Prueba beta

Capítulo 75

Era un problema en el que había estado pensando durante mucho tiempo, hasta la  muerte. Quién plantó las semillas de la desgracia en la recta vida de Cheon Tae-rim… No es nadie más que Kang Il-hae.

¿Es realmente así, o hay alguien más ? Tenía que conocer a mi oponente. Solo entonces podría convertirme en un escudo. Está bien si atraviesas  mi estómago con una lanza, pero no con tus zapatos. 

“Respóndeme…” 

Pregunté con un gemido. 

“¿Es mi hyung, mi… exposición? Reuniendo a miembros del Congreso… Fiscal jefe  Cheon Hee-joong, lo estás tratando de involucrar y estás difundiendo datos falsos en  los medios…” 

Entonces la expresión de hyung cambió de repente. Su rostro reveló los sentimientos  ocultos que estaban llenos de ira. 

“Baja la voz, Kang Hae-ah. ¿Quieres morir?” 

Primero llegaron las amenazas. La idea que pasó por mi mente vagamente, se hizo  aguda de inmediato. 

Levanté la cabeza. 

“No fue mi padre… Fue mi hyung. ¿No es así?” 

“¿Qué, qué… es esa mierda? ¿Tienes alguna prueba, hijo de puta? Lo que no hiciste…” 

“Así es, hyung… Tengo razón, ¿no? 

“¡Baja tu voz!” 

Cuando se levantó, encontró y agarró cosas tan pronto como pudo. El candelabro  sonaba como un poste en su mano. Tan pronto como encontró un reemplazo para el  bastón, me golpeó con fuerza en el hombro. La parte superior del cuerpo que se había  levantado cayó de inmediato. 

En medio del dolor, estaba feliz. Fue mi hermano. 

He sido un tonto durante seis años, estaba confundido. 

No fue mi culpa… 

Esa es toda mi utilidad, y mis habilidades se agotaron y mi padre simplemente me tiró a  la basura … Me culpé a mí mismo, así que comencé a descomponerme por dentro.

“¿Por qué… ¿Por qué me odias tanto?” 

Mi voz, riendo con abatimiento, tembló con una emoción desconocida. 

“¿Qué hice, qué hice mal? ¿Qué hice mal?” 

Volvió a balancear el brazo mientras saltaba. Algo se estrelló en mi hombro con un  ruido sordo, y una parte me golpeó en la cabeza. En ese momento, mi cuerpo se relajó y  mi visión se volvió negra.

No podía moverme mientras estaba aturdido. Mi cabeza zumbaba. Los golpes y las  patadas continuaron sin detenerse. 

Fingí estar desmayado y fingí estar muerto, con demasiada frecuencia… Así que no  pareció darse cuenta de que mi condición era realmente extraña. No estoy actuando  esta vez. 

‘Basta, deja de golpearme. A mi también me duele’.   

El dolor que sentía pronto se nubló. Ya no podía sentir nada. Solo sabía que seguía  golpeándome porque mi visión temblaba de un lado a otro en medio del aturdimiento. 

“Yo también soy una persona… Soy un ser humano…” 

¿Qué pasa si muero después de ser golpeado así? A el Sr. Tae-rim finalmente le  agrado. 

También encontré a Dojin y me felicitaron por mi cumpleaños. La casa que  solía ser fría y sombría ya no está y pasó a llamarse nuestra casa con Sr. Tae-rim. Hoy,  disfruté hablando con él sobre a dónde ir por la noche y qué sería bueno para el menú de la cena… ¿Y si muero aquí?