Sproier y shippeo. ¿Hay algo mejor?

*Inserte música norteña*

Teníamos a los héroes suplicando a todos los Dioses (aunque estos valían pa' pura mi-sa) porque todo esto fuera uno de sus típicos malentendidos.
Porque realmente se negaban a que las cosas fueran como lo estaban imaginando con la poca información que Fargan tenía.

Si bien sabían que Brayan y Bobby convivían más al llevarse menos diferencia de edad (solo 1 año y medio), era raro pensar que esto tenía otros fines.

Estando todos reunidos en la casa Rubegetta mientras esperaban que los menores volvieran.
Al llamar al castaño solo alegaron que estaba oscureciendo y era momento de irse a dormir, teniendo también el comentario de "tu madre no sabe siquiera que te deje salir."
Para que no tardasen tanto.

Siendo Luzu y Veg quiénes sintieron que se les iba el alma cuando notaron esas mejillas sonrojadas y el cabello mal arreglado de ambos al apenas cruzar la puerta.

- Ehm- Brayan les dió una mirada confundida- ¿Pasó algo?- seguia intentando recuperar el aliento después de subir tantas escaleras.

- Mi niño, hijo. Sabes que puedes decirnos todo, ¿Cierto?- quiso hablar lo más calmado posible aunque internamente estaba en pánico.- Y que quizás al decirlo, podremos ayudarte a manejarlo.

El castaño asintió no muy convencido.
¿Qué mosca les picó?

- ¿Te gusta alguien, mi niño?

Quiso negarlo, fingir demencia, pero no pudo.
Incluso le dió una leve mirada a Bobby en busqueda de ayuda, lo cual se malinterpreto mucho.

- Puede...- susurró viendo que el suelo efectivamente era de suelo.

-¡Es que de toda la gente del pueblo y te metes con tu sobrino!- gritó Rubius llamando la atención de todos.
Vaya, que se le había pegado la sutileza de Veg.
Cuando vio llegar a todos no entendía que había pasado mientras se hacía cargo de Sammy, casi siente que le daba un ataque al creer que Sapo estaba haciendo de las suyas otra vez, pero conforme le fueron explicando, pasando por las fases de negación, ira y una no bien tomada "aceptación" necesitaba saber la verdad.

Había caras de sorpresas, unas que aguantaban la risa y dos en especial que estaban demasiado confundidas.

- ¿Qué?

- No nos mientan más.
Sabemos lo que se tienen Bobby y tú. Si hay que ser pendejo para no verlo.- comentó Quackity esperando que con ellos, ambos chicos soltaran la sopa.
No tenía porque ser lo que los mal pensados de sus amigos y esposo creían.
¿Verdad?

Y cuando el de overol se puso completamente rojo fue turno de Quackity de sentir que le dolía el brazo izquierdo.

- No mamen...
NO MIJITO, ¿POR QUÉ?
¿POR QUÉ TAMBIÉN SALISTE FURRO CON PREFERENCIA A LOS OSOS?

Ahora estaban confundidos y más asqueados.

Brayan volteo a ver a su sobrino para luego darle una mirada a los adultos en la habitación.
¿Acaso se referían a lo que él creía?
De todo lo que podía ser posible que ellos estuvieran haciendo juntos y se van por la más inapropiada.

- No, no.
Me niego a dejar que piensen que ando con cosas de esas.- que iba a vomitar si seguían insinuando que él tenía una... Aguanten que hasta pensar en esa palabra le hará regresar su cena.
-¡Bobby quiere pedirle a alguien que salga con él y yo le estaba ayudando!
¡No puedo creer que todos sean una bola de tontitos! - fue su turno de gritar con todas sus fuerzas. Estuvo a muy poco de usar otra palabra pero no quiere que luego Veg le lave la boca con jabón.

Y ojalá le creyeran o esto los dejaría algo perturbados.

¿De verdad creyeron que tenían algo más allá de lo familiar?

Era jodido que pensaran que tenía ese tipo de gustos.
Será rarito pero no tanto.
Otaku, claro que sí.
Furro, por herencia.
Pero jamás norteño.

- Entonces, ¿Bobby y tú no estaban...? Ya saben.- Preguntó Rubius ya más calmado.

Ambos negaron.
No tenían porque mentir.

- ¿Y qué hacían entonces en aquel lugar fuera del pueblo y en la tienda de juguetes para mayores?

Bueno...
A veces si hay que mentir.

Porque una cosa es decirle a tus padres que alguien te gusta y otra que tienes cierta curiosidad por ciertos temas...
Los cuales incluyen bastante contacto físico.

Solo que sabían que esto no se dejaría pasar, tendrían suerte si les dejaban a solas.
Que luego tendrán esas ideas raras donde se pueden poner a jugar a la casita...

Familia de locos.

Y si se preguntan porque Spreen y Roier no estaban presentes, bueno...
Digamos que cuando les llamaron, hubo sonidos que no tenían porque escuchar y era mejor darles más tiempo a solas.

Que ojalá con esto no haya más bebés en camino.

Ya alguien que les de un condón en el pm antes que ropita para el nene.

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Esto se me ocurrió a lo pendejo.
Que si lo pensamos bien, tenía sentido (?

Y aquí tengo una pequeña actividad para ustedes.

¿Quiénes son los que traen enamorados a los peques?

Quien adivine se gana una dedicación y un cap especial de lo que quiere ver con todos los personajes de este AU.
Incluye what if...?
Preguntas y respuestas
O un capítulo hablando del tema que sea más de su interés.
Puede ser en formato Twitter o escrito ~
Les doy de aquí al viernes para adivinar.