Capítulo 6

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No he podido dormir estos dos días.

La piel del rostro y mano de Sebastián desapareciendo lentamente se repite en mi cabeza una y otra vez.

Quiero respuestas, pero solo logro que más dudas vengan hacía a mí.

Esto ya me está cansando.

Mi móvil no ha dejado de sonar desde ayer.

Mi padre y Dexmon están al pendiente de cada una de mis decisiones.

Hoy empezaría mi primer día en aquella universidad.

Ellos necesitan saber qué carrera elegí.

Y me temo que una vez más voy a decepcionar a ese pobre hombre.

...

Como de costumbre ella no aparecía, su madre no preguntaba siquiera por ella y su padre apenas y se despedía de su esposa.

Ton solo se preocupaba por sí mismo, pero sé que apreciaba a su madre mucho más que a su padre.

Aunque me advirtió que solo por hoy me llevaría y sería mi guía en la gran universidad, me dijo que podría ayudarme en lo que se me ofrecía.

Realmente el encajar nunca fue mi preocupación, no tenía las ganas de hacerlo. Como siempre, me gustaba pasar desapercibido.

Su auto era una joya, tal vez no era el más moderno como el de su padre, pero se defendía.

Durante el camino intenté por primera vez hacerle conversación, pero no porque me apetecía, sino que necesitaba saber sobre ella.

-¿Mi prima siempre fue una chica rara?

Me observo extrañado. Noté una sonrisa nueva en él, una débil pero amable.

-Sí, por desgracia.

Se acomodó un mechón que le dificultaba la visión de su vista izquierda y aumento ligeramente la velocidad.

Con esto me dejo claro que no le gustaba la idea de hablar de ella. Aunque no se molestó, planeé seguir aun si eso significaba incomodarlo aún más.

-Su habitación siempre para cerrada y hacen como si no existiera-dije con tono serio.

-Desde que ocurrió la tragedia decidimos no abrirlo más.

Trago un poco de saliva y carraspeó la garganta para poder continuar.

-Es algo delicado para la familia, cada quien lo lleva a su manera, pero no quiere decir que no nos importe lo sucedido.

Sus palabras solo me confundían más.

-¿Tragedia?-dije alterado.

Él me observó extrañado por mi actitud tan repentina.

Pero yo no entendía nada de lo que a él le parecía tan obvio.

-¿Por qué me haces estas preguntas?, ella se ha convertido en un tema muy delicado de tratar, ya te lo dije primo. Por favor no insistas.

-Lo lamento, pero en serio no entiendo de qué tragedia me hablas

-¿Cómo?, ¿no lo sabes?

-¿Saber...?

Ton se distrajo por unos segundos intentando analizar algo que yo debería saber, pero no entendía qué.

En ese pequeño tiempo casi chocamos con otro auto en la entrada de la universidad.

Por suerte era uno de sus amigos, si no nos hubiéramos ganado un problemón.

-¿Qué pasa Ton?, casi me matas viejo.

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