-Acto I-

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-Esp-espera Kacchan, si hacemos esto aquí-

-Has sido tú quien me ha provocado, nerd. No te rajes ahora.

-Es-eso no es verdad.

-Sabes muy bien lo cachondo que me pones cuando bailas frente a mí, haces estiramientos y me miras de forma lasciva mientras lo haces.

-Es-espera aaah~

Gime.

-Shhhh – le cubre la boca con la palma de la mano - Si haces ruido nos descubrirán y no creo que quieras ser observado, aunque por la dureza de tu polla me da que sí te gusta. Eres un pecoso pervertido, Izuku.

El agua de la ducha les quema la piel. Los dedos de Bakugou se cuelan en la boca de Midoriya con la intención de sonorizar los gemidos que tan loco le vuelven mientras con la mano izquierda se apoya en la firme cadera sirviéndose de trampolín para embestirle lento pues sabe bien que eso es lo que más le gusta a su novio.

-Está muy aflojado aquí abajo.- le susurra al oído - ¿Será por haberlo hecho anoche?

-Cá-cállate.

-Eres jodidamente sexy, Deku.- acelera el ritmo dejando un camino de saliva al lamerle la espalda – Siento cómo me tragas hacia adentro, cómo me atrapas. ¿Tanto te gusta? ¿Tanto te gusta que te toque ahí? – Midoriya le muerde los dedos al ser tocado en el punto que más placer le da - ¿Ya estás llorando? – le lame las lágrimas que le saben deliciosas – Antes te quejabas de ser descubiertos pero admite que te gusta follar en lugares públicos – ahora es Bakugou quien gime. Midoriya se ha agarrado a su trasero empujándole - ¿Eeeeh? ¿Quieres que te penetre más fuerte? – Midoriya apoya la frente sobre la pared – Si no me lo dices con palabras – se frena de repente – me detendré.

Ahora es él quien tiene que callar al notar cómo le clava las uñas.

-Cállate y fóllame bien, imbécil.

Bakugou sonríe paseando la lengua por sus puros incisivos. Le penetra tan fuerte que Midoriya se golpea la frente y emite un quejido.

-¿Estás bien, Midoriya?

El peliverde se fija en los pies que aparecen al otro lado bajo la cortina. Se contrae y Bakugou lo nota abrazándole con más fuerza penetrándole muy, muy lentamente.

-Dile que se largue.- le susurra – ¿O quieres que sea testigo de cómo te empotro contra la pared?

Reviéntame, piensa. ¡No lo soporta más! Quiere correrse, le duele su erecto miembro y con Bakugou frenando cada dos por tres aumenta el deseo.

-To-todo bien, Todoroki.

-¿Seguro?

-¡Sí! – grita. Bakugou ha empezado a jugar con su polla frotándola arriba y abajo – Nos vemos en el comedor.

El bicolor tarda unos segundos en irse y hasta que no escuchan la puerta cerrarse no continúan. El agua de la ducha cae con más fuerza al darle Midoriya con el brazo. Bakugou le ha girado hacia él para tomarlo en brazos y tenerle frente a frente mientras le penetra. Le encanta ver la cara cachonda de su novio.

-N-o te detengas ahora.- se aferra a su espalda.

-Que no me detenga con qué, feo pecoso.

Le mordisquea las mejillas que tanto adora.

-¡De penetrarme! ¡Hazlo más profundo!

Le ayuda a empujar apretando las piernas contra su cintura. Bakugou está a punto. Midoriya igual. Y ambos se corren callando gemidos en el oído contrario.

-¿Te ha gustado?

-No ha estado mal.

-Je... Dime eso a la cara esta noche si te atreves.

-Esta noche seré yo quien te enseñe cómo hacerlo.

-¿En serio? – ronronea metiendo sus dedos de nuevo en el pecoso melocotón - ¿Y qué me vas a enseñar, Midoriya sensei?

Los dedos de los pies de Midoriya se encogen. Sabe que los dedos de Bakugou solo buscan extraer el semen para evitar problemas de estómago más tarde pero vuelve a estar duro.

-A la noche lo descubrirás, Katsuki.

Sus lenguas se buscan desesperadas.


****

-Chicos, prestad atención por favor.- la profesora de danza pide silencio – Hace un tiempo os dijimos que estábamos preparando un ejercicio especial para finales de año, bien, ha llegado el momento de haceros tal anuncio.

Los alumnos y alumnas se miran intrigados. Midoriya y Bakugou ni siquiera lo hacen. Cada uno está con su grupo de amigos pues para ellos esos dos solo son rivales que comparten habitación y nada más. Que llevan saliendo desde el último curso de instituto hasta ahora es un secreto.

-Quiero presentaros a Shota Aizawa.- los alumnos enmudece – Veo que sabéis quién es.

¡Es uno de los directores de danza de ballet más reconocidos del mundo! Exclaman.

Ahora sí que Midoriya y Bakugou cruzan miradas. ¡Es su bailarín de ballet favorito! Le admiran desde pequeños.

-He elegido esta Universidad porque me han garantizado que aquí estudian los mejores y ambiciosos alumnos de ballet, y ambición, pasión y valentía es lo que requiero para lo que estoy buscando. La pareja protagonista de la nueva versión del Lago de los Cisnes que representaremos por todo el mundo en una gira. Sin embargo – calma a las masas – La historia esta vez será representada por dos chicos pues la estrenaremos durante el mes del orgullo.

¡Ahora la emoción se mezcla con quejas! Sobre todo por parte del público femenino...

-¡¡SILENCIO!! – su voz retumba en el aula – Me he quedado con vuestras caras y todo aquel o aquella que se ha quejado no tendrá la más mínima posibilidad de obtener un papel en la obra, por tanto, si sois tan amables de abandonar – señala la puerta. Nadie se mueve – Ni si quiera sois valientes para admitir vuestro error. ¿Preferís que os nombre de uno a uno? Sí, he memorizado vuestros perfiles y no estoy tan seguro de si seréis los alumnos brillantes de los que tanto alardea el director de la academia. Y visto lo visto... - su oscura mirada se detiene en cada alumno - ¿Probamos de nuevo?

Ahora sí que hay movimiento entre las mesas. Casi todo el público femenino sale del aula aún con quejas. Quejas que Aizawa hace oídos sordos.

-Se han quedado quiénes más interés tenía de conocer.- ahora su sonrisa les pone la piel de gallina – Formaréis parejas de a dos y, por supuesto, ya las he elegido. Venid al frente en cuanto os nombre.

Poco a poco los alumnos se colocan enfrente de los asientos nerviosos.

-Izuku Midoriya.- el peliverde se pone de pie y baja las escaleras deteniéndose al escuchar el nombre de su compañero. Se gira boquiabierto y le devuelve la orgullosa sonrisa de Bakugou bajo una humareda de cuchicheos por parte del resto de alumnos – Poneos junto a vuestros compañeros, por favor.

Ambos obedecen.

-Más te vale no cagarla, nerd.

-Habla por ti, Kacchan.

Sus miradas callan la emoción contenida. Si todos supieran de su relación Bakugou hubiera tomado en brazos a Midoriya y le habría hecho girar embriagados por la felicidad de poder trabajar juntos y tener la oportunidad de representar una de sus obras favoritas.

-Cumpliremos nuestro sueño, Kacchan.

-Y lo haremos juntos, Deku.

Sus dedos meñiques se entrelazan en sus espaldas lejos de miradas curiosas.

☀El último baile☀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora