Belia Potter [Draco Malfoy]

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Despacho del director Dumbledore

- ¡No fue Harry, profesor Dumbledore! –dijo Hagrid deprisa –Yo hablaba con él segundos antes de que hallaran al muchacho, señor, él no tuvo tiempo...

Dumbledore trató de decir algo, pero Hagrid seguía hablando, agitando el gallo que tenía en manos con desesperación y esparciendo plumas por todas partes.

-... No puede haber sido él, lo juraré ante el ministerio de Magia si es necesario...

-Hagrid yo...

-Usted se confunde de chico, yo sé que Harry nunca...

- ¡Hagrid! –dijo Dumbledore con voz potente –yo, no creo que Harry atacara a esas personas

- ¿Usted no cree que fuera yo, profesor? –preguntó Harry esperanzado, mientras Dumbledore limpiaba la mesa de plumas que el gigante había dejado antes de irse

-No, Harry –dijo Dumbledore –Pero aun así quiero hablar contigo.

Harry aguardó con ansia mientras Dumbledore lo miraba, juntando las yemas de sus largos dedos.

-Quiero preguntarte, Harry, si hay algo que te gustaría contarme –dijo con amabilidad –Lo que sea.

Harry no supo que decir. Pensó en Malfoy gritando: << "¡Los próximos serán los sangres sucias">>, en la poción multijugos que hervía a fuego lento en los aseos de Myrtle la Llorona. Luego pensó en la voz que no salía en ningún momento de su cabeza, y recordó lo que Ron dijo: <<" Oír voces en dos ocasiones que nadie más no puede oír no es buena señal, ni siquiera en el mundo de los magos">> Pensó, también, en lo que todo el mundo comentaba sobre él, y en su creciente temor de estar emparentado con Salazar Slytherin...

<<Salazar Slytherin>> -pensó Harry

-En realidad señor –respondió Harry y Dumbledore lo miró con atención –la noche de duelo del club de duelo mi hermana habló con la serpiente

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La doble agresión contra Justin y Nick Casi Decapitado convirtió en autentico pánico lo que hasta aquel momento había sido inquietud. Curiosamente, resultó ser el destino de Nick Casi Decapitado lo que preocupaba más a la gente. Se preguntaban unos a otros qué era lo que podía hacer aquello a un fantasma; qué terrible poder podía afectar a alguien que ya estaba muerto. La gente se apresuró a reservar sitio en el expreso de Hogwarts para volver a casa en Navidad.

- ¿Sus padres también les dijeron que debían quedarse para Navidad? –preguntó Draco a sus amigos doblando la carta de sus padres

Todos y cada uno de ellos les dieron la afirmativa a Draco lo cual lo hizo bufar, quedarse en Hogwarts para las vacaciones no era como tenía planeaba pasar los días festivos.

-Mira el lado bueno –comentó Belladona terminando de leer la carta de su madrina y tío –por lo menos nos quedamos juntos. No será como el año pasado que me mantuve sola.

-Además –añadió Theodore –solo estaremos unos cuantos ya que todos corren asustados por los ataques.

Por esa parte Belladona estaba contenta, a ella no le molestaba ser temida por todos los chicos que se hacían a un lado cuando circulaba con sus amigos por los pasillos, como si les fuera a salir colmillos o a escupir veneno, esto les había proporcionado cierto respeto y temor por todo Hogwarts más aún en aquellos mestizos y sangres sucias, lo que hacía que los cinco chicos le agradara aquello; al contrario de su hermano que estaba harto de que a su paso los demás murmuraban, le señalaran y hablaran en voz baja.