Apostar Y Perder. ♡Dr. Stone. SenkuHarem♡

Mala suerte.

Senku se sentía, para variar, muy bien, muy tranquilo. Tan bien y tan tranquilo que le preocupaba puesto que él, con la mala suerte que se cargaba desde nacimiento, nunca podía estar más de dos horas sin sufrir así sea la mínima catástrofe.

Ahí, a unos metros del taller de Yuzuriha, se permite respirar con tranquilidad y disfrutar la calma que sentía en ese momento.

Sabía qué, al entrar, su calma iba a desaparecer.

Había dormido prácticamente todo el día, y vaya que lo había necesitado. Cuando abrió los ojos, eran casi las 5:00 PM, 12 horas aproximadamente había estado en aquella cama. En cualquier otra ocasión se hubiese sentido agobiado por haber desperdiciado todo un día de trabajo, pero desde que se acostó había decidido que ese día se lo iba a tomar libre.

Si, se había tomado un día libre por voluntad propia, tanto le había afectado la pijamada esa.

Al momento de abrir los ojos, y después de tomarse sus respectivos minutos para acordarse de su nombre y de dónde estaba, se dio cuenta de que, aunque la mayoría de los demás comandantes ya se encontraban despiertos desde antes, aún estaban con él en la cama.

Chrome era un caso totalmente perdido, dormía profundamente aferrado al brazo del científico. Por información de los demás, al parecer el aldeano solo se había despertado a tomar agua, hacer pipí, y había vuelto a la cama.

Ryusui se estaba haciendo el tonto, no estaba dormido porque lo habían escuchado reírse de un comentario de Ukyo, pero seguía acostado sobre Senku con sus ojos cerrados.

Ukyo y Tsukasa mantenían una buena charla sobre un anime que se habían visto miles de años atrás, estaban contentos de poder hablar de cualquier cosa menos de trabajo. Hablaban en voz baja y con cuidado para no molestar a los demás.

Gen se mantenía al margen de todo, tomando una botella de su Coca-cola mientras comía de lo que le había ofrecido Francoise ya que se había despertado hace poco y se estaba muriendo del hambre de una forma no irónica, si no comía algo le iba a dar el babiado.

Alguno de ellos se había levantado de la cama en algún momento ya sea para comer o ir al baño, o simplemente para estirar las piernas, pero todos, absolutamente todos no habían dudado de regresar al lado de Ishigami a pesar de que el científico no se los había pedido.

Senku sintió cálido en el pecho, y cosquillas en el estómago.

Al pueblo le había extrañado despertar y no encontrar a los generales dando las indicaciones del día. En un principio pensaron que tal vez se les había hecho tarde o que tal vez estaban en una reunión muy importante, pero, cuando dieron el medio día y ninguno había dado un solo signo de vida, se dieron cuenta de que algo ocurría.

Así pues, después de buscarlos un rato, Francoise los había encontrado durmiendo en la habitación de Ryusui. No entendía absolutamente nada, pero elle no era quien para interrumpir el aparente íntimo momento que estaban compartiendo, por lo cual simplemente los dejó estar y fue a comentarle a los demás lo que ocurría. Después de eso, entre Koharu y Ruri se dieron a la tarea de decirle al pueblo lo que les correspondía ese día.

Pero bueno, ahora, después de haberse dado un laaaaargo baño, ponerse su ropa usual y haber comido hasta más no poder, volvemos al inicio, donde se encuentra parado delante del taller de Yuzuriha con la ayuda de su muleta para no arruinar la mejoría de su tobillo.

No había ido porque le entusiasmaba imaginar que ropa le iba a brindar la chica aquel día, si no porque, entre otras cosas, necesitaba hablar con sus amigos.

Hablar sobre lo que había ocurrido con él ese día más temprano, y lo que había ocurrido milenios atrás.

A ellos nunca les había mencionado algo sobre el fallecimiento de sus padres, inclusive Yuzuriha no tenía idea de que Byakuya era su padre adoptivo y no biológico, pero sentía que tenía que contarles, se los debía.