Capítulo 17: Bailes y danzas

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Otra vez, aquella araña grotesca que me atormentó en esa pesadilla que tuve hace unas semanas, apareció para perseguirme por una calle larga y estrecha.

Pero ya no tengo miedo.

Dejé de correr, me quedé totalmente quieta, mirando a la araña y sonriendo.

La araña se acercó a mi, y yo solo esperé a que se acercara más, y como por arte de magia, la araña grotesca volvió a su composición original, convirtiéndose otra vez en mi padre.

—Mia... ¡Mia! —me dijo mi padre emocionado.

—¿Papá? —sonreí con más intensidad.

Mi padre me abrazó y yo le abracé de vuelta.

—Papá, ya no voy a huir, ya no tengo miedo. —le dije.

—Hija... No se que ha pasado... —miró al suelo —. Pero siempre hablamos a través de los sueños, que suceden en tu cabeza —mi padre tocó mi cabeza con su dedo índice —. Si tu cabecita no esta en orden, pueden ocurrir cosas como estas.

—Papá... Ahora que has dicho que es un sueño no tardaré mucho en despertarme... —miré al suelo triste, sabiendo que el sueño pronto se iba a acabar.

—Hija, solo necesito decirte lo mucho que te quiero.

Me desperté. Estaba en la casa de Andria, durmiendo junto a Dean. Él estaba durmiendo cómo un bebe, aunque ya fueran las once. Me levanté, y al ir a desayunar, me crucé con Andria, quien estaba fumando en la cocina.

—Buenos días Mia... —me saludó apagada.

—Buenos días Andria —traté de sonar más enérgica —. ¿Todo bien?

Andria estaba mirando por la ventana, y tenía una expresión algo melancólica.

—¿Puedo contarte un secreto, Mia? —me preguntó.

—Claro. —respondí.

Andria le dio una larga calada a su cigarro. Después de eso, suspiró, para después proseguir con la conversación.

—No puedo pegar ojo desde que Kaiser me dijo una cosa —soltó Andria —. Por lo que dice, el Comandante Fei siempre parecía estar muy seguro de poder detener a Rom cuando él quisiera.

—¿Y eso a que te lleva? —traté de entender su reflexión.

—Creo que tenemos un sapo en la 3F. ¿Te acuerdas cuando te uniste? En esa época, prácticamente cada paso que dábamos teníamos a la policía detrás —le dio otra calada a su cigarro antes de continuar —. Es todo demasiado extraño...

Andria se notaba realmente preocupada.

—Si eso fuera así, Fei habría detenido a Dean en vez de intentar detenerme a mí —señalé —. Seguro que era para darle más confianza a los suyos.

—Recemos por que así sea, Mia... —y Andria apagó su cigarrillo en el cenicero.

No tiene sentido... ¿Un sapo en la 3F? No puede ser verdad.

—Bueno Mia, ahora voy a quedar con el líder de los manifestantes —me dijo Andria —. Él se piensa que soy una simple inversora social que quiere comprobar si su proyecto es lo suficientemente bueno como para aportar una donación.

—¿Y cuál es tu idea realmente? —pregunté.

—Quiero comprar a los manifestantes —sonrió —. Si bien no son una banda, son gente violenta que nos puede servir de mucha ayuda.

—Entiendo... ¿Quieres que te acompañe? —la pregunté.

—Si... Te aviso que el líder de los manifestantes es un viejo amigo que está algo... Desequilibrado...

Un pasado sin resolver (EN REFORMAS, ACTUALIZADO SOLO HASTA EL CAP 13)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora