Capítulo XIV . III

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Él último cielo.

Parte 2.

. . .

—¡Kaede! —exclamó Kaito al verla, enseguida se acercó y la apartó del lado de Amami, mirándolo con recelo.

—Estoy bien, Amami-kun nos rescató —confesó Kaede, sorprendiéndolo, pero sin dejar de sentirse en desconfianza.

—Es cierto, traicionó a Junko y a sus seguidores y nos salvó —reafirmó Saihara, quien desvió su vista hacia Maki, pudo notar que con una mirada se comunicaron por completo, tenían cosas que hablar.

—Traicionar suena horrible, sólo no me gustó lo que estaban haciendo y me largué —respondió Amami con cierta sonrisa burlesca.

—Siento mucho interrumpir, pero hay una guerra que terminar —mencionó Celestia mientras se iba directo a luchar contra los vampiros seguidores de Junko, Ouma le siguió enseguida. Amami, por su parte, les sonrió para luego seguir a los demás.

—Saihara y Akamatsu deben irse, es muy peligroso para dos humanos —dijo Maki con cierto tono de preocupación.

—¿Angie-san no trajo mi arco? ¡Puedo ayudar! —exclamó Kaede.

—No, esto es muy peligroso, los llevaremos a un lugar segu...

Antes de poder terminar otra explosión interrumpió, Kiibo se encontraba peleando con Gonta cerca de ellos, los que los hizo separarse. Kaito cayó encima de Saihara y pronto un montón de vampiros no le dejaron ver bien el camino de regreso. Pudo observar que Maki se había quedado con Kaede.

—¡Mierda! —exclamó enojado.

—No tenemos tiempo para esto, ¿cómo piensan derrotar a Enoshima? —le preguntó Saihara— No permitiré que asesinen a Iruma-san.

—Ouma es nuestra salvación, jamás mataríamos a Iruma —le respondió con total seguridad—. Ouma la salvará.

—¿Pero có...?

En ese momento una risa se escuchó, era Junko.

—Mierda, tengo que llevarte a un lugar seguro, no puedes seguir aquí —dijo para luego cargarlo e intentar llevárselo, sin embargo, muchos vampiros lo impedían, como podía, se deshacía de ellos con una sóla mano. La sangre de Kaede le había dado la suficiente fuerza, sus ojos rojos, sus garras y colmillos, su sentido del oído, su rapidez, todo era más poderoso.

Pudo observar que ahora Celestia se encontraba peleando con Kamukura, aquello era algo temible. Debía ser rápido para poner a Saihara a salvo, y esperaba Maki hubiese podido sacar a Kaede. Tras unos minutos sintió un fuerte golpe en el suelo. No supo que era lo que había pasado, suponía era nuevamente Kiibo peleando con Gonta, pero luego de eso unas llamas de fuego salieron a la luz, puedo escuchar la voz de Celestia, que luego desapareció lentamente.

No... no podía ser.

—¡Hajime! —entre todo el derrame de sangre, pudo escuchar a Nagito gritando el nombre de su esposo, se suponía él no debía salir hasta que Himiko y Angie lo ordenaran. Sin embargo, Nagito en ese momento sólo pensaba en salvarlo. Eso lo podía entener, haría lo mismo por Kaede— Detente, esto no es lo que queríamos para nuestra luna de miel —intentó conversarle para que pudiera llegar a Hinata.

—¡Komaeda no te acerques, es peligroso! —exclamó Kaito, en ése momento no sabía que hacer, tenía a Saihara, pero Komaeda era la única salvación contra Kamukura, si ése demonio lo asesinaba, estarían perdidos. Después de todo era un ángel, el único que podía contra un demonio. Además, de ser el único quien podría devolver a Miu a ser humana una vez Ouma lograra su objetivo.

Know under skin [Kaito x Kaede] + [Irouma/Saimaki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora