Aurora heredera de la mafia. © Libro 2. ( TERMINADO / +21) "Almas Corrompidas"

✨️CAPÍTULO 51

CAPÍTULO 51.

Seis meses después:

Aurora:

Miro con ansiedad el objeto plástico en mi mano y vuelvo a comprobar los minutos en la caja para luego observar otra vez el reloj. La decepción me golpea cuando en rojo una sola línea marca el resultado negativo.

«Otra vez.»

Suelto el aire con frustración y rabia. Una lágrima traicionera recorre mi mejilla y la limpio de inmediato, con molestia mientras aferro mis manos al mármol del lavabo, enfocando la mirada en el reflejo del espejo. Llevo meses intentándolo y nada. Cada vez que una de las tantas pruebas que me realizo, termina arrojando resultado negativo, no hace más que remover la herida que aún no cierra en medio de mi pecho, por la pérdida de mi bebé.

Se que Alex vengo la memoria de nuestro hijo, arrancándole el corazón al hijo de puta de Miller y sé que lo que paso no fue mi culpa. Me ha tomado muchas sesiones de terapia y arduo trabajo, lograr comprender y aceptar que lo que me pasó escapaba de mi control y que no soy responsable. Y tras meses de terapia, siendo apoyada por mi mamá, he mejorado. Pero aun así... eso no disminuye el dolor de la pérdida. El vacío de saber que una parte de ti, te fue arrancada.

Suspiro y me apresuró a envolver en papel de baño la pequeña prueba de embarazo antes de arrojarla al fondo de la papelera.

—¿Princesa...?

Escucho la voz de Alex que me llama al otro lado de la puerta y rápidamente abro el grifo mojando la palma de mis manos para refrescar mis mejillas.

—¡Un momento cariño!—Respondo y vuelvo a observarme en el espejo, asegurándome de que no note que he estado llorando.

Cuando salgo del baño, él está de pie en la habitación junto a la cama, me observa con una de sus cejas alzadas con sus ojos fijos en mi antes de acercarse.

—Él diablo nos mandó llamar. —Dice y frunzo el ceño.

—¿Nos? —Pregunto y el asiente.

Alex ha estado trabajando para papá desde que dejó de ser un agente. Pero pese a eso, mi padre nunca ha mencionado nada sobre nuestra relación. Después de todo lo que ha pasado papá ha cambiado. Se ha mantenido al margen y su trato hacia mí se ha vuelto algo distante. Mamá dice que se culpa por lo que me pasó y por no haber podido protegerme y eso me rompe el corazón. Porque él no es responsable de lo que me ocurrió, soy plenamente consciente de que tengo al mejor padre del mundo y que siempre ha dado todo por mantenerme a salvo, jamás podría culparlo. He intentado abordar el tema del bebé y del secuestro, pero siempre termina por evadir el asunto y desaparecer con alguna excusa, hasta que simplemente deje de intentarlo.

Me encaminó hacia la puerta, pero la mano de Alex cuando me sujeta por la muñeca me detiene, trato de no voltear para verlo, pero el me toma por el mentón con una de sus manos y con su pulgar limpia el resto de una lágrima del rabillo de mi ojo.

—Se lo que has estado haciendo princesa... no tienes que ocultarlo. —Habla y paso saliva tratando de evitar su mirada, pero vuelve a tomar mi mentón.

—Princesa...

—Tengo miedo. —Respondo. —Tengo miedo, de no poder volver a quedar embarazada. —Confieso sosteniéndome del azul de sus ojos.

—Lo harás... aún hay tiempo. El doctor dijo que no habría inconveniente, pero podría tardar. No te presiones.
—Responde acariciando mi mejilla con sus nudillos y apoyo las palmas de mis manos en su pecho, dejando caer frente sobre él.