Canciones en papel #1 (BILOGÍA CANCIONES)

CAPÍTULO 35

PEYTON

—Peyton, abróchame el corset —dice Audrey acercándose a mí a toda prisa.

Yo lo hago rápidamente antes de seguir maquillándome.

—Vamos muy sexys de angelitos —dice Cam entrando a mi habitación—. Pero un poco básicos.

—Es lo que hay —dice Audrey—. Tengo contactos, pero a una semana de Halloween poca cosa podíamos encontrar.

—Por lo menos vamos de diferentes colores —dice Cam.

Eso es cierto, menos mal que Audrey tenía un amigo que conocía un tipo que nos dejó la ropa a buen precio, porque si no nos tocaría ir con máscaras a la fiesta de esta noche.

Audrey pidió el disfraz de ángel blanco para ella, el rojo para Cam y el negro para mí, y debo admitir que Cam tiene razón, aunque sea un disfraz un poco básico, vamos muy sexys.

Cam ya está listo y a Audrey y a mí nos faltan unos retoques. Pero tenemos que darnos prisa porque Lisa me ha dicho que ya venía a por nosotros.

Cuando por fin terminamos, me llega un mensaje.

Es Lisa.

"Ya estoy bajo, os espero"

—¿Es Harvey? —pregunta Audrey mientras se pone brillo en los labios.

Yo niego con la cabeza.

—Es Lisa, dice que nos está esperando así que date prisa.

—Voy, voy, voy —dice aplicándose la tercera capa de rímel.

Cuando termina, agarramos nuestras cosas y salimos los tres de casa para reunirnos con Lisa, que nos espera en el coche.

Yo me subo en la parte de delante y Cam y Audrey van detrás.

En cuanto veo a Lisa sonrío porque va vestida de la novia de Chucky.

Ella da un gritito en cuanto subimos al coche.

—¡Pero qué guapos vais! —dice dándome un abrazo.

—¡Tú más! —decimos Cam, Audrey y yo a la vez.

Ella se ríe y arranca el coche para dirigirnos hacia la casa de Blake.

Audrey, Cam y Lisa se pasan el trayecto hablando sobre varias cosas, y yo no paro de reírme porque se pelean cada dos frases.

Cuando pasa un rato, veo que Lisa me mira de reojo.

—¿Estás bien? —pregunta.

Yo la miro un poco confusa.

—Claro, ¿por qué?

—No, por nada —dice.

Entrecierro los ojos porque no me lo creo.

Ella suspira.

—Es que Harvey estaba un poco raro cuando he ido a su casa a dejar a Matt.

Yo frunzo un poco el ceño.

—¿Raro en qué sentido? —pregunto.

—No sé, tampoco he hablado mucho con él, pero Nate me ha dicho que estaba muy distraído —dice—. Pensé que tal vez había pasado algo entre vosotros, pero será que Steve lo está presionando de más.

—Ayer por la noche nos vimos y estaba bien, así que supongo que será eso —digo.

Lisa asiente lentamente con la cabeza y sigue conduciendo hasta llegar a un aparcamiento cerca de una mansión.