Cuando el destino está escrito (secuela)

En el hospital

Todo estaba oscuro cuando Nickole despertó

-¡Rob! Decidme que mi hijo está vivo. Por favor...- lloraba - Decidme que no habéis matado a mi pequeño. ¡ROB! - gritaba del dolor - Mi niño...

La puerta se abrió y entró luz en la habitación

-¿Cómo está mi hijo? Decidme que está bien, por favor

-Vamos, levanta. Tengo que sacarte de aquí.

-¿Howard?

-SSSHHH...Tasha nos espera fuera, vámonos. Tenemos que irnos.

Nickole se levantó y salió de ahí de la mano de Howard.

Cuando se dio cuenta, vio que Howard tenía una pistola en la mano.

-Tranquila, vamos - la metió en el coche - Amor, corre. Antes de que alguien se de cuenta.

Tasha dio marcha atrás y salió corriendo de ahí, avisando a los captores de Nickole

-¡Mierda! - corrió un poco más - Tranquila, Nicky.

-Mi niño, ¿cómo está mi niño?

-Se lo han llevado al hospital junto con Chris. Scott está con los niños.

-¿Chris? ¿Qué le ha pasado a Chris?

-Un ataque de ansiedad muy fuerte.

-No, no, no...- lloró más - No puedo perderlos. No quiero perderlos. Llevadme al hospital, por favor. Vamos al hospital.

-Tranquila, es donde vamos.

Al llegar al hospital, Nickole entró corriendo a la recepción

-Christopher Robert y Robert Scott Evans, señorita. Necesito saber como están mi hijo y mi marido. - dijo agitada

-Tranquila, señora.

-¡Le han pegado un tiro a mi hijo! ¿Es usted madre? Entiendo que no. ¡QUIERO VER A MI HIJO!

-Señora...

-Pago mis impuestos, pago mi seguro médico religiosamente. EXIJO ver a mi hijo.

-Robert Scott Evans está en estos momentos en el quirófano.

-¿Quirófano?

-Severa pérdida de sangre y un impacto de bala en el estómago.

-¿Se va a poner bien?

-Aún no lo sabemos, señora Evans. Tranquilícese.

-NO ME PUEDO CALMAR. Hablamos de mi hijo. No puedo calmarme.

-Nicky...- la abrazó Tasha - Tranquila, Rob tiene que estar bien - empezó a llorar - Va a estar bien. Va a estar bien...

Chris salió por la puerta de urgencias y en cuanto vio a su mujer fue a por ella

-¡Mi amor! ¡Mi vida! ¿Estás bien? - la besó- ¿Te han hecho daño?

-Sí, estoy bien. Howard y Tasha me ha salvado a tiempo. ¿Cómo está Rob?

-Estaba perdiendo mucha sangre, Nicky...pero se va a poner bien. Se tiene que poner bien. - se puso a llorar él también