Capítulo 1: Sombra

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—Entonces le dije que no, que tenía que currar y al final no salimos de fiesta. Nunca me ha gustado mucho salir —me dijo, mostrando cierta seguridad.

—Si, eso está bien. —respondí, sin haberle prestado demasiada atención.

Bueno, yo me llamo Mia. Soy una chica de 26 años. Si te preguntas donde estoy, estoy en una cita con un chico con el que tuve un match en Rinder. El chico lleva toda la cita cagándola, lo que se suma a que no tengo mucho interés en él de por si...

—Bueno, mañana también tengo que currar, a ver si me avisas para una segunda cita... —continuó, con su tono monótono —. ¿Te importa si pagamos a medias?

—Si, sin problema. —respondí con rapidez.

Sinceramente, ni yo ni mi familia estamos para permitirnos ciertos lujos, pero no quiero tener ningún tipo de deuda con alguien como él. ¿Por qué ningún hombre es capaz de hacerme sentir nada diferente?

—Venga, guapa, nos vemos. —se despidió, dándome dos besos.

El chico se levantó de la mesa y se fue a su casa. Tampoco se le veía muy contento con la cita.

—Ya es medianoche... —pensé —. Tengo la sensación de haber desaprovechado toda la tarde aquí.

Creo que mañana tampoco iré a la universidad, así que supongo que debería llamar a Jera para avisarla.

—¿Si? —Jera contestó el teléfono —. Mía, ¿por qué me llamas a estas horas?

—Es que, me han surgido unos contratiempos y mañana no voy a poder ir a la universidad —dije —. Sólo era eso, lo siento.

—¿Contratiempos...? —me respondió con un tono burlón —. ¡A ti lo que te pasa es que has estado en otra de tus citas! ¿Qué tal ha ido? ¡Cuéntame!

La actitud de Jera puede resultar un poco agobiante a veces...

—Pues nada amiga, no ha habido feeling, no he podido sentir nada con este tampoco. —respondí con paciencia.

—¡Jajajajaja, eres lo que no hay, Mía! —dijo, pasándose de irritante de nuevo —. ¡Si es que nunca te has enamorado! Eres toda una chica dura.

—Bueno, eso es mentira, acuérdate de cuando íbamos al instituto... —dije, expresando cierta molestia.

—Eso no cuenta Mía, ¿Quién no ha tenido alguna vez un amor adolescente? —soltó, desmeritando por completo ese amor que sentí alguna vez —. ¿Acaso te piensas que esto es una historia de romance y que tu querido novio de la infancia va a venir a por ti?

Juro que tuve que respirar y contar hasta tres para no mandarla a la mierda en el acto.

—Hasta aquí Jera —suspiré —, entiendo que estés enfadada conmigo por dejarte tirada en la universidad, pero ya está bien.

Y colgué la llamada. Creo haberla escuchado disculpándose, pero como la colgué muy rápido, no tuve tiempo de escuchar nada.

En fin, ya hablaré con ella...

Por el momento tengo problemas más importantes, cómo entrar a casa sin despertar a mi madre, cosa que sería más fácil si la cerradura funcionará bien.

Inserté la llave en la cerradura, la comencé a girar y... 

*RRRGRRRGRRRG* *RRRGRRRGRRRG*

Tras provocar un estruendo que hizo retumbar todo el edificio, logré entrar a casa. Me lave los dientes, me puse el pijama, y me tiré sobre la cama para reflexionar.

«¿Acaso te piensas que esto es una historia de romance?»

Hay que ver lo hiriente que puede llegar a ser Jera a veces... Aunque ahora que lo pienso, ¿que ha sido de Dean?

Un pasado sin resolver (EN REFORMAS, ACTUALIZADO SOLO HASTA EL CAP 13)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora