NARRA ____
___- ¿A qué te referías con que él no lo sabe? -- murmuré con la vista en el camino.
Manuel- A la razón por la cual tú estás involucrada en todo esto -- contestó normalmente mirando el camino al conducir.
___- Ya lo sabe. Un hombre me quería comprar y ofreció una enorme cantidad de dinero por mí. Todo esto es por mí.
Manuel- Pues, te diré que... creo que sólo conoces una muy pequeña parte de la historia. Y no ___, nada de esto inició por ti. No eres tan especial -- susurró por último.
Anteriormente, si otra persona me hubiera dicho eso hubiera creído que me lo decía para que no me lamentara ni me deprimiera. Pero el tono de odio con el que habló, me dejó sin palabras. Sabía que yo a Manuel no le importaba, ni yo ni mis padres.
Él no diría nada para hacerme sentir bien. Simplemente era imposible. Había algo que yo no sabía y no tenía idea de cómo descubrirlo.
___- ¿Una pequeña parte? -- Repetí confundida.
Manuel me miró de reojo para después fijar su vista en el camino. Se quedó en silencio por unos eternos minutos hasta que después lo escuché suspirar y comenzar a hablar tranquilo.
Manuel- Hace muchos años... según lo que tengo entendido, antes de que nacieras, tus padres solían trabajar para un hombre muy joven pero muy rico. Su trabajo era administrar un pequeño orfanato al fondo de la ciudad. El nombre de este hombre, era Esteban, Esteban Montiel.
Mi cuerpo se tensó al escuchar ese nombre. Mi cabeza dolía y mi vista estaba fija al frente, pero no veía claramente nada. Junté mis manos en un puño y sentí mis palmas frías temblar.
Ese hombre... el dueño, del orfanato en el que estaba y el líder de la pandilla... el que Abraham logró arrestar hace meses... ¿Era el jefe de mis padres?
Manuel entendió mi silencio al momento y se quedó unos cuantos segundos en silencio para que procesara la información antes de seguir hablando.
Manuel- Tus padres estaban tan felices de convivir con los niños que decidieron tener uno propio. Por supuesto, Esteban no estuvo de acuerdo, él no quería encargarse de mantener a un chiquillo más. No quería pagarles más de lo necesario. Pero tus padres eran necios... -- su voz endureció y sus manos sostenían con fuerza el volante del auto. Su tono se fue apagando hasta que se quedó en silencio por un momento, ocultando el odio que expresaba en sus palabras.
Cubrí mi rostro con ambas manos y cerré los ojos para poder respirar y controlarme mejor. Quería llorar, pero no podía hacerlo. Me extrañaba que mis ojos estuvieran secos e intactos. Sin ningún rastro de lágrimas. No podía llorar más. Ya era suficiente.
Manuel- Diez meses pasaron después de esa pelea, hasta que tus padres te tuvieron. Te mantuvieron en secreto hasta que estabas por cumplir los 10 años. Ellos renunciaron sin motivo alguno, o eso creyeron que Esteban pensó. Cuando se enteró de todo, estaba tan furioso de que lo hayan desobedecido que me pidió que llamara a uno de nuestros socios más ricos y peligrosos para ofrecerle a una niña en especial. Para vendérsela. No sé de dónde consiguió una foto tuya de niña, pero sólo eso bastó para que ese hombre esté de acuerdo en comprarte.
Sollocé y cubrí mi boca al instante para poder ahogar los gritos y lamentos que sabía que saldrían. No puedo con esto, es demasiado... ya no quiero oír nada.
__- Basta, por favor... ya no quiero saber más. -- murmuré a punto de llorar
Manuel- ¿Qué? ¡No! Te perderás de la mejor parte. -- No había notado que ya habíamos llegado hasta que Manuel se estacionó en la cochera de la mansión. Apagó el motor y se giró hacia mí, asegurándose de que los seguros de las puertas continuaran puestos -- Cuando por fin cumpliste 10 años, tus padres no te llevaron a dormir con esa niña para celebrar. Ellos creyeron que Esteban les había asignado una última misión. La búsqueda de "una pobre bebé abandonada".
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Siempre a tu lado {Abraham Mateo y ____} [MPE #2]
RomanceAbraham- no te vayas ___, por favor... yo... te necesito. -- suplicó, sus ojos me mataban, parecía que estaba a punto de llorar y eso me destrozaba aún más. ___- tengo que irme Abraham, es lo mejor. -- susurré convencida. Abraham- pero no podría s...