NARRA ABRAHAM
Abro los ojos lentamente y un dolor de espalda me invade al instante, me quejo en voz baja y miro a mi alrededor sin saber qué hago tirado en el suelo del pasillo. Me levanto lentamente haciendo una mueca de dolor y me giro hacia la puerta que está a un lado de mí, es la puerta de ____......ya recuerdo todo.....
Me acerco lentamente a la puerta y levanto la mano para intentar tocar la puerta pero centímetros antes de golpearla me detengo y me congelo. No puedo hacerlo, no me atrevo a hablarle ¿Qué le voy a decir? ¿Que fui un cobarde y no pude decírselo?
Doy la vuelta y camino a mi habitación rápidamente, llego y me dirijo directamente hacia mi cama. Me lanzo sobre esta y me intento acomodar, pero por más que me mueva el dolor aún sigue. No puedo creer que me haya quedado dormido toda la noche en el suelo.
Miro al techo sin pensar en nada, o al menos intentando no pensar en nada. Repaso cada segundo de ayer y la rabia crece con cada segundo que pasa.
Todo iba tan bien, ayer fue genial, el día de campo fue maravilloso y su sonrisa al llegar, el abrazo que me dio tan de repente fue genial, no quería arruinarlo diciéndole que ya no la vería. Tengo que hacer algo, fui un idiota al dejarlo pasar, al permitir que ella se enterara de todo de la forma menos apropiada, por accidente.
No sé cómo lo haré, pero no me separaré de ella tanto tiempo, no puedo hacerlo y sé que ella tampoco quiere eso.
Me dirijo a mi baño y tomo una ducha larga, pensando en qué podría hacer.
Al terminar me visto y me miro al espejo. Me veo tan diferente, soy el mismo físicamente pero por alguna razón me siento otro. Ella me ha convertido en otro.
Me giro hacia la puerta de mi habitación para salir y cuando estoy a punto de tocar la perilla de la puerta una idea cruza por mi mente, ya sé qué voy a hacer, ya lo sé. No permitiré que me separen de ___, ni ahora ni nunca.
Salgo corriendo de mi habitación y sin despedirme de nadie ni desayunar nada salgo de casa y tomo el carro de mi padre. Estoy emocionado, no puedo esperar a decírselo, de seguro esto le encantará.
NARRA ___.
El despertador suena muy temprano, abro los ojos y recuerdo que había olvidado apagarlo ayer, hoy no voy a la escuela. Lo apago e intento volver a dormir, pero no lo consigo. Cansada, me levanto de la cama y tomo una ducha rápida para antes de salir de la habitación, me visto y Tony y yo salimos de nuestros cuartos al mismo tiempo. Nos miramos mutuamente y sonreímos al mismo tiempo, el sincero y amigable, yo sólo lo intento.
Tony- buenos días ____. -- dice frotándose la cara por el sueño.
___- buenos días Tony. -- contesto rogando en mi mente que no mencione lo de ayer.
Tony- ¿Ya estás mejor? -- oh no, esto es lo que me temía.
___- si, gracias -- susurro intentando no hablar mucho del tema.
Tony- me alegra -- contesta sincero -- no te preocupes, yo te defenderé de ese niño, además ya estoy planeando la venganza....
__- gracias, pero no es necesario que me defiendas, Abraham no me ha hecho nada. -- hago una pequeña sonrisa y Tony me mira confundido.
Tony- ¿Cómo que no te ha hecho nada malo? ¡Te hizo llorar! -- se acerca a mí y me mira atento y enojado.
__- lo sé, pero lo he estado pensando y....
Tony- ¿Y...?
__- quizás exageré un poco, yo soy la que debería apoyarlo siempre, y aunque no me guste, no puedo ser un inconveniente para él.
Tony- tú nunca eres una molestia. Ni para él ni para nadie. -- susurra molesto.
Sonrío más tranquila y Tony me sonríe amable para después ambos bajar a la cocina. En realidad me siento muy mal aún, no soporto la idea de separarme de Abraham por tanto tiempo, me destrozaría por dentro, pero cuando llegué aquí me prometí que no sería más una molestia para Abraham y si él tiene que viajar yo tendré que apoyarlo. No puedo detenerlo y no puedo hacer que se sienta mal por viajar. Lo que más me duele es que no me haya dicho ni el motivo por el que se va a ir.
Llegamos y yo comienzo a sacar los ingredientes para cocinar, quiero preparar el desayuno hoy para disculparme con Abraham por lo de ayer.
Tony- ¿Tú vas a hacer el desayuno? -- asiento y lo miro nerviosa.
__- sí, ¿por qué? -- pregunto inquieta, pensando que quizás no le agrade mucho la idea.
Tony me mira unos segundo más sonriendo y comienza a aplaudir y saltar emocionado, un brillo pasa por sus ojos y el rostro se le ilumina.
Creo que es demasiada emoción sólo por una comida...
Ahora que lo pienso, desde que despertó Tony está de muy bueno humor, incluso se levantó muy temprano, debe haber algo que le haga estar tan feliz hoy.
Tony- ¡Que bien! -- grita sacándome de mis pensamientos -- eres muy buena cocinado.
___- gracias -- susurro tímida. Tony se acerca a mí feliz y se coloca frente a mí -- me alegra verte como siempre de nuevo. Te quiero ____.
Sorprendida de la seriedad con la que habla lo miro con los ojos muy abiertos, aún no estoy acostumbrada a verlo tan serio. Sonríe y me abraza fuertemente, le correspondo el abrazo con gusto y todo el miedo y preocupación que sentía desaparecen.
Creo que estaré bien si Tony y Antonio están conmigo, de seguro Susana irá con Abraham.
Cierro los ojos y nos quedamos así unos segundos más.
De pronto escucho los pasos de alguien llegar a la cocina y una bolsa caer fuertemente al suelo.
Xx- ¿Qué están haciendo? -- pregunta la voz enojada. Un escalofrío recorre mi espalada y abro los ojos para mirar a la persona frente a nosotros.
¿Por qué siempre me pasa esto?
ESTÁS LEYENDO
Siempre a tu lado {Abraham Mateo y ____} [MPE #2]
RomanceAbraham- no te vayas ___, por favor... yo... te necesito. -- suplicó, sus ojos me mataban, parecía que estaba a punto de llorar y eso me destrozaba aún más. ___- tengo que irme Abraham, es lo mejor. -- susurré convencida. Abraham- pero no podría s...