Cuando el destino está escrito (secuela)

El pasado nunca se va de el todo

Al día siguiente, cuando los niños se habían ido todos a clases, Chris se quedó a solas con Nickole.

-Ei...hace días que quiero hablar contigo sobre el viaje a Italia y ese tal Carlo.

-No tuve nunca nada con él.

-Lo sé. Él mismo me lo dijo. Pero me dió un par de cosas. Más de un par, en realidad. Voy a por esas cosas y te las bajo, ¿sí?

-¿Qué cosas? - lo miró extrañada

-Tú solo espera aquí y yo te las traigo - la besó antes de subir a la habitación.

Cuando bajó, lo primero que le enseñó fue la cadena.

-¡Oh, Diós mío! ¿La tenía Carlo?

-Sí. La estuvo guardando para devolvértela cuando te volviese a ver y me la dio ese día. Lo que también me dió, que aún no he leído, es esto - puso encima de la mesa un taco de cartas.

-¡Waw! No me acordaba de estas cartas. No sé ni lo que puse en ellas. Ahora tengo miedo que una de estas destroce nuestro matrimonio.

-Como si alguien o algo pudiera hacer eso. - se sentó a su lado - Voy a abrir la última suponiendo que es la primera. Espero no equivocarme.

La abrió poco a poco y dentro vió una flor muy aplastada.

-Léela. Ahora me causa curiosidad.

-"Chris, lo siento mucho. Siento mucho haberme enfadado contigo cuando realmente no tengo derecho a hacerlo. Los celos son algo que no puedo controlar por mucho que me esfuerce. Scott dice que estás bien y que estás trabajando mucho, pero yo te echo inmensamente de menos cuando te vas y no contestas los mensajes. Sólo quiero olvidar que siento esto y volver a ser los hermanos que éramos. Quizás nunca leas esto, pero te amo. Siempre tuya, Nicky.
PD: Me encantan estas flores. Las estaba mirando mientras escribía esta carta. Solo espero que algún día pueda ser igual de bonita por dentro como lo son ellas por fuera"

-¡Waw! - se puso a llorar Nickole

-Es...

-...algo inusual en una chica de quince años. Lo sé.

-Es muy bonita.

-Me siento súper vulnerable ahora mismo.

-Te amo- la besó - ¿Leémos otra?

-Claro.

Chris abrió la siguiente y empezó a leer:

-"Hola, Chris. Ojalá no estuviera escribiendo esto para quemarlo o dejarlo en una esquina en cualquier momento. Pensé que estando con los chicos y la gira me iba a olvidar de lo que siento e iba a disfrutar las vacaciones, pero no puedo. De nuevo estoy mirando esas flores rosas que me gustan tanto. Las miro y pienso en que me gustaría que algún día me regalaran un ramo de esas flores. ¿Cuándo te volveré a ver? ¿Leerás algún día estas cartas? Pienso escribirte una cada vez que piense en tí. Aunque me quede sin mano, tinta o papel. Espero que te estén tratando bien. Te quiere, Nicky"

Nickole miraba los trazos de su letra y no podía aguantar el llanto.

-Mi Nicky...esto es...lo siento tanto.

-No leémos esto para que pidas perdón, Chris.

-Este año estuve muy triste porque no quisiste ni verme para tu cumpleaños. Pensabas en mi. A pesar de que yo te llevé a mi chica a casa, tu pensabas en mí cuando más debías olvidarte.

-Te lo dije. Siempre te he amado muchísimo. Pero si recuerdo las siguientes, no són tan bonitas.

-Déjame ver - abrió otra - " Hola, Chris. Hoy te he visto en las noticias de Italia. Me encantaría tenerte delante para darte un puñetazo en tu preciosa cara cada vez que te veo con ella de la mano.  ¿Por qué no puedo olvidarte si me haces tanto daño? Lo tengo decidido, cuando cumpla dieciocho me voy a ir con mis padres a Atlanta y no te volveré a ver nunca más en la vida. No te odio, pero ya no puedo más con este sentimiento que llevo dentro. Almenos tengo las flores rosas delante de mi de nuevo"