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· s t u p i d˚ ༘♡ a l p h a ·˚༄

Al día siguiente, Seonghwa miraba con pena tener que entregar el lapicero, le gustó mucho, era bonito y no evita querer uno porque le resulta muy bonito. De hecho, pasó por varias tiendas buscando el lapicero y no lo consiguió en ninguno de los negocios. ¿Cómo hizo Hongjoong para conseguirlo? Bufó, anda con un puchero en sus labios mientras es llevado por su hermano de la mano al salón de clases.

Incluso cuando Yunho lo saludó, solo trató de hacer una sonrisa, aunque sabe que fue más una mueca. No quería ser de esa manera con la persona que le gusta, el alfa que lo trata bien y no se olvida de saludarlo en cada mañana.

Seonghwa tomó asiento mientras juega con sus dedos. Su molesto compañero de asiento no se ha aparecido todavía, bufa, sintiéndose malhumorado y un poco incómodo por tener tanto espacio disponible.

Yeosang se ríe y su compañero, Yunho no entiende nada.

Cuando Hongjoong llega, Seonghwa lo fulmina con la mirada. Al alfa no le inmuta esa mirada, porque la recibe seguido. Hongjoong ve esa mirada amenazante como otra forma de sonreír de Seonghwa para él.

—Buenos días, flor de cerezo. —dice en referencia al color de cabello de Seonghwa.

—Eran, cabello de oreo. —hizo una mueca con sus labios.

Hongjoong se rio haciendo que el mayor arrugue las cejas y se dedique a sacar sus libretas al acercarse a la hora de empezar las clases. Hongjoong deja un pequeño paquete de galletas a su mejor amigo y también a su rival, Yunho. Hongjoong toma asiento siendo ignorado por Seonghwa.

Si algo sabe Hongjoong de Seonghwa, es cuando lo lastima con sus acciones, dejándolo por fuera. Su propio lobo gruñe por hacer sentir mal al omega de cabellos rosados.

Seonghwa podía ser ignorado por cualquier otra persona, despreciado y demás, pero su lobo se sentía lastimado en sobremanera cuando se trataba de Hongjoong. Cada vez que el alfa le hacía una maldad, una travesura, se sentía muy herido.

Siempre ignora ese pesar diciendo que su lobito es sensible cuando ha creado vínculos desde pequeños con otras personas, y Hongjoong es ese vínculo que en el trayecto de los años lo hace sentir un poco triste y enojado.

Sin darse cuenta, Hongjoong le agarró la mochila, metiendo dentro un paquete de galletas más grande, con el triple de cantidad de galletas y solo para Seonghwa. Lo colocó de nuevo en dónde estaba y cuando el profesor entró, Seonghwa se recordó del lapicero del alfa.

Aun con su semblante decaído, fue a buscar el lapicero en su mochila, consiguiendo el gran paquete de galletas. Su corazón se llenó de felicidad sin importar que haya sido Hongjoong la persona que se lo dio, lo sabe, ese tonto alfa y su hermano son los únicos que saben su sabor favorito de galletas, Yeosang no podría ser porque el mismo le prohíbe comer cosas dulces seguido y se niega a comprarle una gran cantidad como esa.

El paquete tenía una pequeña nota «Gracias por cuidarme por casi dos semanas, Hwanie».

Se mordió el labio inferior y neutralizó su semblante, no quería sonreír por esto, algo mínimo, pero los pequeños detalles son los más agradables.

Sacó el lapicero y se lo tendió a Hongjoong sin mirarlo.

—Seonghwa, no te pedí prestado un lapicero hoy. —dice divertido Hongjoong reconociendo el lapicero de conejito.

—Yo sí, te lo estoy devolviendo.

Hongjoong suspira, agarra el lapicero y lo deja en la mesa del de cabellos rosados.

❝ Stupid Alpha! ❞ ፧ hongjoong + seonghwa ፧ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora