal de ahí! -. Comencé a golpear mas fuerte, mis puños solo se dejaban caer contra la puerta, la furia interior me estaba carcomiendo.
¡Como se le ocurre hacerme eso! ¡Le he dado casi todo mi sueldo! ¿Y quiere sacarme mas dinero? ¿Demandarme? Esto es ridiculo, ¿que le pasa a esta maldita loca?
A los segundos de golpear y golpear, salió ella con una bata de baño.
- ¿que es lo que te ocurre? -. Me habló cabreada.
- ¿qué es lo que te ocurre a ti? ¿Demandarme por una pensión alimenticia? -. Le pregunté enfadado, fuera de mis cabales.
- ¿de qué estás hablando, Milo? -. Dijo avanzando hacia la sala, como si todo lo que le estaba diciendo fuese una locura.
- ¿de que estoy hablando dices? -. Tomé un respiro para no alterarme tanto. - llamó la abogada, LA ABOGADA, diciendo que estabas haciendo una demanda por pensión alimenticia, ¿QUE RAYOS ESTÁS HACIENDO? -. De tanta impotencia que tenía dentro de mi ser golpeé la pared con todo lo que tenía dentro.
- cálmate, ¿quieres? -. Se sentó en el sofá para ver a Harry.
- MALDITA SEA ¿COMO QUIERES QUE ME CALME? Te doy casi todo mi maldito sueldo -.
- no es lo que piensas -. Habló bajito.
- dime que es, ¿QUE ES? RESPONDE -. Me acerqué a ella enojado, esperando que hablara de una vez.
- Milo, simplemente no puedo decírtelo -. Me miró suspirando.
- ¿PORQUÉ NO? -. Me estaba importando una mierda todo, eso ya me sobrepasaba.
Salí de la casa dejando un portazo detrás de mi, estaba agotado de la maldita vida, esto no era lo que yo esperaba para mi, ¿que hice para merecer todo esto?