ROYALTY (Taelice)

Cap 47

Lisa y Taehyung se devolvieron a Hampshire días más tarde, cuando el doctor, luego de atender a Lisa y notara que no hablaba casi, le recomendó al esposo de la dama que el campo le haría bien para despejarse y fue cierto, porque al regresar a Hampshire, Lisa conforme fue pasando el tiempo, empezó a sentirse mejor y hasta se olvidó un poco de la verdad de la que se había enterado, concentrándose en seguir la confección de sus diseños, atender a su marido y a la perrita que le había regalado, a la que cada día quería más, pero no todo había sido perfecto.

A su llegada, se había encontrado con que su suegra había vuelto a la mansión, volviendo a imponer sus estrictas reglas nuevamente. Lisa deseó exigirle a su marido que la hiciese marchar, pero Lady Bo-ah se puso por los suelos, argumentando que se sentía muy sola en su residencia de Bath y que era una pobre dama que solo deseaba volver al hogar donde había vivido por años para empezar a conocer a la que era ahora su nueva "hija".

Lisa bufó cuando la había escuchado decir eso, pero a Taehyung si le había interesado la idea, porque también quería a su madre y quería que las dos mujeres de su vida empezaran a llevarse bien, así pues que la había dejado quedar, con la advertencia de que si volvía a meterse con su esposa se iría inmediatamente.

Lady Bo-ah no se había vuelto a meter con ella, incluso cuando intentó deshacerse de la criada embarazada, y ella la había enfrentado, diciéndole que ahora era la princesa principal y la muchacha se quedaba, Lady Bo-ah había bajado la cabeza y no la había rebatido, permitiéndole el control de la casa. Ahora había empezado comportarse amable y complaciente, sin embargo, no confiaba en ella por ser la amiga de su "abuela", que irónico que llevase la sangre de la vieja después de todo. Hubiese deseado no tener nada que ver con esa bruja, pero al menos ya sabía que no era de hija de un hombre desconocido, sino de uno de los hombres que más había adorado en su vida. Recordar a Kyung ho la puso tensa. Él la había venido a visitar también aquí en Hampshire, pero ella no había querido recibirlo, ni tampoco a su madre y ambos habían venido juntos ¿Seguirían siendo amantes? La pregunta rondaba en su cabeza y se preguntó ¿Por qué demonios no se casaban? Kyung ho había sido soltero toda la vida y su madre era viuda ¿Qué problema tenían? Los dos hasta se veían bonitos juntos, se dio cuenta ella, mientras los había visto irse desde la ventana, después de rechazar verlos, entonces se había preguntado ¿Por qué en tantos años no se dio cuenta que entre ellos había chispa? Ella varias veces había cazado a Kyung ho mirando a su madre y viceversa. Ellos siempre habían estado enamorados.

-Hija, en el vestíbulo hay un caballero que te busca. -Lisa levantó la vista a su suegra, quien entraba al comedor donde llevaba más de media hora intentando comer, sin éxito porque toda la comida le caía de la patada. Entonces hizo una mueca por el llamado de la vieja, ese hija lo escuchaba falso e hipócrita, hasta con ironía, fue por eso que le contestó de la misma forma burlesca.

-Madre ¿Qué caballero me busca?

-Un tal Lord Sung Dong II, cariño. Intenté ser amable con él, pero está gritando improperios sobre ti y exige verte a ti y a mi hijo.

Lisa palideció, al ver la mirada triunfante de su suegra se dio cuenta que ella sospechaba que tenía problemas con ese viejo que podían no gustarle saber a Taehyung. Demonios ¿Sería que el vejete se había enterado de la venta del collar de su madre y venía a reclamárselo? Tocaba averiguar, gracias a Dios, Taehyung no estaba en la casa por estar en asuntos de sus tierras y aparceros, así que fue al llamado de Lord Sung y efectivamente, estaba endemoniado en el vestíbulo, porque al verla le reclamó a voz alta que sabía lo que había hecho con el collar que le había regalado.

-Cálmese Lord Sung Dong, si quiere le repongo el dinero. -Propuso ella para hacerlo largarse rápido.

-No, mi Lady. Ya no puedo recuperarlo, porque la persona que lo compró se fue ayer a América y nunca quiso devolvérmelo, por más que le ofrecí varias sumas. Lo que usted hizo es una aberración, y voy a poner al tanto a su esposo de esto. Porque yo creo que él no sabe que usted es una interesada, que como estaba en la ruina aprovechó su belleza para atraparme y se hubiese casado conmigo, si él no hubiese aparecido.