Capítulo 26 - La determinación de Laia

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Laia

Me despierto antes del amanecer, mucho antes de lo que suelo hacerlo. La habitación está envuelta en la oscuridad de la madrugada, y la figura de Benjamín duerme profundamente a mi lado. Observo su rostro en reposo, iluminado apenas por la luz de la luna que se filtra a través de las cortinas.

Es extraño cómo la belleza de alguien puede seguir siendo tan cautivadora incluso cuando lo has visto en sus momentos más oscuros. Durante tanto tiempo, me perdí en sus ojos verdes, me sumergí en su encanto, pero ahora las cosas han cambiado. He encontrado una fortaleza en mí que antes no conocía, una determinación feroz que me ha permitido enfrentarme a él con audacia y desafío.

Anoche, durante nuestra conversación después de la cena, no me dejé llevar por sus palabras ni su actitud condescendiente. Mientras él intentaba jugar con mis emociones, yo permanecí firme.

Observar a Benjamín dormir a mi lado ahora, sin tener que ocultar mis sentimientos ni doblegarme ante él, me hace sentir poderosa. Me doy cuenta de que puedo resistir su atracción y su dominio sobre mí. No estoy dispuesta a volver atrás, a ser la Laia sumisa que solía ser.

Con cuidado, me deslizo fuera de la cama para no despertarlo. Me dirijo al baño y me miro en el espejo. Aunque mi cabello está revuelto y mi rostro no está perfectamente arreglado, veo una chispa de determinación en mis ojos. Me lavo la cara y me preparo para el día que se avecina.

No puedo evitar sonreír al recordar la forma en que desafié a Benjamín anoche con Alejandro. Esa sensación de poder y control sobre mi propia vida es adictiva. Y aunque sé que el camino por delante no será fácil, estoy decidida a mantener mi fuerza y no volver a ser una marioneta en sus manos.

Regreso a la habitación y me tomo un momento para mirarlo una vez más. Puede que ya no me afecte de la misma manera, pero eso no significa que no aprecie su atractivo.

Mi determinación es más fuerte que nunca, y estoy lista para enfrentar lo que sea que venga a mi camino.

Mientras lo miro, una pregunta se cierne en mi mente: ¿cómo fue la relación entre Benjamín y Caroline? Sé que él estuvo dispuesto a casarse con ella en algún momento, y eso me hace cuestionar cómo es cuando realmente expresa su amor.

No puedo evitar comparar su comportamiento hacia mí con lo que pudo haber tenido con Caroline. ¿Era él igual de dominante y controlador con ella? ¿O tal vez mostraba un lado más amable y cariñoso? La curiosidad me consume mientras trato de imaginar cómo sería Benjamín en una relación romántica genuina.

A medida que me visto y arreglo mi cabello, me pregunto si alguna vez ha dicho esas dos palabras a Caroline: "Te amo". ¿Cómo se lo habrá expresado? ¿Con la misma intensidad y pasión con la que me ha perseguido y controlado durante nuestro falso matrimonio? ¿O fue diferente con ella?

Me doy cuenta de que apenas sé nada sobre su relación pasada, y eso solo aumenta mi curiosidad. Pero a pesar de todas mis preguntas, una cosa es segura: no quiero ser una marioneta en manos de Benjamín, ya sea en una relación de verdad o en un matrimonio de conveniencia.

Mi determinación de mantenerme fuerte y luchar por mi independencia sigue intacta. Sea cual sea el pasado de Benjamín, estoy decidida a escribir mi propio futuro, uno en el que yo sea la protagonista de mi propia vida y no una sombra en la vida de nadie más.

Cierro la puerta con cuidado y me encamino hacia un nuevo día, un día en el que seguiré luchando por mi independencia y por mi negocio que es lo único que me importa.

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Me encuentro de pie frente a la puerta de la imponente oficina de Daniell, sintiendo cómo mi nerviosismo se intensifica con cada segundo que pasa.

ÁMAME  (Lazos de Placer #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora