Capítulo 44

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Capítulo 44

Empieza la recuperación

[Región de Galar, Isla de la Armadura]

Narra Adaman:

Ya transcurrieron unos veinte minutos, cuando todos nos desplazamos a la orilla vimos como dos barcos, uno grande y uno pequeño se habían instalado cerca de nosotros, varios celadores amortajaron los cuerpos de Mustard y Honey, que yacían muertos desde hace horas.

Todos los alumnos del dojo menos nuestro grupo de entrenadores entraron en el barco grande para así estar preparados para zarpar.

Si os preguntáis porque no pudimos fácilmente a la estación de Corviknight era porque, después del ataque de los generales los dueños tuvieron que retirarse por el normal miedo a morir. Dejándonos solos y abandonados en esta isla.

Celebi, Irida, yo y todos los demás nos dirigimos para hablar amablemente con el susodicho presidente de una compañía de la que no me acuerdo su nombre. Era un poco confuso, porque todavía no encontraba la explicación a cómo nos había encontrado y ir a rescatarnos.

Hablemos de él, tiene el pelo negro, rapado en el lado izquierdo, mientras que iba vestido de una manera muy coloquial, digna de una persona multimillonaria, pues era muy conocido en esa región.

Hablemos de él, tiene el pelo negro, rapado en el lado izquierdo, mientras que iba vestido de una manera muy coloquial, digna de una persona multimillonaria, pues era muy conocido en esa región

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Lo acompañaba una mujer un poco más alta que él, pero eso no venía a cuento, era el momento de presentarse como era debido.

— Es un gusto conocer al grupo de entrenadores que salvaron Galar de esos dobles de las tres aves legendarias, mi nombre es Rose — levantó la mano para que el jerarca se la estrechase.

— El gusto es mío, soy Adaman, antes de nada, quería preguntarle cómo ha podido encontrarnos — estrechándole la mano.

— Verás, las noticias corren más rápido que un Rapidash, primero vimos que el Zapdos que rondaba por el Área Silvestre desapareció por arte de mágica, y después que Articuno hizo lo mismo en las Nieves de la Corona — explicó.

El jerarca giró su mirada para ver a los dos grupos que habían capturado a esas aves legendarias en ambas ubicaciones, tanto Iono y Rika como Aoi y Arven le sonrieron al ver que este le estaba agradeciendo con la mirada.

— Y sabiendo que solo faltaba Moltres tuvimos que venir a esta isla pensando que todavía seguía libre esa peligrosa ave legendaria, hasta que nos llegó la noticia a medio viaje que ya había sido capturada — explicó Rose — Viendo como la isla había sido evacuada y como Mustard no respondía a nuestros mensajes nos apresuramos en venir para poder rescataros. Y lamentablemente nos encontramos con esta buena y mala situación: la última ave capturada, pero el dojo maestro destrozado, además de la muerte del dueño y de su esposa.

𝗣𝗼𝗸é𝗺𝗼𝗻: 𝐅𝐮𝐭𝐮𝐫𝐨 𝐈𝐧𝐜𝐢𝐞𝐫𝐭𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora