♥️ Capítulo 21: Despertar a la vida ♥️

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Después de haber estado durante tanto tiempo en cama por la operación, volver a levantarse ,volver a estar de pie representa para María,un nuevo despertar.
Despertar a la vida, es despertar a todo lo lindo que ella ofrece, es continuar avanzando para cumplir los objetivos fijados, es reanudar las actividades,es volver a sentirse  viva, es volver a respirar el aire puro,es aprender a bailar con ella sus diferentes ritmos,es volver a sentirse libre .
Y María despertó con las energías multiplicadas, con el entusiasmo de una niña cuando visita por primera vez un parque de diversiones, con el intenso deseo de no detenerse en ningún punto del camino, de seguir avanzando y darle rienda suelta a sus sueños. Y sobre todo con el propósito de divorciarse de la tristeza, de los pensamientos negativos e inútiles que incrementan la angustia y la intranquilidad y establecer un matrimonio perpetuo con la alegría, y las ganas de vivir.
Y para sellar esta alianza con la vida su cuerpo se entrega con pasión al baile flamenco.
María está tan concentrada en su danza y en la música, que no se da cuenta que Juan se halla apoyado sobre una pared  observándola y dejándose cautivar por cada uno de sus movimientos.
Después de unos minutos Juan aplaude a su esposa,se acerca y baila con ella hasta que finaliza la música. Luego  la toma de la cintura, la acerca a él, y se unen en un apasionado beso.
- María, ¿no te parece qué es una hermosa tarde?
- Sí, ¿por qué?
- Porque podríamos salir para comprar un dulce perrito.
- Me parece una buena idea. Desde que lo hablamos tengo ganas de tener uno.
También podemos adoptar uno , hay muchos perritos que han sido abandonados y que están buscando una familia.
Conozco un refugio que se encarga de rescatar perros callejeros .
¿Vamos ahí? Salvemos una vida.
- Tienes razón, mejor adoptemos.
¿Dónde es el refugio?
-En el barrio Los Remedios.
- Y si no tenemos más remedio, vamos para allá.
- Siempre tan gracioso.
Juan toma las llaves del coche y abrazados van hacia él mientras hablan de como será el futuro integrante de la familia.
- Dijimos que va a ser un machito,¿ y de qué tamaño?
- Si conseguimos , uno pequeño, mejor.¿Qué nombre le pondremos?
-¿Cuál te gustaría?
-Teo.
-Entonces se llamará Teo.Cuando lleguemos a Los Remedios indícame el camino.
-Sí , corazón.Queda a 200 metros de un  convento ,¿lo ubicas?
-Sí, tesoro. Y ya sé cual es el refugio, se trata de una construcción con paredes de piedras , puerta blanca de madera y dos ventanas de mediano tamaño en el frente .
- Se ve que lo conoces.
- Sí he pasado por ahí,en un par de ocasiones .
-¿Y para qué me pediste qué te indique el camino?
-Porque no sabía que se trataba de ese hasta después de unos minutos.
Después de un tiempo de estar conduciendo llegan a su destino.
-Mira, ahí está. Me encanta el frente, vamos a ver que nos espera dentro. Dios permita que encontremos lo que buscamos.
- Sí María que Dios nos acompañe en la elección.
Bajan del auto y se dirigen al refugio tomados de la mano.
Juan golpea la puerta .
Una mujer de estatura baja , cabello lacio, muy corto, de color negro,abundante en carne, les abre la puerta.
- Buenas tardes .¿Qué desean?
-Buenas tardes, queremos adoptar un perrito .
Dice Juan con una sonrisa a flor de labios.
-Adelante,pasen ustedes.
La mujer los conduce a un recinto donde hay numerosos perros,cada uno en un canil.
Los hay de todos los tamaños y colores. Y la elección resulta difícil. A medida que ellos avanzan por el lugar ,los perros ladran  y saltan para llamar la atención y recibír muestras de cariño. Todos quieren ser adoptados.
-No sé con cual quedarme Juan.Todos son preciosos.
-Opino lo mismo .
En un canil, hay una pareja de perros de pelo rizado de color negro,  y de tamaño pequeño. María los mira con inmensa ternura,quiere acariciarlos , pero el alambrado se lo impide,los perritos saltan moviendo la cola, María y Juan se miran sonrientes.
-¿Por qué hay dos en este canil?
- Porque son hermanitos señora,responde la encargada del lugar.
Nacieron en la calle ,su madre murió.
María mira a Juan de una forma,que le permite adivinar la pregunta de su mujer.
-María, creo saber que quieres decirme con esa mirada. Y la respuesta es sí.
-¿Los dos?
- Sí los dos. Pobrecitos ¿por qué vamos a separarlos? Ya bastante tienen con haber perdido a su mamá.
La puerta del canil se abre y salen los dos perritos, saltando y buscando mimos. Juan toma uno en brazo y María toma el otro y junto a la encargada se dirigen a la oficina para realizar todos los trámites.
-Buena elección. Están aquí desde poco después de su nacimiento,los encontré yo cuando iba caminando a la iglesia.
-Son muy cariñosos.¿Verdad Juan?
-Sí.¿Qué tiempo tienen?
-Aproximadamente tres meses
-Uno va a ser Teo .¿Y el otro?
-Elije tú el otro nombre ,yo ya elegí uno.
-¿Qué te parece Alan?
-Me gusta.
- Teo y Alan. Vamos a ponerle un collar a cada uno para distinguirlos.
Una vez que firmaron los papeles de adopción y se comprometieron a cuidarlos, se retiraron del refugio.
Como Juan tiene que manejar , María carga en brazos los dos cachorros.
Teo y Alan le lamen  la cara,mientras ella mira  lo que sucede en la calle.
De repente frunce el ceño y tiene una expresión seria que captó la atención de Juan.
-¿Qué pasa María?¿Por qué tienes esa cara?
-No lo puedo creer Juan, el mundo es un pañuelo.
-¿De qué hablas?¿Qué sucede?
-¿Puedes detener el coche?
-Sí,mi amor.¿Me vas a decir qué está pasando?
-Haz lo que te pedí Juan.Vaya, vaya, hoy es un día de emociones. Primero estas dos ternuritas que adoptamos, y ahora esto.
-¿Qué cosa María?
-Nunca te hablé de ella,estoy tan disgustada con ella y sus padres,que preferí hacer de cuenta que no existían,y los sepulté en el olvido. Después de ese  día nunca les volví a hablar.
-No entiendo.¿Quién es ella ?
-¿Ves a aquella mujer?
Juan mira hacia la dirección que le señala María.
-La  que está sentada en la puerta del convento con esos bolsos.
-Sí ,esa misma.
-¿Qué pasa con ella?
-Es mi prima Begoña.
-¿Quién? Nunca me hablaste de ella.
-Te dije que la sepulté en el olvido.
¿Qué hará ahí?¿Qué son esos bolsos?
- Y si nos acercamos y lo averiguamos.
-Oh no Juan,no la soporto.
-Pero María es tu familia.No seas rencorosa.
- Juan yo no soy tan bondadosa como tú. Y después de lo que hicieron, me interesa muy poco lo que pueda pasarle.
-No seas mala María, bajemos, vamos a ver que le pasa. Después me cuentas porque estás tan enojada con ella.
-¡Ay Juan! Bueno, vamos.
Descienden del coche y dirigen sus pasos hacia el convento.
- Begoña.
-María.¿Qué haces acá?
-¿Qué hago yo acá? Begoña yo siempre viví en Sevilla.Tú ,¿qué haces acá si siempre vivieron en Madrid?
-Ya no vivo más en Madrid, ahora vivo acá.
-¿Y esos bolsos?
-No quiero hablar.
-¿Hace mucho qué llegaste?
- Un día.
-Begoña, te presento a mi esposo. El es Juan.
-Mucho gusto.
- El  gusto es mío, bella mujer.
-¿Por qué no quieres hablar Begoña?
-Porque no tengo ganas María.
-Pero,¿ es grave?
- No creo que te importe.
-Begoña, María, ustedes son primas,no discutan.
Begoña, pasamos por acá y cuando María te vio me hizo detener el coche.
¿Por qué estás acá?¿Tienes algún problema?
-No te ves bien Begoña.
Begoña levanta la vista mira a María, después a Juan y finalmente mira hacia un costado.
-La vida puede ser muy dura María. Y a mí me ha dado un tremendo golpe.
-¿De qué hablas?
Begoña no responde y mira la vereda .
-María , vamos a casa, aunque sea domingo siempre hay cosas que hacer tenemos que atender a Alan y a Teo.
Begoña,¿quieres venir con nosotros?
- No, gracias.
-¿Te vas a quedar acá? En la puerta de este convento.
¿Por qué no vas al hotel dónde estás hospedada?¿Quieres qué te llevemos?
-¡María ya déjame en paz! No estoy en ningún hotel,estoy en la calle.
- ¡En la calle!¿Cómo en la calle?
María y Juan intercambian miradas.
-Vine al convento con el fin de pedir asilo pero no sale nadie.
-Las monjas habrán salido.
¿Y los tíos?¿Qué es de sus vidas?
-Murieron.
- Juan tiene razón Begoña, mejor ven con nosotros,no puedes quedarte acá.
-No gracias,no quiero ser un estorbo.
- A mis padres les hubiese gustado que estés con nosotros.
Begoña por primera vez presta atención a los perritos que María tiene en brazos.
- ¿Y esos perritos?
-¿Te gustan? Los acabamos de adoptar.
-Son preciosos.
- Bueno María vamos a casa. Y tú Begoña ven con nosotros.
Hay lugar para todos.
Begoña se dejó convencer y aceptó ir con
ellos.
Durante el viaje nadie dijo nada.
María no soporta a  su prima, pero Juan tiene razón es su familia y no podía dejarla ahí.
Cuando llegan a San Vicente, María ve que su mejor amiga está barriendo la vereda.
- ¡Hermesinda!¿Qué haces barriendo? Hoy es domingo,hoy no se trabaja.
- Veo que ya consiguieron compañia. Ven acércate, quiero acariciarlos.
¡Qué hermosos bebés! Creí que iban a traer solo uno.
-Sí, eso era lo que habíamos hablado, pero al llegar al refugio vimos estos hermanitos y no quisimos separarlos.
Hermesinda deja la escoba para acariciarlos y besarlos.Toma uno en brazos y lo lleva sobre su pecho y el cachorro le da besos en la cara.
- Me enamoré, quiero uno.Pobre Manolo, hasta que no tengamos uno no voy a dejar de hablar del tema.
Que cosita más hermosa.
¿Hay alguno más qué sea cómo este?
- No , pero hay otros.
-Que tesorito. ¿Quién es la mujer qué vino con ustedes?
-Mi prima Begoña, es la hija del hermano de mi papá.
-¡Begoña! No la reconocí, hace tantos años que no la veo.
¿Y se va a quedar con ustedes?
-Por un tiempo, porque no tiene donde ir.
La encontramos en la puerta de un convento.
La verdad, no la soporto,pero tú sabes como es Juan con el tema de la familia...
me dijo que no sea rencorosa,y como no quiero pelear con él ...
-La trajiste a tu casa.
-Espero que se vaya pronto.Hay que buscarle algún lugar. Yo no sé como pudo quedar en la calle , tenía una excelente posición económica.
-¿Esta es la qué vivía en Madrid?
-Así es.
-Ella y sus padres fueron los grandes ausentes en el velorio de tus progenitores.
-Sí .¡Qué buena memoria tienes!
- Sí, Dios me la conserve.
Hermesinda se muerde los labios y acomoda el cabello de María que los perros habían desarreglado.
Paciencia María le voy a preguntar a Manolo si no conoce a alguien así te la sacas de encima.
- ¡Sí!¡Por favor!
Hermesinda le devuelve al cachorro y luego la abraza,en tanto los pequeños peludos reparten lametones entre una y otra.
-Después voy con Manolo, te quiero.
- Yo también te quiero,hermanita.Nos vemos más tarde.
Juan ya  te trajo las cajas con el perfume de jazmín,el jabón de coco y la crema.Como es tan generoso trajo cuatro,dos para ti y dos para tu suegra.
-Después me las das.
Entre tanto, Juan y Begoña ya habían ingresado a la casa.
-¡Juan!
- Mi reina .
-Dentro de unas horas vienen nuestros amigos.
Preparemos algo para comer.
¿Dónde está ella?
-Se está bañando.
Juan toma a uno de los cachorros y los besa en forma reiterada.
Vamos a llevarlos al patio para que hagan sus necesidades y corran un poco.
Teo y Alan corren por el patio y juegan entre ellos, uno se echó arriba del otro, le da pequeños mordiscos, expresión de cariño, luego el otro logra tumbarlo y se sube arriba de su hermano, le pone una de sus patitas en la cabeza,lo besa, el que está abajo, ladra y logra que su hermanito se aleje y corra hacia una planta. La huele, y muerde las hojas.
Juan va hacia el cachorro, pero llega cuando este ya había arrancado unas hojas a la planta.
- ¡No! ¡Eso no se hace!
Mientras tanto María corre hacia el otro, que tiene la intención de sacar la sábana que está en el tendedero.
Manolo se asoma por la medianera.
- Los nuevos integrantes de la familia. Hermesinda está como loca , quiere traer uno .¿Qué nombre le pusieron?
-Teo y Alan.
-Lindos nombres.
- Recién llegaron y ya están haciendo travesuras.
-Porque son cachorritos,hay que educarlos Juan.
María logra separar a Teo de la sábana y con él en brazos se acerca hasta la medianera.
- Este pequeñín es terrible,un poco más y tenemos una sábana menos.
- ¿Y  este cómo se llama ?
-Teo.
-¡ Hola Teo! Bienvenido.
- Manolo ,¿van a venir o no?
- Sí, ahora vamos Juancito. Me voy a bañar antes porque estuve cortando el césped y trabajando con la tierra.
Hermesinda sale del interior de la casa.
- Como te hace trabaja aquella.
- ¿Qué dices Juanete?
- Tú también con Juanete.En la farmacia tengo que aguantar a Conchita y aquí te tengo que aguantar a ti. Digo, que lo haces trabajar mucho.
-Nunca escuchaste la frase el trabajo es salud, bueno es para que se mantenga más saludable.
No te tomes mal lo de Juanete sabes que te adoro y gracias por traerme las cajas con el perfume.
- Por nada,yo también te quiero mucho.
Hermesinda ve a Begoña detrás de la puerta observándolos y en voz baja se lo comunica a María.
Manolo mira y confirma las palabras de su esposa.
-¿Por qué no entramos Juan? Y preparamos
algo de comer.
- Sí vamos.
- Por la comida no se preocupen, la llevamos nosotros. El viernes tuvimos el cumpleaños del director del hospital, y como sobró tanta comida  me dio para que traiga a casa , todavía tenemos.
-Perfecto, entonces vamos sacando las bebidas.Los esperamos.
-En unos minutos estamos ahí Juancito.
Abrazados,  sonrientes, con la cabeza de María apoyada sobre el brazo de Juan, y los cachorritos corriendo a su alrededor, ingresan a la casa.
-Begoña ,¿hace mucho qué estás acá?
-No María.
-Ahora va a venir un matrimonio amigo.Viven en la casa de al lado.
A ella ya la conoces.
-Está bien María , voy a la habitación a terminar de guardar mis cosas, si me necesitas estoy ahí.
María observa a Begoña hasta que la pierde de vista.
- Mi amor hay algo en tu prima que no me gusta, pero no puedo darme cuenta que es.
- No te preocupes,a mí nunca me cayó bien, y menos después de lo que pasó hace muchos años atrás.
Vamos poniendo la bebida en la mesa , saca de la heladera una botella de vino, otra de agua,y la jarra de jugo de naranja, recuerda que Hermesinda y yo no consumimos bebidas alcohólicas, yo voy poniendo las servilletas, platos y cubiertos.Juan no te olvides de colocar los vasos.
-No se me olvida tesoro.
Timbre ,ya llegaron.
-Juan , atiendo yo.
María va hacia la puerta de entrada secundada por Teo y Alan.
- Hola amores, bienvenidos.
Los dos cachorritos, saltan moviendo la cola para recibir a los invitados.
Manolo toma uno en brazos,el pequeño se muestra muy extrovertido y no   mezquina  besos.
- Son los dos iguales.¿Cómo los diferencias?
- Teo es el que tiene el collar rojo.
Alan todavía no tiene porque pensábamos traer uno solo. Mañana voy a comprarle  un collar de otro color.
- No sabía que los domingos tenían abierto.
-¿Sabes qué pasa Manolo?Que el fin de semana la gente sale más y es cuando más adopciones se producen.
-Claro, tienes razón.
María y Hermesinda  llevan la comida a la mesa. Aparece la prima de María.
- Begoña,ella es Hermesinda ,no sé si la recuerdas  .Somos amigas desde muy pequeñas, la has visto en más de una oportunidad en mi casa.
-Sí la recuerdo,me alegra verte bien.
-Gracias Begoña. Él es mi esposo Manolo.
-Hola, encantado de conocerte.
-Gracias igualmente.
-Ven Bego, siéntate ,donde más te guste.
-Está bien María , gracias.
- Lleva a tu plato todo lo que quieras,Bego, no seas tímida.
-Gracias.
-Hermesinda, toma esto es tuyo.
-Gracias.Me encanta el diseño y el color con que están confeccionadas  las cajas y el contenido más.
Ahora cuando Manolo me acaricie va a notar la piel más suave.
-¿Qué es eso amor?
-Manolo,¿no recuerdas qué te conté qué le había encargado a Juan unos productos de perfumería?
- ¿Son esos?
-Sí mi amor.
-Juan, ¿cuánto te debo por estos productos?
-Manolo tú no debes nada.
La que me debe es Hermesinda.
Hermesinda abre los ojos y la boca sorprendida por las palabras de Juan, luego junta los labios ,los aprieta y lo mira enojada.
-¿Por qué me miras así Hermesinda?
-¿Tú por qué crees Juan?
-Supongo que por la broma que te hice .
Juan se acerca a ella,se pone detrás y rodea su cuello con sus brazos, luego le da un beso en la mejilla.
-No debes nada , disfrútalo.
-Oye Juan,yo sé que no tienes dobles intenciones pero suelta a mi mujer.
-Manolo si hay alguien de quien no tienes que estar celoso es de mí.
Estoy muy enamorado de mi mujer.
-Sí de eso no me queda duda.
-La suelto ,es toda tuya .
Y vamos a comer, tengo hambre.
Juan ocupa su lugar al lado de María y se sirve abundante comida.
En tanto Manolo mira con ansias de saber a Bego.
- Begoña ,cuéntanos algo para que Juan y yo te conozcamos.
-¿Qué quieres saber Manolo?
- ¿De dónde eres ? Por ejemplo.
- De Madrid.
-¿ Y qué te gusta más Madrid o Sevilla?
-Las dos son bonitas.
- Bego ,me dijiste que los tíos murieron.¿De qué ?
- De cólera. Yo también tuve la enfermedad , estuve internada mucho tiempo, pero a diferencia de mis padres me curé.
- Tuviste mucha suerte ,no solo tus padres murieron por esa causa.
-Sí,lo sé.
-¿Cómo puede ser qué hayas quedado en la calle? Si ustedes tenían un nivel económico muy bueno.
- Porque la empresa donde trabajaba mi papá quebró debido a la crisis económica y el perdió el empleo  y por mala suerte tampoco pudo encontrar otro.
Tuvimos que adaptarnos a una nueva vida,a la que no estábamos acostumbrados.
Pasamos mucho hambre,mucha miseria.
Tuvimos que vender la casa, y con lo que sacamos alquilar una casa de bajo nivel que no era ni la cuarta parte de lo que era la casa que vendimos. Era una casa con grietas en las paredes,poca higiene,sin pintura. Nunca pensé que podíamos caer tan bajo.
Cuando el dinero se terminó,mucho después del fallecimiento de mis padres, no pude continuar pagando el alquiler,le supliqué a la dueña que me de un tiempo, hasta que consiga trabajo, y después le pagaba todo. Pero no aceptó y me echó a la calle.
Estuve viviendo en las calles de Madrid , hasta que un día, mientras pedía ayuda a la gente conocí a un carpintero que hacía  muebles y que venía  a Sevilla para venderlos.
Le entregué todo el dinero que me había dado la gente ,a cambio de que me traiga. El aceptó y aquí estoy.
No tenía ganas de quedarme en Madrid, ahí me conocía mucha gente, y no quería que me vean en esas condiciones. Me pareció que lo más acertado era irme.
-Toda la crisis económica que hay es consecuencia de la guerra. España tuvo un gran gasto en armamentos, barcos de guerra y la alimentación de los soldados entre otras cosas.Después perdimos las colonias,lo que implica que España ya no tenga el aporte monetario por parte de ellas.También el gasto que representan los repatriados, puesto que la gran mayoría ha llegado enfermo. Y bueno todo eso ha provocado esta crisis socioeconómica que se está viviendo,pero vamos a salir.
Tengamos fe .
Pero dicen que hay que ver el lado positivo,y para mí lo positivo es que a nosotros esta crisis no nos ha afectado y por otro lado, que ha despertado el espíritu solidario, hemos sido muchos los que estando en una buena posición económica hemos brindado nuestra ayuda. Eso es bueno,que en estas circunstancias el pueblo se mantenga unido.
-  Así es Manolo, aunque en alimentos no han invertido mucho,no les daban suficiente comida,y eso no se puede discutir,basta con ver el estado de desnutrición en el que han llegado,es lamentable .Y  ahora nos toca ser solidarios con nuestra familia. Begoña puedes quedarte acá el tiempo que quieras .
-Gracias Juan.
-Mejor dejemos este tema .Dinos Begoña .
¿Tienes pareja?
- No  María.Cuando el hombre con el que salía se enteró que perdimos todo,me dejó. El solo estaba conmigo por interés.
Se produce un momento de silencio, nadie sabe que decir. Es difícil dejar sin palabras a Manolo y  a Juan, pero Begoña lo logró.
Hasta que María grita: ¡Alan!
El pequeño juguetón escondido debajo de la mesa  le muerde los zapatos y ella coge
un canapé de jamón y se lo da ,luego el pequeñín se aleja con él hacia un rincón de la cocina.
-Está muy buena la comida, lo que más me gustó fueron los bocaditos de camarones.
- Sí Juan, son riquísimos, lástima que no sé la receta,sino lo podría hacer cada vez que quieras.
Bego, ¿te gusta la habitación qué te dimos? porque no nos dijiste nada.
- Sí María me encantó, está decorada con mucho gusto, tiene detalles muy finos. Gracias.
Estuvieron reunidos hasta las 24 horas. Begoña se retiró a su habitación, dos horas antes.
Sentada sobre su cama observa un cuadro de la Virgen de los Reyes que está en la pared de frente a ella. Luego se pone de pie se acerca a él,y lo besa a modo de agradecimiento.
Las lágrimas se desplazan por su rostro,se deja caer y sus rodillas toman contacto con el piso.
Quizás algún día le diga la verdad a su prima.
Horas más tarde en su habitación, María acostada boca arriba al lado de Juan,no puede dormir.
Nunca pensó que sus tíos,con tanto poder económico , pudieran morir en la pobreza más grande, y que su soberbia y presumida prima iba a terminar en la calle viviendo de la caridad.
Recordó cuando le contó a Hermesinda lo enojada que estaba con su tío y familia por no ir al velorio de sus padres,por ser tan desagradecidos, por darle más importancia a lo material que a lo familiar .
Y recordó también las sabias palabras de su amiga que profetizaban el futuro de la familia  de su tío paterno:
"No te preocupes María, la vida da muchas
vueltas,ya se las va a cobrar ".
Y no se equivocó.
La misma vida que castigó a Begoña ,
bendijo a María con un nuevo despertar.

De Andalucía al mundo #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora