Laia
Son las 10:00 p. m. y aun sigo esperando que Benjamín regrese.
Desde que se fue en la mañana no he podido pensar ni actuar con normalidad por lo sucedido, no sé qué sucede conmigo cuando lo tengo cerca, su aroma varonil con tonos de madera aún permanece en mis fosas nasales y ya está guardado en mi memoria para cuando no lo tenga cerca.
No sé porque ansío tanto su presencia y sus ojos verdes mirándome con ese toque malicioso. Todo él es tan perfectamente perverso que envés de querer huir quieres quedarte, porque se oculta muy bien detrás de esa sonrisa que, aunque parece encantadora no lo es, y eso lo descubrí la noche que lo conocí, porque luego de llegar al hotel esa sonrisa mostró su verdadera cara, la forma en la que me miraba y sonreía mientras me follaba sin piedad estando atada a la cama era como si lo llenara de vida, escucharme quejar no solo de placer sino también de dolor le encantó y pude verlo en sus ojos.
-¿Estás pensando en mí? - su voz me saca de mis pensamientos al tiempo que me sobresalto en el sofá.
Miro en dirección de la entrada de la sala de estar y lo encuentro con una media sonrisa en los labios y una pequeña bolsa en una de sus manos.
-Solo me preguntaba si realmente vendrías - hablo intentando que el corazón no se me acelere más por la emoción de que si viniera.
-Dije que lo haría y aquí estoy - responde con una sonrisa - ¿vienes? - hace un pequeño gesto con la cabeza apuntando a la salida.
-Si - respondo y me levanto del sofá de un salto para seguirlo.
-¿Recibiste mi Mail? - pregunta tomando las escaleras para el segundo piso.
Una persona normal habría mandado un mensaje, pero Benjamín no, casi a medio día me envió un correo electrónico con las reglas que debo seguir si quiero que haya sexo en nuestro falso matrimonio.
De: Benjamín Astor
Para: Laia Walker
Asunto: Reglas que debes seguir.
Te recuerdo una vez más que si rompes algunas de estas reglas voy a someterte como castigo inicial.
Y desde ahora serás mía por un año, eso quiere decir que no estarás con nadie más durante este periodo.
1. No tienes permitido revelar nada de lo que suceda entre nosotros, especialmente en el sexo.
2. No tienes permitido hacerme ningún tipo de drama o reclamo en ninguna circunstancia.
3. No tienes permitido aparecerte en mi departamento ni en mi oficina sin invitación.
4. No tienes permitido enamorarte de mí o expresar algún tipo de sentimiento.
5. No tienes permitido tener algún tipo de relación con mi familia fuera de lo acordado, especialmente con mi madre.
6. No tienes permitido quedar embarazada. No quiero hijos, así que planifica.
Espero te quede claro.
-Si, lo recibí - respondo subiendo las escaleras detrás de él.
-¿Y está todo claro? - habla sin voltear a verme.
-Tengo algunas preguntas.
Lo escucho soltar aire, pero no estoy segura si es con fastidio o porque sabía que haría preguntas.
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ÁMAME (Lazos de Placer #2)
Romance¿Qué sucede cuando un hombre que nunca ha querido casarse se ve obligado a contraer matrimonio con una mujer que apenas conoce? Benjamín Astor se ve empujado a casarse con su cita de una semana para complacer a su madre, después de que su hermana m...