Extraordinary [Milo Manheim y tú]

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{Milo}

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Alexis: ya te lo dije, cariño, no es nada, ignóralo

Ya estaba totalmente harto de que me negara las cosas, si tanto me va a demandar, mínimo me gustaría que me dijera las cosas a la cara, que poca mujer es, sigo muy molesto, ya que hace tres semanas me enteré de su maldito y macabro plan.
De seguro está buscando una forma de que me quede con ella, quizás de que trata todo esto; me estoy sintiendo completamente ansioso sobre el tema.

Me caerá la ley, no puede ser, y lo peor es que _________ es su abogada, ¿que haré contra eso? Es la mejor abogada del mundo, de seguro me quitan todo mi sueldo, no tendré nada para comer, para mantener mi casa, NO TENDRÉ NADA POR CULPA DE ESTA INSIGNIFICANTE RATA.

Eso es lo que es, una rata, quiere robarme todo lo que tengo, incluso ni siquiera puedo ver a mi hijo como debería, Justo cuando estaba pensando en que podríamos vivir juntos al fin, ella lo arruina todo; cuando quiero dar un paso, ella me obliga a retroceder.

¿Qué pasará después de todo esto? Desconozco todo esto de las leyes, desconozco todo el tema, estoy tan ansioso, no puedo controlarlo, Alexis no me quiere decir absolutamente nada, ¿que le pasa? ¿Acaso no merezco saberlo? Diablos diablos diablos, sabia que algún día se aburriría de mi y haría algo así, es una loca.

¿Que debería hacer? ¿Debería conseguirme un abogado?

Estaba tan molesto, tengo que admitir que tenía mucho miedo de todo esto; en pocas palabras tengo un pésimo presentimiento.

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Al salir del trabajo no lo dudé ni un segundo y tomé otra ruta, estaba completamente asustado, debía solucionar las cosas a cómo se lugar.
Llegué a esa casa completamente ajena, pero no tanto y golpeé esa puerta con desesperación, necesitaba una pronta solución.

- ¿Milo? -.

- lo siento por venir así -. Me disculpé y tomé un respiro. - estoy muriéndome en ansiedad -.

- ¿qué? ¿Que te trae por aquí? -. Preguntó un poco nerviosa, la misma expresión del otro día, estaba completamente asustada, como si otra vez hubiese visto un fantasma.
Todo en su casa seguía igual, el marco de la puerta, y la entrada, incluso hasta el mismo tapete, seguía en excelentes condiciones para haber pasado tanto tiempo.

- ¿recuerdas la llamada del otro día? -. Al ver los alrededores que me traían recuerdos nostálgicos, comencé a sentirme un poco nervioso.

- si -. Se apoyó en la pared y cruzó los brazos haciendo alusión a que estaba escuchándome.

- bueno, tengo miedo, mucho miedo para ser sincero -. Rasqué mi nuca, ella frunció el ceño, se veía tan linda, a pesar de su mirada seria y fría. - bueno, Alexis me está demandando a mi y no quiere decir nada, ¿que debo hacer? ¿Buscar un abogado? Ha pasado un tiempo que no tengo respuesta alguna, no se que hacer, estoy desesperado, ¿que me pasará? -. Dije entrando en una desesperación total, el miedo era notable en mi.
Ella cambió totalmente su expresión.

- a ver, necesito que te calmes en primer lugar, ¿quieres pasar? -. Habló serena.

- ¿puedo? -. Le pregunté por cordialidad, volver a pisar su casa era algo extraño para mi.

- si, no querrás alarmar a los vecinos ¿o si? -. Se dió la media vuelta y entró, pues la seguí. - adelante toma asiento. - señaló el sofá -. Pues claramente le hice caso.

- ¿y bien? ¿Que puedo hacer? -. Lancé inquieto.

- bien, primero, vamos a calmarnos, te traeré un poco de té -. Se levantó y comenzó a caminar en dirección a la cocina.
No pude evitar no mirarla.

- no es necesario -. Dije, ella simplemente siguió caminando, me ignoró completamente, no quería ser un aprovechador.

Sin embargo, comencé a mirar todos los alrededores de la casa, habían muchas cosas que habían cambiado, algunos muebles habían cambiado de lugar y otros habían sido reemplazados, se veían mucho más nuevos; el piso era totalmente diferente, pasó de azulejos a piso marmolado.
Pero lo demás seguía exactamente igual; seguía la misma característica foto del padre de __________ que había fallecido hace muchos años, pero, ahora habían muchas fotos de su hijo; el pequeño tenía su gracia, era muy adorable, siento que lo había visto antes, como si lo conociera de mucho antes.

Interrumpieron mis pensamientos, venía __________ con una bandeja con dos tazas en ella. De inmediato me levanté y le ayudé.

- muchas gracias -. Procedió a sentarse. - adelante, sírvete té para que puedas relajarte -. Tomé la taza lo más obediente posible.

Soplé para poder beber del té y comencé a mirarla, ella seguía siendo muy bella, demasiado bella, la más hermosa de todas las mujeres existentes en este maldito mundo; es y fue la única persona de la que me he enamorado en esta vida.

- bien, ¿te sientes más relajado? -. Dijo mirándome.

- si, bastante -. Contesté acomodándome. - el té ayuda -. Señalé la taza.

- me parece bien -. Sonrió, hace tanto tiempo que no la veía sonreír, me hizo sentir vivo de nuevo, totalmente.
Me había decidido, la recuperaría, a cómo de lugar, ya no puedo seguir sufriendo así, pero primero lo primero.

- ¿puedes ayudarme en esto? ¿Sobre lo que te consulté anteriormente? -. Dejé la taza sobre la mesita.

- bien, Milo, debes entender que no puedo revelarte ninguna información sobre este caso, ninguno -. Dijo ella dejando su taza también.

- pero, al menos ¿puedes explícarme que me va a pasar? ¿Que debo hacer? -.

- bueno, en primer lugar, esperar a que te llegue la citación al tribunal, y tener 5 días hábiles para conseguir un abogado y hacer la contestación de la demanda, para comenzar el proceso, pero sólo puede pasar cuando te llegue la citación, y no te va a pasar nada, no te preocupes, de eso se encargará tu abogado en ese caso, cruzo los dedos, todo funcione bien -. Habló sinceramente, sentí su serenidad, volvía a ser la misma de siempre, tan amable como siempre.

- ¿solo eso? -.

- si, tranquilo, todo se resuelve a base de la honestidad, normalmente las sentencias no son injustas -. Dijo intentando calmar el asunto, le estaba funcionando muy bien.

- está bien, creo -. Hablé mirando al suelo concentrado en lo que debía ser. - bueno, es mejor que me vaya, no voy a molestarte más -. Sentí que debía irme, ya no había nada más que debía hacer allí, después del mal rato que le causé, de todas maneras me recibió muy bien para ser un viejo amor que debería ser olvidado.

- bien, te acompaño a la puerta -. Señaló con los dedos la entrada, en aquella mano algo brilló, miré con detención, se trataba del anillo que le di, más bien que le arrojé esa vez. ¿Que significaba eso? Rayos ya no podía pensar después de todas las cosas que tenía en la mente.

Caminé a la puerta, y estaba decidido a irme y no seguir aquí, estaba apagando mi energía, ya que me encontraba totalmente confundido, necesitaba un tiempo de pensar a solas.

- Ooh, I've got a feeling, If you get to know me -. Dijo inaudible, sin embargo, logré escucharla.

- adiós, _________, gracias por todo -. Me di media vuelta, necesitaba pensar en lo que importaba ahora, sin embargo ya estaba seguro, quizás pueda recuperar a ________, pero no todavía, habían cosas de las que debía encargarme primero.

- adiós... Milo, espera -. Sus palabras me detuvieron -. Ve al tribunal central civil oeste el próximo martes a las 9:00 am, créeme te servirá, ve con tiempo y formal; dejaré tu nombre en recepción, debes anunciarte con tu identificación de ciudadano y te mostrarán a donde debes ir -.