la pick me

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Hoy tenia ganas de salir.

¿Raro no? Esa no soy yo. Pero bueno, creo que por primera vez, puedo hacer el intento.

Entre a la pieza y vi al colorado acostado en la cama con el celular, de veía tan tranquilo y sin molestar a nadie.

Hora de joder.

—Valu— lo llame y me acoste en la cama a su lado.

El chico no saco la mirada de su celular, lo que si hizo fue estirar su brazo, esperando a que me acerque a él.

Yo lo hice, después de todo, no es que me moleste que Valen me de atención.

—¿Que pasa amor?— pregunto mirando un video de tik tok de Davo.

Yo me quedé enganchada escuchando al Xeneize hablar sobre el partido contra talleres el otro día.

—Amor.

Saque la vista del teléfono —¿hoy salimos?

—mm ¿queres salir?— me pregunto de vuelta, yo asenti —bueno.

Dijo y se quedo callado, no me pregunto nada más, así que yo también me quedé en silencio mirando su celu.

Cuando parece que sacio sus ganas de no hacer nada, se levantó y fue al baño. Yo por mi parte me senté en la cama y me estire.

—¿A donde vamos?— me grito desde el baño.

Hice una mueca, no lo había pensado.

—¿Eh?— volvió a interrogar una vez salio del baño, se sento en la punta y me llamó con su mano.

—No lo había pensado la verdad— dije aun pensando —¿donde podríamos ir?

El se encogió de hombros —depende de que clase de salida quieras, podemos ir a cenar afuera, eh, ir a una plaza, si queres puedo poner la pava y llevamos el mate para tomar en la plaza.

—Son casi las diez de la noche Valentin ¿te parece un mate a esta hora?

El me miro con el ceño fruncido —¿a vos no? No hay horario para el mate, pedazo de rara.

Me reí y terminé asintiendo ante su última propuesta.

—¿Hacemos eso?— volví a asentir —bueno, ya vengo.

Salió de la pieza y yo agarre su celular y entre a la aplicación de cámara, empeze a sacarme fotos.

Ya era costumbre, yo no era de sacarme fotos, menos con celulares ajenos, pero con el Valen si, no se porque, aunque el ya me descubrió y dijo que no le molestaba eso, así que lo podía seguía haciendo.

Deje el celu arriba de la cama y me fui a ver al espejo, no tenia ganas de cambiarme, así que supongo que iría así.

Me estaba haciendo la linda al frente del espejo y al frente de gasparin el fantasma, cuando escucho el celu de mi novio, lo estaban llamando.

Lo agarre y abrí la puerta del cuarto, baje las escaleras, Valen seguro estaba en la cocina.

—Val, te llaman— le avise llegando.

—¿Quien?— pregunto guardando las cosas en el bolso del mate, sin mirarme.

—Es número privado— dije viendo la pantalla.

—No se, atente, fíjate— me pidió.

—¿Hola?

—¿Brisa? ¡hola! ¿Y mi colito hermoso?se escucho su voz de la otra línea, rode los ojos y le reí.

Colorado | Valentín BarcoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora