XIV

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Suguru continuaba sentado en el frío banco de la calle esperando a Satoru quien para unas pocas cosas ya estaba tardando un poco.

Se sentía un poco preocupado de que estuviera confundido con tantas cosas,su cerebro es rápido pero el es un tonto.

Iba a comenzar a caminar hacia la farmacia cuando vio aquella cabellera blanca asomándose entre la gente. Observó que caminaba bastante rápido con la pequeña bolsa en la mano.

Rápidamente se acercó a él y tenía una expresión de extrema sorpresa.

-¡Suguru! No vas a creer lo que acabo de ver- Satoru tomo sus hombros y lo miro fijamente a los ojos.

-¿Que sucede? Me estás asustando un poco- Suguru aún no entendía de que se trataba.

-Estaba comprando las cosas que nos encargó Shoko cuando de repente escuchó que la persona de al lado tiene una voz muuuy similar a ¡Nanami!, entonces la curiosidad me hizo voltear y con mucha sorpresa,¡El compro condones,Suguru! ¡Condones!- El pequeño Kento Nanami se ha transformado en un hombre...-

Lucia completamente dolido que su "amigo" no le contará este detalle de su vida íntima.

-Pues... Es un adulto,puede hacerlo... Cómo nosotros- Suguru ya sabía por qué Nanami estaba haciendo ese tipo de compras pero Shoko le había prohibido decirle una palabra a Satoru con la amenaza de quitarle la vida y ahora no solo era su vida,ahora era de ambos.

-Tienes razón pero me da un poco de curiosidad,¿Quien será?-

-No seas entrometido,hasta que él no decida contarlo no hay por qué cuestionarlo- Suguru quitó las manos de sus hombros y le sonrió al albino.

Satoru hizo una mueca con su descontento por otra vez meter su nariz en lo que no lo llamaban.

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Habían llegado finalmente a su hogar fue un día con diversas emociones de por medio pero al final de cuentas con más positividad que antes.

- Suguru,la habitación de enmedio podría ser el cuarto de juegos del bebé- Comenzó a guiarlo por todos las recámaras de la mansión ocupando cada espacio con cosas para el pequeño feto  que se gestaba aún en el vientre del azabache.

-Satoru... ¿No es muy pronto para decidir estás cosas?- Estaba  un poco cansado ,quería ir a descansar pero la hiperactividad de ese hombre se había desatado.

-Nunca es tarde,es mejor prevenir que lamentar, quizás si le ponemos unas luces amarillas no le moleste tanto al bebé cuando juegue-

No podía negarlo,también era bastante adorable ver la emoción con la que hablaba de los cambios o muebles que comprarían para la decoración de su primogénito.

-Estoy seguro que si pero ahora es momento de irnos a descansar,mañana tienes que trabajar a las 8:00 AM- Le dió un beso en la mejilla y lo encaminó a la habitación matrimonial.

Se acurrucaron al lado del otro abrazados para que las pesadillas del azabache no se manifestarán y la pesadez de la carga emocional los hizo caer en un sueño armónico.

Antes de yacer en los brazos de la completa oscuridad de la noche,los ojos color zafiro se clavaron en el rostro que más amaba y que lo había hecho tan feliz durante mucho tiempo.

-Te amo Suguru- Depósito un beso en la frente y sus cabezas se toparon en un lindo momento.

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Los días no eran fáciles, a veces los ascos no se iban ni aún tomando las pastillas y tenía que ir a vomitar con la ayuda de Satoru quien siempre estaba para consolarlo y sujetar su cabello cuando se acercaba al inodoro.

Pecado [SatoSugu] MpregDonde viven las historias. Descúbrelo ahora