𝓦𝓮𝓷𝓷𝓮𝓼𝓼𝔂'𝓼 𝓓𝓪𝔂𝓼 | 𝓓𝓾𝔁𝓲𝓷𝓸 (En edición)

11. Felicidades

                                           ||| ACLARACIÓN |||

- Es muy probable que este capítulo tenga errores ortográficos notorios que pasé por alto, pero aún así lo quiero publicar para no dejar el día de hoy sin actualización.

- Quizás esto no sea interés de nadie, pero como mi cumpleaños es nueve días, estoy de vacaciones con mi familia, así que posiblemente no tendré tiempo de actualizar diariamente esta historia, así que nos vemos el miércoles con otro capítulo, no mañana.

- Disculpen la tardanza y los capítulos tan cortos, pero siento que no puedo saturar tanta información en un solo episodio, así que la novela es para largo, ni por la mitad vamos.

- Sin nada más que agregar, disfruten la lectura :).

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Ética. Principios y fundamentos.


Leyendo el título del libro, el azabache iría directamente a la página número cuarenta y dos, buscando los puntos claves que necesitaba para su evaluación.

Estaban a cuatro días de terminar febrero, y su primer trabajo se hacía presente entre las asignaturas. La profesora de Ética y responsabilidad social había solicitado un análisis personal de la ética profesional y su importancia para el mercado internacional, por lo que Da Rey se pondría manos a la obra para realizar cuando antes su trabajo.

A pesar de que era individual, concordó con unos compañeros de clases para aliviar la tarea y hacerlo juntos. Invitándolos a su casa, Da Rey los recibió en su salón principal; la primera en pasar fue una rubia de estatura bastante alta, pasando al azabache por un par de centímetros, con ella venía un chico de contextura gruesa y poca barba, con los cabellos largos cayendo por sus hombros, y ojos tan oscuros como la noche.


Estos chicos no eran amigos de Da Rey, pero se consideraban buenos compañeros de tareas.

Sentados en el sofá, se esforzaban por realizar su análisis cuanto antes, ya que era una evaluación algo tediosa.

- ¿Encontraste la explicación técnica del ''Juicio moral''?- Preguntó la chica, quien se encontraba sentada en el sofá con una laptop en su regazo, escribiendo su trabajo en word.

- Sí; aquí está- Respondió Da Rey, pasándole el libro que tenía entre sus manos.

La chica comenzó a escribir en su computadora portátil, realzando el sonido de las teclas en la sala, la cual estaba algo silenciosa. Ocupados en la tarea, el chico robusto desvió la mirada hacia los largos ventanales que deslumbraban en la sala, permitiendo ver con claridad las zonas verdes de Wennessy.

En el proceso, Da Rey escribía con insistencia en su celular, preguntándole como por séptima vez a Diego si de verdad prefería quedarse en su habitación en vez de aprovechar y hacer sus respectivas asignaciones; sus constantes preguntas recibían la misma respuesta: No, Diego no quería salir a hacer nada. Prefería quedarse en su habitación.

Mostrando una mueca en su rostro, Da Rey fue interrumpido de sus pensamientos al escuchar al chico hablar justo a su lado.

- Tienes una vista hermosa desde acá, Da Rey- Comentó.

- Gracias- Respondió el chico, volteando en dirección al exterior. Allí vería el campo de Wennessy, la pradera de girasoles y el lago al fondo.