✨️CAPÍTULO 32

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CAPÍTULO 32.

Alex:

Llevo el vaso a mis labios y bebo un sorbo de whisky, mientras mantengo la mirada en el fuego de la estufa que calienta toda la habitación. El sonido de los rayos y la lluvia que azota contra la ventana, es lo único que se escucha en el silencio profundo del bosque que nos rodea.

Levanto la mirada hacia el reloj en la pared mientras bebo otro sorbo de mi vaso, antes de suspirar y dejarlo sobre la mesa frente a mí, como cada noche desde hace cinco días cuando llegamos aquí. Me levanto del sofá y camino hacia las escaleras de madera que crujen con el peso de mis pasos, cada que subo un escalón.

Sigo avanzando por el pasillo, donde aun cuelgan las fotografias familiares en la pared, y me detengo en la puerta de su habitación. Suelto el aire antes de tomar el pomo de la puerta y girarlo, empujando hacia adentro.

Observo con cautela a la mujer que permanece dormida en la cama y me animo a dar un paso dentro de la habitación, haciendo que el Lobo que duerme con la cabeza apoyada sobre la pierna sana de Aurora, levante la cabeza y me mire, mientras levanta su cola meneandola, en señal de saludo. -Nunca pensé sentir celos de un animal, pero reconozco que Cerbero es un maldito afortunado-. El si puede dormir al lado de la mujer que cada vez que me ve, me lanza algún objeto diferente a la cabeza.

Le hago un gesto llevando mi dedo índice a mis labios, señalando que haga silencio, como si pudiese entenderme y entrecierro los ojos, cuando el simplemente vuelve a acomodarse sobre las piernas de su dueña. «Suertudo...» Me volteo hacia ella que permanece con los ojos cerrados y por un momento la veo dormir.

Su pecho sube y baja con la respiración tranquila, una de sus manos está apoyada sobre su abdomen, mientras que la otra se mantiene sujeta por las esposas al respaldo de la cama, apoyada sobre la almohada. Su cabeza se inclina hacia un lado y un mechón de su negro y largo cabello cae y cubre parte de su cara. Vuelvo a observar su mano esposada y cierro los ojos un instante cuando la culpa por tenerla así me golpea.

Odio mantenerla aquí en contra de su voluntad y pese a que sé que es por su bien, o eso es lo que me repito todos los días desde que la traje aquí... La verdad es que no. No es solo eso, también se que si la dejo ir, ella desaparecerá para siempre, jamás la volveré a ver y eso es algo que no puedo permitir.

-Lo siento, princesa... -Susurro y aparto con mis dedos el cabello que cubre su rostro -pero no puedo permitir que nada te lastime. -Afirmó convenciendome de que es solo ese el motivo de tenerla aquí.

Me giro para tomar la bandeja sobre la mesa y suelto una gran exhalación cuando noto que otra vez esta tal y como la deje. Aurora no ha probado bocado en días y si sigue así enfermara y peor aún, tendré que volver a colocarle un maldito suero.

Dejo la botella con agua sobre la mesa y volteo con la bandeja entre las manos, pero me detengo cuando la mano de Aurora toma mi brazo.

-Alex... -Me llama y la miro con las cejas levantadas, porque es la primera vez en días desde que me dirige la palabra.

Ni siquiera, cuando entro a curar sus heridas me mira o me habla, simplemente evita el contacto visual, mirando hacia otro lado, hasta que termino y me marchó.

-Lamento si te desperté. -Me disculpo y casi quiero golpearme el rostro cuando la veo sonreír de lado, antes de humedecer sus labios.

-¿Podrías darme agua? -Pide.-No me siento muy bien.-Habla y enseguida me volteo y dejo lo que tengo en la mano sobre la mesa, para tomar la botella de agua de la mesita.

Se la extiendo y ella me mira con sus brillantes ojos grises por un momento y capto lo que quiere así que quito la tapa de la botella que llevo hacia sus labios. Bebe del pico de la botella, sin quitar sus ojos de mí y bajo la mirada a su garganta que se mueve hacia arriba y hacia abajo, con cada trago que bebe de la botella en mi mano.

Aurora heredera de la mafia. © Libro 2. ( TERMINADO / +21) "Almas Corrompidas"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora