02. OPENAWA (+18)

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||| AVISO |||

- El siguiente capítulo tendrá escenas fuertes de sexo y alcohol. Si es sensible a este tipo de contenido, no continúe leyendo.

- Soarinng en esta novela será llamado por su nombre verdadero. (Daniel)

Disfrute de la lectura.

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Grandes faroles iluminaban las veredas del campus, permitiendo la vista de los peatones en aquella noche de febrero.

Da Rey caminaba por la acera junto a su compañero de habitación y ahora nuevo amigo, Diego Aquino, mientras hablaban de temas triviales como el clima. Llegando al jardín principal de la universidad, donde se conectaban los diferentes edificios de las diversas carreras y clases, lograron divisar al centro una gran cúpula de jardín; sus pilares contaban con innumerables detalles, pero sus colores estaban desgastados, al igual que el suelo. Del techo colgaba vegetación de un tono verde fuerte, que caían hacia abajo en forma de lianas.

Dentro de aquella construcción había todo un equipo de sonido, cornetas, micrófonos, un panel de control para controlar el audio y más aparatos electrónicos. A los lados de la cúpula descansaban grandes estandartes con las insignias del internado Wennessy, junto a un cartel de bienvenida. Además, habían sillas por todo el jardín, para que los estudiantes pudiesen sentarse y descansar.

    Al rededor de todo el campus, habían diversas zonas de juegos, recreación, descanso y otras de trabajo e investigación, todas organizadas por distintos personales de la universidad con ayuda de universitarios de los últimos años. Parecían ser los puestos que uno ve en un evento como una convención de anime o de cómics en Estados Unidos.

Las personas se iban acercando poco a poco al jardín central, paseando por los puestos, para llegar a la cúpula central y tomar asiento, mientras esperaban a que la directora estuviese lista para dar su enunciado. Así mismo estaban Da Rey y Diego, quienes se distrajeron viendo un puesto que tenía en unas mesas recuerdos de la universidad, y diversos artículos para festejar, como pompones, confeti, chapas, silbatos y más; los chicos agarraron un par de chapas y se marcharon en dirección a la construcción con el sonido.

 
Estos se limitaron a permanecer de pie junto a la multitud, teniendo así una mejor vista al momento de la bienvenida. Con prisa, las personas se comenzaron a acercar, hasta el punto en que apenas se podía caminar entre la muchedumbre.

Aquino disgustado por estar tan atrás, rápidamente comenzó a avanzar entre la gente para tomar un lugar donde viera mejor; y de manera inconsciente, Da Rey siguió tras él, dejándose guiar por el más alto. Debido a la gran multitud, el de cabello azabache tropezaba con las personas, haciendo que cada vez se alejase un poco más del contrario. Tratando de apresurar el paso, atravesó al gentío lo más rápido posible. Pasaron un par de segundos así, hasta que Juan Diego notó la ausencia de su compañero, por lo que al voltearse, salió corriendo en su búsqueda; una vez lo ubicó decidió agarrarlo de la muñeca para no volverlo a perder.


- Quédese a mi lado- Dijo Aquino, mientras tomaba fuertemente de la muñeca al más bajo.


Se mantuvieron agarrados del otro hasta llegar a un rincón donde tenía más visibilidad y podían escuchar mejor.


Al pausar la caminata, el de ojos miel notó el contacto de su mano con la piel del contrario, provocándole por cuarta vez en el día una descarga eléctrica junto la ola de calor que lo confundía mucho. No sabía porqué le pasaba eso cuando mantenía contacto físico con el chico de lentes. Estaba consciente que ya tenía que soltarlo, pero aún no quería.

𝓦𝓮𝓷𝓷𝓮𝓼𝓼𝔂'𝓼 𝓓𝓪𝔂𝓼 |  𝓓𝓾𝔁𝓲𝓷𝓸 (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora