Prueba beta

Extra 23

Tae-rim, crecí siendo regañado por mi hermano. Y cada vez que me regañaba, me  golpeaba mucho. Fui golpeado de manera más intencional y durante mucho más  tiempo, de lo que fuí golpeado por Tae-rim en el último día de su Rut.

Cuando era joven,  me obligaron a pasar hambre, escribí 100 cartas de disculpa durante toda la noche, y solía despertarme porque me golpeaban mientras dormía. Una vez me rompí el tobillo, pero me vi obligado a volar a París. 

Por lo tanto, no es culpa de Tae-rim que me haya caído por las escaleras en el pasado. 

No es culpa de Tae-rim que esté herido o enfermo. Siempre ha sido mi trabajo calmar a  mi hermano cuando parecía estar disgustado. Mi hermano mayor me dice cosas buenas cuando los demás están cerca, pero se porta mal más a menudo cuando estamos solos. 

Sinó me regaña rápidamente y lo consuelo cuando está enfadado, luego me pegará  más. 

Por eso. El día de Rut, Tae-rim parecía molesto y dolorido. Yo no lo sabía. Pensé que debía calmarlo. Para mí, era mejor que Tae-rim me golpeara. Era aún más aterrador el  solo pensar  dejar a Tae-rim solo.  Tae-rim, siento mucho haberte hecho saber de esta forma algo tan triste de leer.

Lo siento mucho por las pobres letras coreanas y la extraña caligrafía. Tae-rim debe  haberse sorprendido, pero siento haber escapado de repente. Siento mucho haber  intentado ayudarte sin saberlo. Siento mucho que me guste Tae-rim, aunque yo no sea un Omega. 

Escribí esta carta mientras sudaba y me secaba las lágrimas durante los dos últimos  días. Finalmente, me gustaría entregársela a Tae-rim una vez más con valor. 

Por favor, no te enfades conmigo después de leer esta carta. Por favor, no me digas que  me vaya. Por favor… ¿Podrías hacérmelo saber? No sé qué debería hacer Kang Hae-ah a  partir de ahora. Cómo vivir junto a Tae-rim para seguir siendo tu esposo. Haré todo lo  que me pidas. 

Mi padre me llamaba Joker entre las cartas y mi hermano mayor me llamaba peón entre  las piezas de ajedrez. Dependiendo del uso, puedo cambiar el humor del tablero, y puedo ir a cualquier sitio y hacerlo todo bien. Estoy seguro de que puedo hacer cualquier cosa. 

Así que, por favor, no me deseches y utilízame. Seré una persona útil. Viviré como quieras. Siempre y cuando me perdones. Si me entiendes un poco y tienes paciencia conmigo, seré un buen jugador de cartas y una buena pieza de ajedrez que no se  arrepentirá. 

Así que, por favor, no rompas conmigo. Por favor, no me odies. Está bien si no te gusto. 

Lo entiendo, incluso que no me ames. Aléjame, pero me dejes, déjame atrás, pero no me  dejes solo. Para que estes junto a mi, haré cualquier cosa. 

Por favor, quédate a mi lado.

Con esperanza y amor.  

Kang Hae-ah, quien te pide perdón’. 

Los labios de Cheon Tae-rim están firmemente cerrados. Después de volver a la primera frase y leerla dos o tres veces, se dio cuenta de que la carta llevaba escrita seis años. 

Estaba Kang Hae-ah, que vivió con más fiereza que nadie en una época que no existía. 

Luego estaba Cheon Tae-rim, que leía la vida de Kang Hae-ah línea por línea, como si  estuviera estudiando una historia. 

Porque él sabía lo que era esta carta. El primer y último día que se escapó de casa, y el  día que volvió, fue la carta que le extendió en el sofá de la sala de estar e inspeccionó una o dos líneas.

Desafortunadamente, Cheon Tae-rim, en la prueba, no se dio cuenta  de lo que Kang Hae-ah estaba escribiendo en ese momento. El fiscal general Cheon  Hee-joong fue falsamente expuesto como un político corrupto en las noticias Justo ese día.